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Busca la Cocopa destrabar la suspensión del diálogo en Chiapas
La Jornada
Los integrantes de la primera Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa) se reunieron con los legisladores que conforman actualmente ese grupo de trabajo para establecer una agenda, tendiente a destrabar la suspensión del diálogo entre el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) y el gobierno federal. En el encuentro, efectuado el miércoles pasado, se concluyó que las reformas en materia indígena son insuficientes y se analizó la pertinencia de mantener la Cocopa como instancia de acercamiento y conciliación entre ambas partes.
A la cita asistieron Luis H. Alvarez, Gilberto López y Rivas, Benigno Aladro, Marco Antonio Michel y Héctor Sánchez, de la primera Cocopa, y Felipe de Jesús Vicencio Tovar, Jaime Martínez Veloz y María Luisa Calderón Hinojosa, que forman parte de la actual comisión. Al intercambiar opiniones sobre el proceso de paz, el común denominador fue que la reforma indígena quedó inconclusa.
Los ex legisladores y senadores y diputados emitieron fuertes pronunciamientos sobre la pertinencia de que exista la Cocopa como instancia de conciliación, y determinaron que en dos semanas se volverán a reunir para establecer la ruta a seguir durante los próximos meses.
Acerca de los beneficios que ha arrojado la reforma sobre derechos y cultura indígenas, concluyeron que han sido nulos, porque ni siquiera se han incrementado los recursos económicos destinados a solventar las necesidades básicas de las comunidades étnicas del país.
Jaime Martínez Veloz, diputado por el PRD y presidente en turno de la Cocopa, dijo que la comisión perdió la confianza y la interlocución con el EZLN por “no haber defendido la iniciativa legislativa que se formuló por acuerdo de las dos partes en conflicto”.
Manifestó que la primera Cocopa tuvo éxito y trascendencia al alejarse de las consignas políticas y colocar como principal meta los propósitos de paz.
“Esta despartidización de las acciones de la Cocopa fue un éxito momentáneo del grupo, que al no saber mantener una posición neutral, fue perdiendo presencia y participación en el conflicto. Ahora hay incapacidad orgánica para lograr consensos y lo más grave es que el conflicto sigue latente”.
Martínez Veloz insistió en avanzar en la búsqueda de acuerdos para revitalizar el diálogo. El reto es, dijo, mantener viva la Cocopa en la próxima legislatura, “porque desaparecerla es altamente riesgoso”.
Recordó que el mayor logro de la actual Cocopa es no haber declarado roto el diálogo, y aseveró que la comisión tiene atribuciones legales para declararlo suspendido, en razón de que una ruptura implicaría reactivar las órdenes de aprehensión contra los zapatistas perseguidos.