Autor: “Vitrina Distópica”

Resignarse e insurgir, la lección chilena

Vivir en condiciones de subyugación y competencia provoca depresión, pero rebelarse colectivamente, detener la vida regular de la ciudad, experimentar formas creativas de vida urbana y de consumo colectivo tiene una función terapéutica, y también puede tener (siempre que nos resignemos a la imposibilidad de totalización dialéctica) la función de inventar modelos de vida social frugal y feliz. La deserción del territorio simbólico del orden establecido actúa como creación de una dimensión simbólica autónoma que puede darse reglas, puede defenderse, puede proliferar – siempre que no pretenda derrocar lo irreversible.