México: Encuentro social definirá reconstitución de la emblemática Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca

El Frente Único de Lucha desarrollará este mes de noviembre un congreso en el cual posiblemente se reconstruya nuevamente la APPO y se defina la hoja de ruta a seguir para un futuro inmediato



09-11-2013

Entrevista a César Martínez, maestro y sindicalista del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación
“En Oaxaca vivimos una guerra de baja intensidad contra los movimientos sociales”

Decio Machado
Diagonal

¿Cómo se desencadenaron las luchas en Oaxaca en 2006 y como se conformó la Asamblea Popular de Pueblos de Oaxaca (APPO)?

Oaxaca ha sido siempre un Estado [méxicano] muy pobre y plagado de injusticias, por lo tanto también de protesta social. Entre 2004 y 2010 tuvimos como gobernador a Ulises Ruíz Ortiz, un político vinculado al PRI que ya indicaba durante su campaña electoral que no iba a permitir más movilizaciones sociales, bloqueos de carreteras, marchas o plantones. En mayo del 2006 el Magisterio, como era habitual se concentró en la ciudad de Oaxaca [capital del Estado de Oaxaca] y se mantuvo en un plantón en la plaza del Zócalo del cual fuimos desalojados violentamente el 14 de junio.

Esta situación fue el detonante para que el conjunto de organizaciones sociales del Estado, hartos de la política represiva impulsada por Ulises Ruíz, estallaron con una serie de movilizaciones en la ciudad. Esta situación propició que la sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Enseñanza, conocida en todo el país por ser una de las más combativas a nivel nacional, convocará a estos movimientos a la conformación de la APPO.

A partir de entonces todas las organizaciones involucradas en la APPO, más de 360 organizaciones sociales, pedimos la renuncia del gobernador Ulises Ruíz, lo que se convirtió en la bandera de lucha para la mayoría de la población en este Estado. En realidad se desató una insurgencia civil, hubo tomas del Palacio Gobierno, la Cámara de Diputados, la Presidencia Municipal, así como de otras instituciones públicas, llegó un momento en el que ya no había gobierno, aquí la gente se gobernaba sola.
Estas movilizaciones vinieron acompañadas de represión. ¿Cómo se desencadenó?

Efectivamente, el empoderamiento popular que se dio en ese momento conllevó a que interviniese el Gobierno Federal a través de unidades traídas incluso desde otros Estados y desencadenando una gran represión. En los meses posteriores están documentados 26 asesinatos contra activistas sociales, siete desaparecidos, y unos 300 encarcelamientos. A partir de ahí, se ha desarrollado una guerra de baja intensidad por parte del Gobierno que va acompañada de una estrategia paralela enfocada a dividir y sembrar desconfianza entre las organizaciones afines.

A las organizaciones más combativas se les asesinó o encarceló dirigentes. Están documentados muchos casos, entre ellos los asesinatos de Artemio Norberto Camacho en agosto del 2009 durante una marcha de maestros, Eleazar Martínez Almaraz en diciembre del 2009 cuando se dirigía a dar clases en su centro de trabajo, los defensores de derechos humanos JyriJakoola y Betty Cariño en abril del 2010 cuando fue atacada la Caravana Humanitaria que se dirigía a San Juan Cópala, Gregorio Jaime Rosas Chávez en noviembre de 2010, Carlos René Román Salazar quien fue desaparecido en marzo del 2011, Luís Quiroz Quiroz quien además de maestro desarrollaba funciones municipales en San Agustín Chayuco en abril del 2011, Guadalupe Pérez Sánchez quien fue desaparecido en mayo del 2011, Edwin Omar García Sánchez baleado en agosto del 2011, Rafael Vicente Rodríguez Enríquez tras haber sido falsamente acusado de secuestro y detenido por seis años en diciembre del 2011, Bernardo Vásquez Sánchez activista antiminero en enero del 2012 o Luís Enrique Martínez Cruz síndico municipal de la comunidad de Santa Cruz XitlaMiahuatlán en agosto del 2012.

Ante estos casos y otros, el Gobierno actúa como en el viejo oeste, ofrecen plata a través de anuncios televisivos para quien de información de estas desapariciones o asesinatos, pero no se ha llegado a nada más, la impunidad anda a sus anchas en el Estado de Oaxaca por estos asesinatos.
¿La situación no cambió con la llegada de Gabino Cué a la Gobernación del Estado de Oaxaca?

Cué llegó a la Gobernación a través de una coalición denominada Unidos por la Paz y el Progreso y conformada por los partidos políticos PAN, PRD, Convergencia y PT. Fue investido gobernador el 11 de julio del 2010, y aunque la gente depositó su confianza en él y pensó que incluso podría hacer pagar con cárcel las acciones emprendidas por Ulises Ruíz, como puedes comprobar por las fechas de los asesinatos y desapariciones a las que te he hecho referencia, la situación no ha cambiado nada con el actual gobernador.

Viviendo una situación de estas características, ¿crees que hay condiciones para reconstruir la APPO?

A pesar de la situación de represión y asesinatos selectivos que vivimos en el Estado de Oaxaca, entre diversas organizaciones sociales, un total de 176 hasta el momento, hemos logrado construir desde mayo de este año en el Frente Único de Lucha (FUL). Seguimos llamando al resto de las organizaciones sociales del Estado a la unidad y seguimos pidiendo también que se le aplíquelas responsabilidades penales que corresponde a Ulises Ruíz, quien en la actualidad vive en la Ciudad de México y sigue conectado con los políticos del PRI. El Frente Único de Lucha desarrollará este mes de noviembre un congreso en el cual posiblemente se reconstruya nuevamente la APPO y se defina la hoja de ruta a seguir para un futuro inmediato.

¿Qué opinión te merece la detención de los cinco activistas sociales que están presos en cárceles de máxima seguridad desde mayo de este año?

El Frente y el Magisterio están reivindicando la libertad de los compañeros presos. Son claramente inocentes, su detención es una operación gubernamental contra las organizaciones que estamos en resistencia. En México cualquiera puede acusarle de un delito, la justicia no existe, está al servicio del poder. Los compañeros detenidos han sufrido toda clase de vejaciones y violación de sus derechos, se les ha hecho firmar auto inculpaciones sobre un secuestro en el que no han participado a base de torturas y los métodos más viles que se pueda uno imaginar.

El Magisterio en su conjunto se moviliza contra la Reforma Educativa que ha sido aprobada por el Gobierno Federal. ¿En qué consiste dicha reforma?

Lo que ellos definen como “reforma educativa” no es más que una reforma laboral implementada por dictados de la OCDE. Buscan privatizar la educación y con esta reforma le quitan además derechos y garantías a los maestros, buscando eliminar la capacidad de negociación colectiva y anular al Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación. A partir de ahora cualquier desempleado con cierta formación puede ocupar una plaza de maestro tras la aprobación de un examen previo. ¿Te imaginas que va hacer un abogado, un veterinario o un doctor desempleado que tras pasar un test se incorporé al magisterio, sin haber tenido ninguna formación pedagógica, cuando se encuentre a un niño llorando en la puerta del colegio porque no quiere asistir al aula? Al maestro, por nuestra vocación y formación pedagógica nos sale el amor paternal, el maestro para eso estudió, el maestro canta, el maestro juega, el maestro sueña, el maestro baila, el maestro hace de todo en un país como México, el maestro es hasta guía en la comunidad en donde vive. Precisamente por esto, es por lo que el Estado no ha podido acabar con uno de los sectores más reivindicativos del país, un movimiento que lleva 33 años de lucha. El maestro es un ser que está metido en la comunidad, el maestro es el compadre en supueblo. Por ejemplo, hace falta una carretera y hayuna reivindicación, pues ahí está el maestro.

En México cualquiera puede acusarle de un delito, la justicia no existe, está al servicio del poder.
Hay todo un paquete de reformas neoliberales por parte del gobierno de Enrique Peña Nieto tras la vuelta del PRI al poder…

El actual Gobierno está atentando contra derechos sagrados que están en la Constitución de nuestro país. El derecho a la educación que se ganó con la revolución mexicana está siendo cuestionado, el petróleo que es nuestro y que se nacionalizó durante el gobierno de Lázaro Cárdenas pretende ser nuevamente privatizado a través de la reforma energética, de igual que están planteando ahora con la energía eléctrica. Ya lo hicieron así con TELMEX [compañía de telecomunicaciones], que era una empresa nacional y ha sido entregada al señor más rico del mundo, el mega multimillonario Carlos Slim.
¿Cómo visualizas el futuro?

La gente ya no se deja, los maestros de Veracruz están en paro total, igual que los de Chiapas, Oaxaca o Quintana Roo, en la actualidad hay 22 estados en protesta.

En el istmo de Tehuantepec, aquí en el Estado de Oaxaca, se están introduciendo empresas españolas, de Dinamarca, Japón y China, con megaproyectos energéticos a pesar de la oposición de muchas de las comunidades afectadas. Para ello hicieron la reforma del artículo 27 de la Constitución, lo que permite el fraccionamiento de tierras comunales. A pesar de ello, en la actualidad hay comunas que no dejan entrar a las transnacionales en sus territorios, lo que vuelve a generar conflictos y la represión del Estado contra los dirigentes locales.

La minería es otro conflicto con el Gobierno Federal, en nuestro Estado, riquísimo en uranio, plata y oro, se pretende establecer y potenciar la minería a cielo abierto en San José del Progreso a través de una multinacional canadiense con su consiguiente impacto contaminante en ríos y del medio ambiente en general. Hemos tenido ya dos compañeros asesinados por estas luchas, pero no por ello ha cesado la resistencia antiminera.

En resumen, el pueblo mexicano no va a permitir que un represor como Peña Nieto, quien fuera gobernador del Estado de México cuando la masacre de Atenco, imponga su agenda de profundización neoliberal sin luchas y conflictos. Se agudizará la represión pero también las resistencias.

Fuente: http://www.diagonalperiodico.net/global/20657-oaxaca-vivimos-guerra-baja-intensidad-contra-movimientos-sociales.html