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Nota de Clajadep:
Como en todas partes, la profundización de las relaciones capitalistas en el campo acaba en conflictos, los bancos apoderándose de las tierras, controversias de quien es el propietario, fraudes, etc. Ello en Bolivia se ha usado siempre para penetrar y quebrar las tradiciones comunitarias. En este caso se habían distribuido unas tierras en Cochabamba, alquien vendió una parte (libre mercado, claro), el nuevo dueño fue a la región minera en crisis de Potosí y vendió a obreros cooperativistas que con eso en mano emigraron hacia Cochabamba, encontrando que la cosa era otra.
Veamos la noticia de como se enfrentan pobres contra pobres gracias a la propiedad y el mercado:
Mineros reclaman por tierras a asentados
“No nos vamos a mover de aquí porque hemos pagado por la tierra 20 mil dólares entre todos”, dijo ayer Teodoro, un minero que junto a 80 personas más llegó de Colquechaca, norte de Potosí, a Cochabamba para tomar posesión de un terreno, que en parte está ya ocupado por comunarios de la zona de Esmeralda sud en Sacaba.
Los cooperativistas potosinos hicieron un reconocimiento y empezaron a lotear las 15 hectáreas de tierras que fueron adquiridas del supuesto dueño Benito Sejas Alvarado.
“Estamos presentes en este sector juntamente a nuestros hijos y vamos a permanecer hasta que nos entreguen lo que nos prometió el dueño”, señaló Sacarías Paco, quien agarrado de su picota hacía hoyos para colocar postes con púas para delimitar su tierra donde construirá una vivienda.
La Policía envió efectivos a la zona porque se teme que los mineros se enfrenten por el derecho propietario con un grupo de asentados que ilegalmente construyó viviendas de ladrillo en un trozo del terreno.
Los uniformados vigilan la zona en vehículos y continuarán con las patrullas hasta que el asunto sea arreglado.
Los asentados que no cuentan con papeles no quisieron conversar con nadie ajeno a ellos y tampoco dejaron que los medios de comunicación se acerquen “para evitar cualquier susceptibilidad”, según la versión de una de persona allegada que no quiso hacer más comentarios.
Propiedad
El supuesto dueño de las tierras Benito Sejas Alvarado dijo que las 15 hectáreas eran de su propiedad antes de venderlas y mostró unas fotocopias de las escrituras de reconocimiento en Derechos Reales y del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA).
Los terrenos, según las escrituras, fueron compradas por Sejas Alvarado por 450 mil bolivianos de Dionisia Camacho Hinojosa el 12 de julio de 2004.
El propietario aclaró que parte de las tierras se encuentran en demanda en la Fiscalía de Distrito de Sacaba por el asentamiento ilegal de varias familias que construyeron las casas.
Agregó que espera que exista un fallo en los próximos días para derribar las construcciones y así evitar enfrentamientos con los que serían los verdaderos dueños, los mineros.
Las 15 hectáreas correspondían a una zona agrícola y fueron dispuestas para urbanización por la municipalidad de Sacaba hace dos años con el argumento de falta de agua para riego.