No vamos a pagar los impuestos prediales ni de la energía eléctrica

15.Abr.11    Zapatismo

Pretenden despojar de tierras a bases zapatistas de Cintalapa, denuncian

Autoridades ejidales amenazan con ello si no renuncian a la resistencia, señaló la JBG El Camino del futuro. Los están obligando a pagar el impuesto predial.

Hermann Bellinghausen, enviado
La Jornada

San Cristóbal de las Casas, Chis. La junta de buen gobierno (JBG) El camino del futuro, con sede en el caracol zapatista de La Garrucha, denunció la pretensión de despojar de sus tierras y derechos ejidales a las bases de apoyo zapatistas de Cintalapa (Ocosingo), en la selva Lacandona, si no renuncian a la resistencia.

Las autoridades del ejido Cintalapa y los tres niveles de gobierno “están obligando a nuestros compañeros a pagar el impuesto predial de la tierra”, dice la JBG. A mediados de marzo, las autoridades priístas y panistas exigieron a las bases de apoyo zapatistas una copia de su credencial de elector “para solicitar un proyecto, pagar el impuesto de la tierra y obtener el certificado agrario”.

También les dijeron que tendrán que cumplir lo que acudir obligatoriamente a las escuelas oficiales y pagar cooperaciones. Los zapatistas no aceptaron porque “están en resistencia y no reciben nada del mal gobierno”. Además, destaca la JBG, “tienen sus autoridades y educación autónomas (del municipio en rebeldía Ricardo Flores Magón), y no tiene por qué ser obligado a trabajos en que ellos no sean beneficiados”.

El 26 de marzo la JBG mandó un oficio al ejido “aclarando que las bases de apoyo del EZLN estamos en resistencia y no pagamos impuestos”. El día 29, las autoridades priístas convocaron una asamblea. A la mesa directiva “no le gustó” lo que argumentaron ahí los zapatistas.

Las autoridades ejidales pretendieron obligarlos a firmar un acta de acuerdo con un contenido “contrario a la autonomía y la resistencia”, señala la JBG. “Los compañeros no firmaron, las autoridades se encabronaron y les dijeron con palabras amenazantes de privar su derecho, que serán despojados en el ejido y que tienen un plazo de cinco días para pensar”.

Estas son “provocaciones” de las autoridades ejidales de Cintalapa “junto con los mañosos de los malos gobernantes federal, estatal y municipal”, declaró la JBG. “Como bases de apoyo del EZLN, denunciamos enérgicamente la política del mal gobierno que está creando la desinformación para confundir a la gente honesta que lucha y resiste; su plan de contrainsurgencia es crear terror y miedo; usa a gentes que se venden por unas cuantas monedas”.

La junta rebelde concluyó: “No vamos a permitir que hostiguen a nuestros compañeros en resistencia. Vamos a defender su derecho porque sabemos muy bien que esto es un plan del gobierno. No vamos a pagar los impuestos prediales ni de la energía eléctrica, no vamos a darle nada al mal gobierno porque nosotros no estamos recibiendo nada”.