Se espera la asistencia de unas 150 mil personas
Desobedientes de varios países responden al llamado del EZLN
Los zapatistas son un ejemplo de resistencia, subrayan
San Cristobal de Las Casas, Chis., 8 de agosto. En pocos días, la inesperada convocatoria del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) ha atraído la atención en muchas partes del mundo. Según Gennaro Migliore, responsable de relaciones internacionales del partido italiano Rifundazione Comunista, esto se debe a que “los zapatistas son un ejemplo para el movimiento mundial de resistencia al neoliberalismo”.
Camino a Oventic, agrega que no bastan las ideas para construir alternativas, “se requiere la práctica. Entendemos la propuesta de los Caracoles como un proceso que va de lo local a lo global”.
Mañana, simultáneamente con el acto de Oventic, se celebrará en Larzac, Francia, la reunión final de organizaciones europeas antes de la cumbre de la Organización Mundial de Comercio en Cancún, en septiembre próximo. Este sábado se esperan entre 100 y 150 mil personas, para un acto en el que, entre muchos otros, participarán José Bové, Manu Chao y Fermín Muguruza, quienes han manifestado ya su saludo a los zapatistas en el nacimiento de sus Caracoles. En Larzac, los organizadores esperan enlazarse mañana a las transmisiones de Radio Insurgente en las montañas de Chiapas (lo mismo que numerosas organizaciones en Italia, Alemania, Cataluña, Estados Unidos y el País Vasco).
“Ya antes del anuncio de los Caracoles, Chiapas estaba en el camino a Cancún”, expresa Vilma Mazza, conductora de Radio Sherwood, en Padua, y vocera de la organización italiana Ya Basta. “La esperanza en una globalización de resistencias se ve alimentada por esta nueva fase del zapatismo”.
De Italia también vinieron representantes de los Desobedientes. Han llegado cientos de estadunidenses de diversas redes, decenas de jóvenes vascos y catalanes, miembros de comités en París y Montpellier, gente de Alemania y Gran Bretaña.
“Estamos aquí como ciudadanos europeos, para resistir la privatización de recursos y la globalización. De los zapatistas hemos aprendido que construyendo comunidad se cambia al mundo”. Mazza interpreta los Caracoles como “una propuesta de movimiento incesante, de lo local a lo general y de regreso, un vórtice que va y viene”.
Durante toda esta semana, Radio Ciudad, de Buenos Aires, dedicó su programa diario En la vereda a los zapatistas y el nacimiento de los Caracoles. Su conductor, Quique Pesoa, dijo hoy seguir “con envidia” los acontecimientos de Oventic. Contra el silencio de la “gran” prensa estadunidense, los medios de las comunidades latinas, como El Mensajero (de California), destacaron la “reaparición” de los zapatistas.
En Madrid los Aguascalientes también mueren
El grupo de Madrid anunció anoche (sus miembros juran que por mera coincidencia) el fin de su respectivo Aguascalientes, abierto con éxito hace apenas diez meses. “Este verano nos ha regalado la confirmación de una sospecha: no estamos, ni estaremos solos. Quizá algo de eso sea la rebeldía de nuestros tiempos, de la que somos barro y agua. Al hilo de los recientes mensajes lanzados por el EZLN y los actos que se sucederán en los próximos días, hacemos público un proceso que se pensó para ser vivido en silencio. El espejo nos devuelve una vez más nuestra imagen repetida: somos ese conejo de Alicia, corriendo de un lugar a otro, prisionero de las manillas del reloj. Ya lo decía Cortázar: ‘no te regalan un reloj, tú eres el regalado, a ti te ofrecen para el cumpleaños del reloj’”.
Desde Madrid, el colectivo zapatista continúa: “Los hermanos y hermanas del zapatismo mexicano no van por delante en este viaje, sino que caminan siempre a nuestro lado, compartiendo y construyendo el paso. Bien abrazados, como en un baile (¿será por eso que hay quien habla de una transición de la militancia a la milidanza?)”.
La premisa política que dio origen a su proyecto, dicen, fue “la necesidad de traducir el zapatismo a nuestros propios lenguajes; construirlo en nuestros contextos. La mejor solidaridad consiste en construir el zapatismo madrileño conectados al carácter global de las resistencias contemporáneas, pero volcados sobre la dimensión local y cotidiana”. Confiesan la intuición “de que el zapatismo es una herramienta que puede ser usada por todas las rebeldías que navegan el mar de la globalización. El zapatismo nos aparece como idioma común y mapa útil para la acción política”. Capacidad de resistencia, creatividad propositiva, permanente actitud políticamente incorrecta, irónica inteligencia, su relación con el poder, su concepción de la democracia y de la política, todo, dicen “nos interpela”.
El camino será “materializar un territorio de experimentación y construcción comunitaria, una acción política en rebeldía que se proyecte, con la paciencia y la tranquilidad del caracol, sobre toda la ciudad”. Este 8 de agosto “es también el día en que el Aguascalientes de Madrid desaparece, para embarcarse en una aventura de alegría y rebeldía, de desobediencia y resistencia. Un hermanamiento definitivo con los hombres, mujeres, niños y niñas, ancianos y ancianas del EZLN”.
Anuncian por último que acudirán a Cancún durante la reunión de la Organización Mundial de Comercio “como primer paso del Plan Oventic-Moscú que ya camina hacia el oriente para construir un mundo más justo y más humano. El próximo 6 de septiembre llegaremos a la ciudad de San Cristóbal de las Casas para marchar hasta Cancún con todos los desobedientes europeos que allí se den cita”.