La izquierda progresista y autoritaria de la dictadura de Correa se enfrentaría a la izquierda burocrática ambientalista e indigenista de la directiva de Pachakutik, el partido que fundado por el movimiento indígena terminó dándole la espalda en un giro electoralista. No hay duda que entre ambos, la población y la derecha se inclinarán a apoyar al Pachakutik, sin embargo el fiel de la balanza estratégica está en el movimiento indígena con sus formas propias de organización por abajo como las asambleas, los parlamentos populares regionales, la autonomía y los autogobiernos locales, todos ellos pondrán a prueba a un gobierno indigenista como los cordones industriales y consejos comunales campesinos en Chile pusieron a prueba a los partidos de la Unidad Popular que se arrojaron contra el protagonismo social en la misma forma que el presidente progresista mexicano ataca con sus megaproyectos extractivistas a las comunidades que defienden sus territorios.