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Viernes 23 de diciembre de 2005
Afirman que poblados de la frontera y costa fueron devastados por el huracán Stan
Denuncian que las autoridades entregan ayuda selectivamente y para hacerse propaganda
La Jornada
San Cristóbal de las Casas, Chis. 22 de diciembre. Los consejos de Ancianas y Ancianos de Ranchu Gubiña, el Ciudadano Unihidalguense y otras organizaciones y comunidades indígenas de la región itsmeña de Oaxaca anunciaron el envío de “maíz solidario” a las bases de apoyo del EZLN en la costa y la frontera de Chiapas. El grano que envían zapotecos, mixes y chinantecos pertenece a distintas especies “criollas” pues la solidaridad que transmiten es presente y futura: para el alimento y el cultivo de los zapatistas afectados por el huracán Stan en octubre pasado.
La situación de los rebeldes en el área afectada “es muy grave”, señalan los indígenas oaxaqueños. “El gobierno ha utilizado esta situación para hacerse propaganda electoral y ha enviado ayuda selectivamente, incluso las noticias ya publican un enorme fraude económico por parte del gobierno, ya que ha utilizado recursos del Fondo Nacional de Desastres Naturales para sus intereses corruptos de control político.”
Muchas comunidades “no han recibido ayuda”, expresan los grupos del Istmo de Tehuantepec. “Entre ellas destacan, por su situación de rebeldía y resistencia, las comunidades y bases de apoyo zapatistas, especialmente entre Frontera Comalapa y Huixtla (costa)”. Recuerdan que las comunidades autónomas “no sólo no reciben ayuda del gobierno, sino que la rechazan, por dignidad y para no dar ocasión a que el gobierno se aproveche de esta situación y entre en zonas zapatistas”. Señalan que los rebeldes “siempre se han opuesto a cualquier ayuda del gobierno y prefieren la asistencia regional, nacional o internacional”.
El consejo Ciudadano Unihidalguense (que como adherente de la Sexta declaración de la Selva Lacandona participa en la otra campaña) y el consejo de Ancianos y Ancianas de Unión Hidalgo, Oaxaca, junto con el caracol de la ciudad francesa de Marsella (un colectivo solidario con las comunidades zapatistas) se han planteado producir y acopiar “maíz solidario” en el Istmo de Tehuantepec, región vecina a Chiapas.
Cultivos con ventajas
Este maíz criollo y solidario proviene de Unión Hidalgo, Alvaro Obregón y Santa María Xadani (poblados zapotecas o binnizá), así como de las comunidades de Uxpanapa (chinantecos) y de Jaltepec de Candayoc Mixe (ayuuk), “para destinarlo a las comunidades siniestradas, mientras se normalizan las condiciones de recuperación de suelos y las actividades para el cultivo de su propio maíz”.
En el caso del maíz de Unión Hidalgo y la planicie binnizá, se trata de la variedad xhuba’ huini (zapalote chico). Este maíz “tarda tres meses desde la siembra hasta la cosecha y se cultiva en terrenos de temporal, de humedad y de riego hasta tres veces al año; lo que significa una gran ventaja, ya que en las comunidades del Uxpanapa y de Jaltepec encontramos variedades criollas cuyo tiempo, desde la siembra hasta la cosecha, es de alrededor de seis meses”.
Los indígenas oaxaqueños manifiestan. “Creemos que este es un proyecto indispensable, ya que la base alimentaria de nuestros pueblos es el maíz. En estos momentos, en la planicie, es tiempo de cosecha, por lo que es un tiempo muy adecuado para acopiar y enviar a Chiapas, sobre todo por el carácter de emergencia en que se encuentran las comunidades siniestradas.”
Mediante la producción y acopio de “maíz solidario”, los agricultores istmeños pretenden también “recuperar y fortalecer la producción de nuestros maíces originarios; incidir en la reducción de cultivos agroindustriales como el sorgo; evitar el uso e introducción de maíces transgénicos que son los que utiliza la trasnacional Maseca para producir la harina de maíz que circula ya en gran parte del país, e incentivar la comunicación indígena y solidaria entre el Istmo de Tehuantepec y Chiapas”.
En noviembre pasado, esta iniciativa fue llevada a la reunión de los colectivos solidarios de Toulouse, Francia, así como a la Junta del Buen Gobierno (JBG) Hacia la esperanza, ubicada en La Realidad. La junta “respondió positivamente”.
Por lo anterior, apuntan “nuestros consejos están acopiando maíz solidario zapalote chico, a un precio de 3 mil pesos por tonelada”. El primer envío de 7.8 toneladas de maíz ya fue entregado el pasado 17 de diciembre, y su destino final fueron, por decisión de la JBG, las comunidades siniestradas entre Comalapa y Huixtla.
El consejo de Ancianas y Ancianos de Ranchu Gubiña, y los grupos indígenas istmeños Por la Solidaridad con Indígenas de Chiapas también exhortan a la sociedad civil nacional e internacional “a participar económicamente en el acopio y la producción de nuestros maíces”.