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Rechaza CRSJ-PCP sumarse a la Policía Rural
Sergio Ocampo Arista
Corresponsal
Periódico La Jornada
Viernes 9 de agosto de 2013, p. 3
Chilpancingo, Gro., 8 de agosto.
La Coordinadora Regional de Seguridad y Justicia-Policía Ciudadana y Popular (CRSJ-PCP), con sede en Temalacatzingo, municipio de Olinalá, rechazó la propuesta del gobierno estatal de incorporar a sus elementos a la Policía Rural y acatar el mando único que aglutinará a las policías comunitarias en Guerrero.
En un comunicado, la CRSJ-PCP señaló que “el mando único es funcional en una corporación del mismo tipo. Si es policía estatal, el Ejército y la Marina pueden tener un mando único, pero un jefe militar no puede ser al mismo tiempo jefe policiaco y rural o comunitario, eso es demeritar la responsabilidad y un rango ganado”.
Aseguró que no hay por qué preocuparse por su existencia, ya que “la PCP es un organismo encargado de la seguridad. Tiene principios y un reglamento bajo el cual se desempeñan, aprobado por las comunidades con base en el artículo dos de la Constitución y la ley 701 de Reconocimiento, Derechos y Cultura de los Pueblos y Comunidades Indígenas del estado de Guerrero”.
Aclaró: “no somos gubernamentales, no percibimos salario ni financiamiento alguno del gobierno. Lo que solicitamos en nuestros pliegos de demandas es que nuestro sistema de seguridad y justicia indígena sea respetado y reconocido en la Constitución de Guerrero y/o hacer una adición a la ley 701″.
Pidió a la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Policía Comunitaria que defina su postura acerca de su relación con el gobierno estatal; “quizá necesiten revisar su práctica y planteamiento. Y las autodefensas de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero deben definir su situación respecto a su labor, ¿de qué lado están? Al parecer intentan conseguir una plaza en las corporaciones policiacas o militares y eso está bien, que les den y se pongan a trabajar como debe ser.
“Es necesario abandonar ese amasiato político disfuncional absurdo con el poder y volteen a su origen: las comunidades indígenas; que dejen de pelear y dividirse por las migajas que les arrojan. También es necesario clarificar ¿de qué lado estamos?: ¿del lado del pueblo o del gobierno?”, insistió.
Consideró necesario portar armas para prevenir los actos delictivos, “el Ejército, Marina y policía no tienen por qué enfadarse o quitarlas; más cuando ellos y el gobierno saben que la CRSJ-PCP y otros surgieron por el vacío que se generó por parte del Estado en materia de seguridad. No estamos de acuerdo que el Ejército detenga y desarme a las policías legítimas de las comunidades”.
Recordó: “hemos disminuido 95 por ciento en todo el territorio soberano indígena donde opera la CRSJ-PCP los actos delincuenciales y los actos antisociales”.
La CRSJ-PCP criticó la Cruzada contra el Hambre del gobierno federal, porque sólo es “un paliativo que, igual que otros, apaga el potencial productivo de la gente y la convierte en mendigo y eso no resuelve el problema de la pobreza. Esa cruzada es: ‘come un día y jódete seis años’; tiene más bien tintes electorales”.
Acerca del proyecto de explotación mineral en las zonas Montaña y Costa Chica, señaló que “existen más de 26 concesiones de extracción a mineras canadienses en más de 42 puntos en la región de la Montaña. ¿Generarán algunos empleos? Seguramente. Pero el daño será mayor y permanente”.