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La huelga de los funcionarios despedidos de la Municipalidad de Asunción continúa al volver a fracasar la negociación realizada ayer al mediodía en el Viceministerio del Trabajo. Los sindicalistas anunciaron que unas 100 personas efectuarán huelga de hambre. El nuevo viceministro, Rubén Candia Amarilla, ha llamado a la cordura a los gremialistas como un intento de calmar los ánimos.
Como una “pérdida de tiempo” calificaron los voceros de los huelguistas la reunión tripartita donde participaron los enviados del intendente Enrique Riera, las autoridades ministeriales y los sindicalistas de la Comuna, quienes estuvieron acompañados por los principales dirigentes de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT).
La postura radical del intendente capitalino, quien se niega tajantemente a reponer a sus puestos de trabajo a los 850 funcionarios cesados en sus funciones, hizo que la negociación fuera un simple encuentro burocrático. Los sindicalistas plantearon sin éxito desde un primer momento el reintegro de los mismos y luego analizar caso por caso el problema de cada trabajador.
El viceministro saliente Pedro Cano afirmó que las partes no llegaron a ningún acuerdo. En tanto, su reemplazante Candia Amarilla señaló que seguirá intentando destrabar el conflicto. Ha pedido a los gremialistas que mañana (por hoy) mantengan la calma, teniendo en cuenta el momento especial que vive el país.
Es probable que desde hoy los huelguistas de hambre se ubiquen frente al Viceministerio del Trabajo como medida de protesta al fracasar las negociaciones.
“Vinimos a perder el tiempo en esta reunión. Hemos escuchado siempre la misma perorata de los enviados del intendente. Esta huelga continúa y con más fuerza aún. El futuro viceministro nos pidió que suspendamos la huelga, pero a cambio de nada. Es imposible”, dijo el dirigente Sixto Ojeda.
RECOLECTORES ESCOLTADOS
Por otro lado, la Dirección de Aseo Urbano intentó prestar ayer un servicio mínimo con seis recolectores en la zona del microcentro, avenidas y grandes generadores (supermercados, shoppings, etc.).
También se cubrió la falta de recolección con camionetas y un centenar de obreros que no se han plegado a la huelga.
Los recolectores tuvieron que salir escoltados con policías o con los jefes de la dependencia municipal para evitar que fuesen agredidos por los huelguistas. Solamente se reportó un caso de atentado con balines de goma en la zona del Mercado 4. Las plazas del centro fueron objeto de tareas de limpieza para los actos de la fecha.
