El cansancio de la falsa democracia

21.Abr.11    Análisis y Noticias

El cansancio de la falsa democracia

Por el Profesor J

Durante el gobierno de la Unidad Popular, Chile vivió su período más democrático de la historia por dos motivos:

Primero, porque había accedido al gobierno un conglomerado de partidos con fuerte base en la llamada aristocracia obrera y de funcionarios públicos, partidos de izquierda con un programa de avanzar al socialismo por vía pacífica, lo que llevó al gobierno de Estados Unidos, a la CIA y la ITT a destinar fondos para reclutamiento de opositores y preparación del golpe de estado desde antes que asumiera Allende la silla presidencial.

Segundo, porque desde abajo se desplegó una enorme iniciativa social que consiguió escapar a los partidos burocráticos sin dejar de apoyar al gobierno popular, en la forma de multitudinarios cordones industriales que coordinaban horizontalmente a los trabajadores de industrias concentradas en determinados espacios urbanos. El primero y más llamativo por sus características innovadoras de incorporación masiva de trabajadores a tomar sus propias decisiones de forma autónoma fue el Cocoma, o comando coordinador de Macul, donde una huelga era apoyada por los demás trabajadores y se gestaba una nueva forma de entender y practicar la democracia.

Similares características cumplieron las coordinadoras de Campamentos sin Casa, en que miles de habitantes de las periferias de las ciudades, sectores que nunca habían tenido acceso al trabajo, vivienda o demás reivindicaciones que sólo llegaban a sectores de capas medias a través de la Democracia Cristiana y a la aristocracia obrera dirigida por los partidos de las políticas de los Frentes Populares que seguían el Welfare State, estado de bienestar de Keynes, habían salido a la lucha democrática por sus derechos, en una oleada que se extendía de ciudad en ciudad y de barrio en barrio, elevando el nivel de conciencia y de organización de nuevas capas sociales antes absolutamente marginadas y para los cuales nadie tenía programa ni propuestas, ni aún los partidos de izquierda, dedicados a organizar y estructurar sus bases de trabajadores privilegiados en las grandes empresas mineras e industriales, escuelas y funcionalismo público. Tal era el acuerdo tácito entre patrones y trabajadores, que los primeros construían casas para los segundos y hoy día puede verse aún en algunos barrios las viviendas de los obreros de Yarur, Sumar, Textil Viña, mineras y otras.

Algunos dicen que fueron “conquistas” de los trabajadores, sin embargo fue el resultado de negociaciones por arriba entre dirigentes de los llamados partidos populares con la patronal y los parlamentarios que les representaban, al igual que los actuales tres diputados del Partido Comunista en el Parlamento chileno, que no es ninguna “conquista”, sino el fruto de las negociaciones para obtener el voto decisivo de la Democracia Cristiana y los demás partidos del gobierno de la Concertación para la Democracia, quienes no llevaron candidatos allí para obligar a sus bases a votar por el PC, en tanto este último partido no llevaba candidatos en otros lugares para llevar a su base a votar por el gobierno concertacionista. El conglomerado neoliberal de la Concertación salió ganando porque consiguió incorporar a la llamada izquierda extra parlamentaria al bloque de partidos liberales, democrátacristianos y socialdemócratas, evitando que se acercara a la izquierda detrás de un tercer bloque más popular.

Así, los sectores periféricos por fuera de esas negociaciones de los años 60, descubrieron a través de la acción directa, ocupaciones de tierras y autodefensa, que era posible arrebatar al sistema algunas prebendas que de no entregarse pondrían a los gobernantes en aprietos porque no habían considerado en sus negociaciones por arriba a estos sectores mayoritarios de la sociedad y en muchas ocasiones no les quedó otra alternativa que lanzar la represión estatal en contra de los sectores movilizados. Tal sucedió en el campo, donde miles de campesinos y de comuneros mapuche ocuparon decenas y decenas de fundos para que fuesen considerados en la Reforma Agraria y lanzaron a la palestra política los poderosos Consejos Comunales Campesinos, que se iban transformando en verdaderos órganos de poder popular junto a los cordones industriales y coordinadoras de campamentos sin casa. Una adecuada política de alianzas por abajo entre el MIR, PS y sectores del MAPU, permitió construir los llamados Comandos Comunales de Trabajadores, que movilizaban decenas de miles de personas por comuna detrás de programas populares elaborados democráticamente por la población. Pero los sectores más vacilantes comenzaron a insinuar que esos órganos democráticos de la población fuesen considerados instancias de base de la CUT.

Sin embargo, habiendo instrumentos institucionales y económicos para responder a los requerimientos sociales que iban más allá del cada vez más limitado programa de la Unidad Popular, los partidos del conglomerado de gobierno prefirieron negociar con la patronal, los partidos de oposición y los militares antes que sumarse al movimiento democrático desde abajo que venía creciendo de modo claro y perceptible. Tanto era así que un millón de personas rodeó el palacio de La Moneda debido al intento del llamado tanquetazo, exigiendo la disolución del congreso y armas para el pueblo. Está bien debatir o plantear la discusión desde la burocracia con grupos que llaman a tomar las armas, pero cuando un millón de personas en la calle claman por armamento popular, ya no se trata de posturas politicas o ideológicas, sino de la decisión democrática de la población por vía de la multitud autoorganizada que expresa su sentir de fondo.

Eso mismo está sucediendo hoy día en Bolivia y Ecuador, así como había ocurrido con Brasil, donde los sectores de izquierda burocrática han conseguido arrastrar a sectores de izquierda rebelde a sumar fuerzas continentales por arriba haciendo abstracción y ocultando a los pueblos la realidad. Por ejemplo, el apoyo a Lula fue inmediato, sin considerar que llegaba con un programa neoliberal ni el enorme daño que hacía a los movimientos sociales de ese país. Tal pareciera que muchos colectivos se pusieron egoistas: como Lula expresa una “visión” progresista a nivel continental, cerramos los ojos a su acción contraria a los intereses de su pueblo, con lo que imperceptiblemente nos vamos acercando al apoyo de las corrientes burocráticas, al punto que los más variados destacamentos usan sus páginas para elogiar la burocracia de los otros países sin referirse para nada a las luchas democráticas de la población de allí para ampliar las respuestas estatales o al menos para respetar las deliberaciones democráticas de las organizaciones autónomas desde abajo. Ello denota que engañan a la población de su propio país ocultando las medidas y acciones burocráticas y antopopulares para que luego ellos mismos puedan instalarse como burocracia encima de sus propios pueblos. Poco democrática resulta la acción propagandística de esas organizaciones que esconden las dinámicas democráticas de la autonomía desde abajo.

Por eso no saben qué hacer frente a las metidas de pata de Evo Morales en Bolivia y van a buscar información orientadora en las páginas venezolanas, para ver qué se puede opinar o hacer. Vaya futuros dirigentes de la “revolución chilena”.

En Bolivia los órganos de autonomía y poder popular de los movimientos son justamente los que pusieron a Morales en el gobierno para expresar el mandar obedeciendo, o sea, administrar la cosa pública en función de los intereses sociales definidos por los mismos movimientos y no por los dirigentes del partido MAS, que se supone que se hizo para ser sólo un instrumento social o popular, como dice serlo por ejemplo el Partido Igualdad en Chile, que ojala lo consiga, sin embargo las tensiones contrarias son demasiado poderosas, por ejemplo, estar firmando cada vez que la embajada venezolana lo solicita a través de sus grupos de apoyo, sin ponerse en el lugar de los movimientos de ese país, como debería ser. Esperemos que ese debate sea abierto y no circunscrito solamente a algunos en nivel de dirección.

En Bolivia hoy día existe una enorme tensión social producida por las opciones del gobierno en prestar prioridad al programa capitalista extractivista y depredador antes que a respetar la voluntad de las comunidades respecto al territorio, las formas de vida y la interacción con la naturaleza. Por eso el gasolinazo, que debió echarse atrás.

¿Cómo fue eso? ¿Cómo pudo el gobierno boliviano cometer un error de esa magnitud? ¿Se lo ha preguntado usted?

¿Usted se ha preguntado por qué en Chile Allende y los partidos de la Unidad Popular obligaron a devolver las fábricas ocupadas y en general el conjunto de la economía que estaba siendo dirigida desde abajo por los trabajadores y el pueblo tras el fallido paro patronal de Octubre de 1972? ¿Fue un error? ¿Fue la amenaza del golpe? ¿Acaso el golpe no estaba ya planificado desde antes y pendía sobre la cabeza del gobierno como espada de Damocles? ¿Acaso no era evidente que los militares constitucionalistas estaban siendo desplazados paso a paso por los golpistas?

¿Era concediendo y retrocediendo que se iba a detener el golpe ya decidido desde antes? Hace falta reflexionar algo más sobre el rol de la sociedad en la llamada democracia formal que sin tenerlo escrito permite las negociaciones entre bambalinas, porque ¿qué norma constitucional establecía el marco para que Allende negociara con los militares su participación en el gobierno? ¿A quién le preguntó? ¿Sólo a las cúpulas de los partidos? ¿Por qué la ilegitimidad del gobierno puede ser declarada en el Parlamento por un partido, el Demócrata Cristiano, resultando de ello el golpe y el asesinato de Allende y luego esos mismos parlamentarios que abrieron las puertas al militarismo y el genocidio aparecer como adalides de la democracia sumando a su lado a los mismos partidos allendistas? ¿La virgen aparece como prostituta? ¿Y viceversa? Vaya contubernio.

¿Fueron errores? ¿O negociados?
¿Cuántos “errores” debe cometer Evo Morales antes de que le den un golpe?
Subió el salario de los militares y funcionalismo público, manteniendo bajo y ofreciendo sólo un 10% a los trabajadores de empresas privadas, esperando con eso que la gente vea que quienes se suman al aparato van a estar mejor. ¿Otro error? ¿Concesiones a los militares? Las organizaciones sociales más poderosas se movilizaron en apoyo a la huelga general por el aumento de 15%. El gobierno se asusta y cede, ofrece negociar con ministros. Los movimientos responden que eso es un error, ya que las decisiones las toma el presidente. Discusión entre el poder y la autoridad con movimientos que cuentan con cientos de miles de componentes ¿Dónde queda la democracia? No la hay, todo es juego y rejuego político.

Por otra parte las comunidades originarias no quieren más explotación de hidrocarburos en sus tierras, por salvaguardar la naturaleza, la vida, la salud y la defensa del territorio. Sin embargo el gobierno Morales en vez de oir, reflexionar, estudiar, etc. respecto a la decisión democrática de las comunidades, se dedica a pensar y buscar modos de doblegar la voluntad de los pueblos sin que parezca uso de la fuerza, hasta que descubre la ansiada fórmula, absolutamente original: el dinero, ofrecer mucho dinero. Más miserable que eso no podía haber sido. Comunica la feliz iniciativa a la empresa y abre los cauces para una “negociación” con la Asamblea del Pueblo Guaraní, hasta ahora celosos de su autodeterminación territorial. La empresa ofrece millones de dólares y la APG exige una cantidad de metros desde la obra hacia zonas habitadas o cultivadas, cuidado del medio ambiente y ya, aquí no ha pasado nada, adelante con las máquinas y a extraer se ha dicho.

A eso llaman gobierno progresista y democrático. Del punto de vista formal es impecable, intachable, una negociación como cualquiera otra. La democracia formal ha salido íntegra, sin mácula, sin embargo habrá que ver si está reflejado el anhelo comunitario tradicional de esa comunidad o si se ha impuesto nuevamente el colonialismo sacando las castañas del capital extractivista del fuego con la mano del gato izquierdista. Habrá que sacar lecciones.

En el caso de Correa en Ecuador, la situación es igual o peor, ya que está buscando establecer en alguna región amazónica, ojala Sarayacu, desde donde ha venido la principal resistencia al modelo extractivista personificado en el gobierno Correa, una negociación que permita torcer el brazo de las comunidades, ofreciendo varias ideas “salvadoras” que permitan de hecho atravesar la madre tierra con los extractores que están destruyendo el necesario equilibrio natural. Esa es la democracia formal que se instala para el juego de quien tuerce el brazo a quien.

Correa está lanzando ahora un plebiscito para controlar desde el ejecutivo las acciones y decisiones del poder judicial, incorporando 9 puntos cosméticos cazabobos para que no se perciba el verdadero objetivo, que es acrecentar el autoritarismo presidencial bajo el mando de una “mayor independencia” de ese poder estatal como le llaman algunos analistas, en especial chilenos que han participado en algunos arreglines de la Concertación y ahora se encuentran en Quito para ayudar a pintar la imagen de “progre” del gobierno. Con los otros 9 puntos ha creado una movilización nacional de “cambios” de pura fachada. Se trata de una fina estrategia para atrapar incautos, pero que consiguió reunir a la poderosa UNE, Unión Nacional de Educadores, con la Conaie, Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador, y a otras organizaciones que claramente rechazan el punto de someter el poder judicial al ejecutivo, ya que eso significaría que jueces y procesos entrarían a formar parte del cerco gubernamental contra la población para evitar oposición al modelo extractivista, cerco que aspira a dividir, quebrar y someter el movimiento indígena y popular que desarrolla actividades de participación, reflexión y decisiones en asambleas sociales que ponen así en práctica principios democráticos más profundos que la democracia formal de arriba que permite consolidar el poder de las estructuras por sobre la población.

Lecciones de los “errores” de la democracia formal institucional y posibilidades de desarrollo de la democracia horizontal y local.

Está más que claro que no basta asaltar el poder mediante la vía armada o un golpe izquierdista ni mediante las elecciones, sino que hace falta que la población avance hacia prácticas democráticas locales y cotidianas donde se exprese la soberanía popular y desde donde salgan los candidatos que van a disputar los cargos de dirección de juntas de vecinos, asociaciones, sindicatos, municipios, parlamentos y gobiernos. La hora de los partidos está llegando a su fin, sin embargo es el sistema del poder y la ganancia, quien más se interesa por mantener a los partidos como la manera de incorporar algunas personas al aparato administrativo y legislativo, lugares donde es posible hacer conversaciones y negociaciones a espaldas de la población y actuar los lobbis de empresarios interesados en que se apruebe o rechaze esa o aquella ley. O sea, lo que menos importa es la voluntad popular.

Por ejemplo, la devolución de territorios al pueblo mapuche, cuestión que concita el apoyo de parte importante de la población chilena, pero que no interesa a los empresarios. O las hidroeléctricas de Aysén, que suman el rechazo de practicamente la totalidad de la población de allí, trabajadores, empresarios, autoridades locales, etc.
También la oposición a Pascua Lama, que es asumida por casi la totalidad de la población del Choapa y ahora la refinería de Ventanas, que se ha descubierto que está envenando los alrededores y a las personas.

¿Qué va a suceder cuando la población del poblado de Huertos Familiares, que cuenta con 9.500 personas en la comuna de Tiltil, Región Metropolitana, y está obligada a beber agua sólo de cuatro pozos contaminados con plomo, pida el fin de los relaves mineros de las inmediaciones? ¿Alguien los va a escuchar? ¿Alguna ONG interesada en atraer dinero europeo para sus bolsillos a costa de las necesidades populares? Es posible. ¿Alguna autoridad? Lo dudamos. ¿Alguien de la oposición? Difícil, pues gobernaron 20 años y son responsables de los relaves y la contaminación. ¿Algún grupo anarquista? La gente no los va a pescar. ¿Algún grupo rebelde? Menos. ¿Las redes ambientalistas subordinadas a Rajas? Ay! Ellos son contrarios a la organización de vida comunitaria y a la autonomía del ejercicio democrático local, ya que sólo aspiran a generar “conciencia” opositora que será “canalizada” por los partidos, o sea, agitar las aguas para ganancia de pescadores.

Sólo quedan los propios empresarios. Ellos van a pasar cualquier dinero para hacer una escuela, una nueva sede vecinal, un parque de juegos, un nuevo consultorio de salud, ganando a las autoridades y a las entidades como juntas de vecinos, quienes se encargarán de promover la simpatía en la gente. Así funciona la democracia formal: con el poderoso caballero Don Dinero, como pasó con los guaraníes en Bolivia, o como quiere hacer Correa en los territorios de las comunidades amazónicas, o como pasó con la familia opositora que aceptó dinero en Chile para dejar de oponerse a una hidroeléctrica, o como pasó en Caimanes, donde el dinero de Pelambres levantó una junta de vecinos paralela, o en la caleta de Mehuín, donde el dinero de Celco compró matones para golpear a los opositores, o como va a pasar con el lago en territorio Mapuche junto a las tierras que compró Farkas para extracción minera en terrenos de lahuén (yerbas y plantas medicinales), una de las áreas más fértiles y diversificadas de lahuén del Wallmapu y uno de los pocos lagos sin contaminación, donde los turistas han sido obligados a retirar los motores de los botes y medidas similares aplicadas por la democracia local de las comunidades mapuche, guardianes de la madre tierra. Se entiende que ese empresario farandulero regale puñados de dinero por todos lados para ganar “simpatía” y neutralizar la oposición a sus actividades destructivas.

Esa es la democracia formal: circulación de dinero envenenado y manipulación de conciencias, al más alto nivel, ya que el acuerdo firmado por Piñera y Obana permite la instalación de plantas nucleares y el viaje de Piñera a Francia fue para compensar el cierre de la hidroeléctrica de Punta de Choros con la apertura de otras cinco en otros lugares. Sin preguntarle a nadie, igual que Bachelet, culpable del asesinato de varios jóvenes mapuche y de la ampliación de la represión a ese pueblo.

La gente ha votado contra la Concertación colocando el gobierno Piñera, quien ha sido un buen continuador de las nefastas políticas neoliberales y represivas de los 20 años concertacionistas, lo que le está haciendo perder base de apoyo a pesar de la gran ofensiva farandulera de los reality show del rescate de los mineros y del enfrentamiento a los efectos del terremoto, lo que puede ser anunciador de nuevas sensaciones y expresiones provenientes del campo popular, ya que eso no se traduce en apoyo a la oposición, que no tiene a qué oponerse, pues se trata de su mismo programa y van de show en show como el de la intendente del Biobío, que ahora luce para ser la reemplazante del diputado fallecido de la UDI, el caso Karadima, que la iglesia consiguió sacárselo de encima sumando curas al llamado a la militarización de las escuelas, pero que la jueza no aceptó como movida política e igual allanó las oficinas del abogado encontrando que habían más personas abusadas por el cura aquel. Así uno presiona al otro para obligarle a rendirse, igual como hizo la concertación con el caso Spiniak abierto por la iglesia mediante su cómplice en el parlamento, la diputada Pía Guzmán que destapó la olla.

Democracia de aserruchadas de piso, sabanitas cortas y tiradas de alfombra, donde cada uno intenta sacar al otro del camino, como hicieron con el sucesor del comandante en jefe del Ejército, general Cheire, que no satisfacía al conjunto de los demás mandos, así que lo sacaron del puesto en Magallanes con el expediente de dejar caer al suelo los carnés de identidad de los que asaltaron el consulado argentino en Punta Arenas y que resultaron ser militares, por lo que el gobierno argentino reclamó y crash! cae el jefe militar, el más antiguo y a quien le correspondía ser el próximo comandante en jefe. Gajes del oficio. Si no clavas la cuchilla primero, te la clavan a tí.

Cuando aparece un candidato independiente, popular y con simpatías en la población, que puede descolocar alguna de las piezas de la máquina municipal, lo visitan a él, a sus familiares o colegas, algunas personas que no se identifican, hacen amenazas, ofrecen dinero, dicen tener fotos del candidato con alguien, o mails que escribió o recibió, etc.

¿Continuará?

Jaime Yovanovic Prieto (Profesor J)
profesor_j@yahoo.com