12-04-2013
Inmigrantes se plantan frente al Capitolio
Decenas de miles exigen en Washington Reforma migratoria ¡ya!
La Jornada
¿Qué hora es? ¡La hora es ahora!, proclamaron este miércoles decenas de miles de personas frente al Capitolio en Washington para apremiar a congresistas a que aprueben de una vez por todas una reforma migratoria que ofrezca una alternativa de legalización para los 11 millones de extranjeros sin papeles que viven en Estados Unidos.
Horas antes, inmigrantes procedentes de todo el país, sobre todo latinos, abarrotaron las oficinas de los congresistas estadunidenses para exigir su apoyo a la ley, que deberá ser una solución bipartidista que daría un vuelco sin precedente al sistema migratorio del país y de la que se habla desde hace más de una década.
Los manifestantes vestidos de blanco llevaban pancartas con reclamos para una reforma migratoria ahora que desplegaron durante horas frente al edificio que alberga el parlamento estadunidense. La movilización fue convocada por organizaciones de migrantes y sindicatos.
Con el Capitolio a sus espaldas, activistas, indocumentados afectados por las actuales leyes, políticos y figuras como la cantante puertorriqueña Olga Tañón, subieron a un escenario para recordar al gobierno del presidente demócrata Barack Obama y a los congresistas que el pasado noviembre la demanda de una reforma migratoria sonó fuerte en las urnas.
No hay excusas para resignarnos a un fracaso en la reforma migratoria, afirmó entre aclamaciones el congresista demócrata Luis Gutierrez, uno de los más férreos impulsores de este asunto en el Congreso. Sigan presionando (al Congreso) y juntos lograremos una reforma este año, no nos den ningún lugar donde escondernos, pidió a la multitud. Acompañaron a Gutierrez más de una docena de asambleístas y senadores, en su mayoría latinos, como el legislador de Texas, Joaquin Castro, una de las nuevas estrellas del Partido Demócrata.
También habló a la multitud el demócrata Bob Menendez, uno de los integrantes del grupo de los ocho, el equipo de senadores bipartidistas que elabora una propuesta de ley migratoria desde febrero. Tendremos una reforma este año, prometió Menendez. Previamente, en declaraciones a periodistas, Menendez había asegurado que el grupo de los ocho tendrá finalmente redactado el texto de una propuesta de ley a principios de la semana próxima. Esperamos que para el lunes o martes a más tardar tengamos completamente escrita la propuesta legislativa, dijo. Menendez justificó el retraso en la presentación de la iniciativa –en un principio el grupo bipartidista había prometido tener un texto para finales de marzo– por lo compleja que resulta una ley como ésta, pero aseguró que los puntos principales ya están acordados y que sólo queda redactarlos en forma de normativa lo cual, dijo, podría darse el lunes o martes próximos. Ya tenemos los acuerdos sobre todos los conceptos principales, aseguró Menendez.
Entre los elementos ya acordados estarían, de acuerdo con el demócrata, la vía a la legalización y la ciudadanía, la seguridad en la frontera, la oportunidad para los jóvenes dreamers (soñadores, los favorecidos por la ley que prorroga la deportación de jóvenes que estudien, estén en el ejército y no tengan antecedentes penales) y los trabajadores en el campo.Todo eso está acordado, pero tenemos que escribir la ley porque es muy importante para asegurar lo que tenemos que lograr, que esté escrito correctamente y por eso nos tomamos más tiempo, justificó.
El diario The Wall Street Journal aseguró, por otra parte, y citando como fuente a personas familiarizadas con la propuesta que ésta podría ser muy dura en los requisitos de seguridad fronteriza. De hecho, según el rotativo, los indocumentados no podrían calificar para la residencia hasta que toda la frontera con México esté bajo vigilancia y se logre detener 90 por ciento de los ingresos ilegales.
El director del influyente grupo pro inmigración, America’s Voice Education Fund, Frank Sharry, admitió que la propuesta final no será del gusto de todos y que tendrá concesiones al sector más conservador que exige garantías en materia fronteriza, pero subrayó que la línea roja es la ciudadanía. Habrá partes que no nos gusten, pero si hay un camino claro para la ciudadanía e incluye a los 11 millones de indocumentados, entonces será realmente significativo, ésa es la cuestión central.
Algo que según Menendez sí está garantizado es que todos los sin papeles del país, incluidas personas con TPS (Estatus de Protección Temporal) van a tener una vía para la legalización”, aseveró. Pero no mencionó una de las cuestiones que más inquietan a los migrantes: cuánto tardará el proceso de legalización, que se teme pueda prolongarse más de una década.
La reforma migratoria es una promesa renovada del presidente Obama, quien ha reconocido públicamente en repetidas ocasiones que, en buena parte, debe su relección al decidido voto hispano. Y éste cuenta entre sus prioridades con una reforma migratoria que busque ante todo una salida legal a los más de 11 millones de indocumentados.
Así lo recordó Sharry: hoy la comunidad se ha plantado ante el Congreso a decir: votamos en noviembre y ya es abril. Queremos una propuesta de ley, y la queremos este año.
En este sentido se expresó el director del Center for Community Change, Deepak Barghava. La comunidad está demandando una acción del Congreso ya mismo, señaló a Dpa.
Han esperado 15 años por un camino hacia la ciudadanía y el mensaje de esta manifestación es que el momento es ahora. No sólo en Washington hubo marchas, también en ciudades como Atlanta, en Georgia, miles de inmigrantes se plantaron ante el congreso local para exigir una reforma.
Fuente: http://www.jornada.unam.mx/2013/04/11/mundo/027n1mun