Los trabajadores de la Minera Escondida, la mayor productora mundial de cobre, situada en el norte de Chile, se declararon en pie de guerra tras rechazar la última propuesta con que la compañía buscaba poner fin a una huelga que el lunes cumplió 15 días.
En la tarde del lunes, tras una votación secreta en urnas instaladas a ese efecto, el 98% de los huelguistas rechazó formalmente volver a sus faenas mientras la compañía no mejore su oferta de aumento salarial.
Los mineros rechazaron de por mayoría abrumadora la oferta, en una concurrida asamblea abierta a la prensa que tuvo lugar un complejo deportivo de la ciudad de Antofagasta (a 170 km de la mina), donde instalaron su campamento desde el inicio de la paralización el 7 de agosto.
Bajo ensordecedores gritos de “¡a morir!”, “¡a morir!”, los trabajadores expresaron su decisión de continuar la huelga y su molestia con la compañía, a la que acusaron de enriquecerse con el trabajo que realizan, en el mayor yacimiento de cobre del mundo.
“Escondida se enriquece a costa del minero chileno”, dice un cartel a la entrada del campamento de los huelguistas, donde los obreros muestran su ira por la falta de solución a la huelga que cumplió ya dos semanas, en la mina que genera 8% de la producción mundial de cobre.
“No queremos migajas, estamos pidiendo el 1% de las utilidades de la compañía”, dijo exultante a la asamblea, Luis Troncoso, presidente del sindicato de trabajadores de Minera Escondida, que agrupa a 2.052 mineros.
“No es solamente dinero, queremos reivindicaciones sociales. Tienen que cambiar las condiciones de trabajo”, agregó el dirigente sindical, ante una multitud de trabajadores que levantaban sus puños.
La compañía a través de un comunicado informó que había mejorado su propuesta salarial, elevando el reajuste de un 3 a un 4%, más un bono de término de conflicto de casi 30.000 dólares, por un contrato colectivo con una duración de cuatro años.
Los trabajadores exigían inicialmente un aumento salarial de 13%, que luego fue rebajado a 10%, más un bono de término de conflicto de 30.000 dólares por un contrato de dos años.
Escondida: mineros consideran “lamentable” eventual contratación de reemplazantes
El vocero del sindicato de trabajadores de la mina Escondida, en huelga desde hace 16 días, calificó de “lamentable” la posible contratación de nuevos operarios por parte de la empresa, la cual reiteró hoy que ese es un derecho que le confiere la ley vigente.
El dialogo entre el sindicato y la mayor productora de cobre del mundo está roto y las posiciones son muy distantes luego de que más de 98% de los trabajadores ratificara, en votación secreta, el rechazo a la última oferta de la empresa.
Pedro Marín, secretario y vocero del sindicato número uno de Trabajadores de Escondida, dijo a ANSA que “sería muy malo” si la compañía, controlada por BHP Billiton, contrata nuevos trabajadores y reconoció que no hay dialogo aún con la empresa, “que es lo que queremos”.
Fuentes de la compañía, en tanto, confirmaron a la misma agencia que no hay disposición a reanudar las negociaciones y dijeron que no comentarán las versiones sobre contrato de nuevos trabajadores.
“No estamos comentando” esa posibilidad, pero “es un derecho que la ley confiere de contratar trabajadores con una oferta mayor a la que tienen”, dijo la fuente.
El reemplazo de trabajadores mediante la contratación de externos es ahora el punto más sensible del conflicto y la semana pasada derivó en bloqueos de los empleados en huelga a los accesos a la mina y al puerto de Coloso, donde se embarca el mineral.
Los 2.052 trabajadores en huelga exigen 10% de reajuste, mientras la empresa ofrece 4%. El sindicato también reclama 50.000 dólares como bono de fin de conflicto mientras la compañía ofrece la mitad.
Los trabajadores en huelga representan 97% de la dotación laboral de Escondida, que produce 8% de la oferta mundial de cobre, con 2,3 millones de toneladas de producción de cobre anual.
La huelga comenzó el 7 de agosto y las estimaciones indican que la empresa pierde unos 16 millones de dólares diarios debido a la paralización.
Escondida tuvo utilidades por 2.918 millones de dólares en el primer semestre de 2006, triplicando las ganancias obtenidas en el primer semestre del año pasado, especialmente gracias al aumento del precio del cobre, que pasó en el mercado mundial de 80 centavos de dólar la libra en los ultimos tres años a más de 3 dólares por libra en agosto.
Gobierno busca darle cierre a mediación en conflicto de Escondida
ANTOFAGASTA.- Una apresurada reunión, para intentar evitar un mayor recrudecimiento de la crisis en que se encuentran las conversaciones entre el Sindicato de Trabajadores de Minera Escondida y la compañía, intenta efectuar a las 16 horas de esta tarde la directora regional de la Inspección del Trabajo, Viviana Ramírez.
La autoridad regional comentó que más allá del rechazo de los mineros de Escondida a la última oferta de la cuprífera, “es necesario darle un cierre a la mediación”, aunque no quiso calificar de fracaso la mediación del gobierno en este tema.
Pese a ello, reconoció que el ministerio del Trabajo busca tener una nueva reunión entre las partes en conflicto, cuya cita, según el sindicato, podría tener lugar a las 16 horas de esta tarde.
Sin embargo, esta mañana trascendió la información respecto al inició de las
contrataciones de reemplazos en minera Escondida, cuya facultad legal ya puede comenzar a ser utilizada por la empresa, dado que ya se cumplieron los 15 días de huelga legal para que la empresa inicie este procedimiento.
En este mismo sentido, cerca del mediodía, el presidente del Sindicato de Minera Escondida, Luis Troncoso, anunció en exclusiva a Radio Digital, que en lo inmediato esta entidad sindical presentará una demanda por eventual práctica antisindical contra Escondida.
Según el dirigente el sindicato de Escondida “cuenta con la información de nombres de supervisores que esta mañana comenzaron a llamar a las casas de los mineros, para que se incorporen nuevamente a sus trabajos”.
Asimismo, se conoció que esta tarde los más de dos mil trabajadores en huelga tienen planeado realizar una marcha por las calles de Antofagasta, cuya autorización estaba siendo solicitada por el sindicato a la Gobernación Provincial de Antofagasta.