Autor: “Raquel Gutiérrez”

Forma comunal y forma liberal de la política: De la soberanía social a la irresponsabilidad civil (rrr)

La tarea está en construir “una analítica del poder que ya no tome al derecho como modelo y como código”, sino que “comprenda la multiplicidad de las relaciones de fuerza” ejercidas en la sociedad, que examine el dominio de su producción y su organización constitutiva y que, por tanto, abandone la concepción de lo social como acuerdo contractual. Avanzar en la lógica del poder, indagando sobre los aspectos más abstractos de su surgimiento y consolidación dentro de las relaciones sociales; colocándonos en medio de ellas, no buscando entenderlo como algo exterior. “El poder no es una institución, es una situación estratégica compleja en una sociedad dad


Es fundamental tener autonomía material, política y simbólica

En esta segunda y última parte de la entrevista con Raquel Gutiérrez, la intelectual mexicana habla sobre la lucha de las mujeres en América Latina, las tensiones en los feminismos y las formas de autonomía como espacio de creación y liberación.


Desde una práctica de superación de las antiguas guerrillas al establecimiento de autonomías comunitarias autogobernadas

Para conectar con las luchas en Kurdistán, sería muy interesante contar cómo la experiencia del Ejército Guerrillero Tupac-Katari (EGTK) entra también en resonancia y tiene ciertas similitudes a la lucha zapatista del EZLN. Ambas son experiencias guerrilleras tardías, desplegándose después de los grandes momentos y de las derrotas de las anteriores olas y prácticas revolucionarias más centradas en estrategias Estado-céntricas.


Forma comunal y forma liberal de la política: De la soberanía social a la irresponsabilidad civil (rr)

1. La universalidad de las relaciones de poder y las formas de la política
2. De las relaciones de poder capaces de autorregularse a los Estados de dominación
3. La soberanía como la capacidad autónoma de decidir en medio de unas circunstancias determinadas para trascenderlas.
4. La soberanía delegada y la IRRESPONSABILIDAD CIVIL: Forma liberal de la política
5. La soberanía social no enajenada O AUTODETERMINACION SOCIAL: Forma comunitaria de la política
6. Las formas liberales de la política como síntesis de los estados de dominación


Desandar el laberinto. Introspección en la feminidad contemporánea. Primera parte

1. Nosotras, hoy | 25 / En el laberinto de la dominación masculina | 26 / Buscando hilos | 45
2. La dimensión material de la dominación masculina contemporánea | 85 / La familia como unidad productiva y reproductiva subsumida al capital y el matrimonio como institución regulatoria de los intercambios emocionales | 86
3. La dimensión simbólica de la dominación masculina | 149 / El espacio simbólico: comprender objetivamente la realidad de una manera subjetiva | 150


Producir lo común. Entramados comunitarios y formas de lo político

En las siguientes páginas, me propongo hacer lo siguiente: en una primera parte, esbozar un panorama ordenado de los múltiples hilos de reflexión que vamos tejiendo entre quienes somos —o hemos sido— parte del Seminario de Investigación Permanente “Entramados comunitarios y formas de lo político” del Posgrado en Sociología en el Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad Autónoma de Puebla. En una segunda parte, presentar de forma ordenada algunas de las síntesis parciales que
hemos ido alcanzando.


Horizontes comunitario-populares. Producción de lo común más allá de las políticas estado-céntricas

Insubordinación, antagonismo y lucha en América Latina / La noción de «movimiento social»: breves reflexiones críticas / Conocer las luchas desde las luchas mismas / Horizontes políticos que brotan desde las luchas contemporáneas: aproximaciones esquemáticas.


Dificultades, rupturas y búsquedas. Una vez más ¿qué hacemos?

Imaginemos el poder ya no como capacidad de dar un orden a un conjunto social y de generar dentro de él una “estructura”, sino como la liberación “caótica” de la energía contenida en los seres humanos y en sus múltiples esfuerzos productivos, culturales, emocio-nales, artísticos, etcétera, que constantemente van produciendo tipos variados de “orden”, que van confi-gurando, no trayectorias definidas de entes definidos, sino diversos “estados posibles de configuración del sistema”


Conocer las luchas y desde las luchas. Reflexiones sobre el despliegue polimorfo del antagonismo. Entramados comunitarios y horizontes políticos

Desde la teoría crítica, se propone pensar las luchas sociales a partir del despliegue de sus contradicciones y de la inestabilidad que producen en el orden existente. Para su comprensión, la autora propone una herramienta metodológica que implica el análisis sistemático, por un lado, de sus horizontes interiores, es decir, de sus aspiraciones políticas; y, por otro, de sus alcances prácticos, esto es, de los rasgos plenamente registrables durante el despliegue de las luchas.


A propósito del trabajo de Silvia Federici: Colocar la reproducción material y simbólica de la vida social y la capacidad humana de producir lo común como punto de partida para la refexión crítica y la práctica política

Deshilvanar para fines analíticos, en pocas páginas, algunos de los hilos más coloridos, enérgicos y resistentes del pensamiento de Silvia Federici ha sido el desafío que me han lanzado los editores del primer número de El Apantle. ¡Difícil tarea la que me han encomendado! Lo complicado del encargo no reside en la enumeración de los argumentos de la querida Maestra Federici, cuya diáfana claridad a la hora de desplegarse asombra y seduce, simultáneamente, a la razón y a la emoción. La dificultad está en brindar una plataforma que haga justicia a la enorme cantidad de asuntos que Silvia critica e ilumina, al tiempo que sugiere pistas al pensamiento crítico


Debemos aprender a mirar el mundo en clave de interdependencia

Debemos aprender a mirar de otra forma: a pensar de dónde tomamos agua, de dónde comemos, quién cultivó el algodón para hacer la ropa que traemos, quién la tejió. O sea, si piensas en interdependencia, tienes que empezar a entender la cuestión global, y dejas de ser un particular, pero de otra forma: no porque te vuelvas un universal, sino porque te empiezas a hacer cargo de los flujos de la vida que son del planeta, de su conjunto. Le tengo un poquito de miedo a la economía de los cuidados, que no vaya a poner una especia de límite que refuerce la diferencia, sobretodo ciudad- campo. Debemos darle la vuelta, poner el énfasis en la conexión; porque el chiste es que estamos buscando nuevas formas de reconectarnos, de tejer una trama de interdependencias que la llamamos comunitaria o popular, que antepone lo que se comparte, se disfruta y se gestiona, y también se produce. Lo común no es cosa: es relación social, es manera de estar.


Forma comunal y forma liberal de la política: De la soberanía social a la irresponsabilidad civil (r)

La tarea está en construir “una analítica del poder que ya no tome al derecho como modelo y como código”, sino que “comprenda la multiplicidad de las relaciones de fuerza” ejercidas en la sociedad, que examine el dominio de su producción y su organización constitutiva y que, por tanto, abandone la concepción de lo social como acuerdo contractual.


Bolivia: la profunda convulsión que lleva al desastre

La cúpula del MAS que hoy renunció, dejó un país incendiado e hirviendo la caldera del odio. Ellos no sufrirán las consecuencias de lo que venga. Cómodamente podrán continuar contando su historia del “golpe-cívico”, negando su responsabilidad y regodeándose en su papel de víctimas, soñando que algún día volverán otra vez como redentores. Las consecuencias de lo que venga, las peleará y las sufrirá la población trabajadora y comunitaria de Bolivia; las sentirán en sus cuerpos las mujeres y las disidencias.
Implosionó un régimen político que se nutrió hace años de una heterogénea y plural fuerza colectiva; energía creativa que después, el propio MAS desconoció y disciplinó subordinándola como clientela. Eso colapsó hoy. Los gobiernos se van, los pueblos quedan. Conviene no olvidarlo.


Pistas reflexivas para orientarnos en una turbulenta época de peligro (r)

¿Qué época estamos atravesando? ¿Qué sentido y contenido tiene -y qué horizontes puede abrir- el conjunto de protestas y levantamientos que está sacudiendo muy diversos lugares del mapa mundial?


Las luchas de las mujeres: un torrente específico y autónomo con horizontes subversivos propios

Hay diversas maneras para acercarse a la reflexión sobre las muy variadas y heterogéneas luchas que las mujeres hemos dado a lo largo de la historia: desde la empecinada lucha de resistencia que desplegaron las llamadas brujas durante los siglos xvI y xvII en una Europa donde a sangre y fuego el capitalismo se abría paso, despojando de bienes y saberes a las comunidades rurales me-dioevales; hasta los sistemáticos esfuerzos de las obreras que durante el siglo xIx se levantaron, una y otra vez, a veces junto a sus hermanos, a veces ellas solas, buscando limitar la jornada de trabajo y exigiendo cierta garantía para la subsistencia a partir de condiciones laborales un poco menos duras para ellas mismas, para sus hijos y para sus hombres


Somos las nietas de todas las brujas que nunca pudieron quemar. Pistas para entender algunos contenidos del levantamiento en marcha de las mujeres de América Latina.

Habitamos un momento extraordinario y ambiguo en América Latina. Ambiguo porque cuando en diversos países se profundiza y recompone el “régimen extractivista” -que incluye un sinnúmero de actividades criminales y un régimen político específico con el que coexisten y combinan- simultáneamente se ha despertado una corriente magmática, radical y masiva, de insubordinación y luchas de mujeres muy diversas que recorre los territorios y las ciudades expandiéndose de un país tras otro.


Colocar la reproducción material y simbólica de la vida social y la capacidad humana de producir lo común como punto de partida para la reflexión crítica y la práctica política. A propósito del trabajo de Silvia Federici

Deshilvanar para fines analíticos, en pocas páginas, algunos de los hilos más coloridos, enérgicos y resistentes del pensamiento de Silvia Federici ha sido el desafío que me han lanzado los editores del primer número de El Apantle. ¡Difícil tarea la que me han encomendado! Lo complicado del encargo no reside en la enumeración de los argumentos de la querida Maestra Federici, cuya diáfana claridad a la hora de desplegarse asombra y seduce, simultáneamente, a la razón y a la emoción. La dificultad está en brindar una plataforma que haga justicia a la enorme cantidad de asuntos que Silvia critica e ilumina, al tiempo que sugiere pistas al pensamiento crítico y guía los pasos de quienes tratamos de seguir su febril ritmo creativo.


Reproducción comunitaria de la vida. Pensando la trans-formación social en el presente

Acercándonos críticamente a la pregunta ¿Es posible la transformación social?, argumentamos que el punto de partida para responderla está en el conjunto de actividades concretas colectivas y/o comunitarias destinadas a garantizar la reproducción material y simbólica de la vida social. Sostenemos que el asunto de la transformación no consiste, ni principal ni únicamente, en el bosquejo de un horizonte abstracto a futuro sino que es un flujo sistemático de acciones de resistencia y luchas en el presente que defienden y amplían las posibilidades concretas de reproducción de la vida ‒humana y no humana‒ en su conjunto.


Batalla campal en México contra violación de una menor por cuatro policías. Furia feminista: desprecio y ausencia de justicia

Una amplia movilización feminista se autoconvoca y se despliega en varias ciudades, reptitiendo una y otra vez que a cada una de nosotras nos cuidan las amigas y que la policía nos viola, nos roba, nos agrede. La brillantina es la marca distintiva del 16 de agosto. Muchas mujeres feministas comienzan a movilizarse en diversas ciudades de la República. En la Ciudad de México, donde están atrincherados los policías violadores -o, con más precisión, estos policías violadores que esta vez fueron denunciados de inmediato; aclaro porque hay mas- se produce una movilización grande y muy muy furiosa. Hay acuerpamiento de mujeres en lucha y también pintas y cosas rotas. Hay hombres golpeadores entre mujeres encapuchadas y, sobre todo hay confusión. Mucha confusión.


Producir lo común para sostener la vida

Vivimos tiempos de crisis de la reproducción social de la vida colectiva. Esto se manifiesta, sobre todo, en la innumerable cantidad de luchas ‘en defensa de la vida’. Estas, como constelación, se han vuelto a desplegar por todo el continente y sacuden a regímenes abiertamente proneoliberales, con tendencias incluso fascistas, y también a los gobiernos que quedan en pie del llamado ‘ciclo progresista’.