La biotecnología se está aproximando a la micro-robótica y a la micro-computación hacia el control cibernético de los cuerpos por fuera -15 mil satélites del G5- y por dentro -estudios de trasplantes de microchips en el organismo humano y ahora la inyección de nanopartículas que son ingenios-máquinas microscópicas en la sangre-.
La ciencia-ficción quedó chiquita al lado de los modernos Mengeles sucesores del médico nazi que realizaba experimentos genéticos con los prisioneros que serían gasificados en Auschwitz. Hasta eso hemos llegado. Y pensar que algunos todavía predican la humanización del capitalismo mediante su control por la burocracia partidaria que disputa el estado.