El Congreso Nacional Indígena y el Concejo Indígena de Gobierno denunciamos la situación de violencia y desplazamiento forzado que se vive en la comunidad de Mayabalam, en el municipio de Bacalar, Quintana Roo; comunidad de hermanas y hermanos refugiados guatemaltecos que hace más de tres décadas fundaron el pueblo.
El caso recuerda a las 100 familias de nicaragüenses refugiadas en Costa Rica y que están levantando el “Campamento Campesino”, así como a los refugiados de Santa Marta de El Salvador en Honduras y tantos otros que están haciendo desaparecer las fronteras artificiales levantadas y defendidas por el capital y sus estados.