Tareas para Valparaíso
Por Jaime Yovanovic (Profesor J)
ex presidente Junta de Vecinos Cerro Yungay
Una reconstrucción, restauración o repetición en Valparaíso ya no tiene sentido si atendemos a las voces que de todos lados claman por innovaciones, no sólo re-levantar muros y paredes, sino modificar la filosofía urbanística y constructiva de la ciudad, que se levantó inicialmente desde una concepción popular ligada a la naturaleza (mar, bosque y cerro) y posteriormente el mercado hizo de las suyas imaginando y generando una ciudad a su imagen y semejanza, destruyendo todo a su paso, en especial las micro cuencas que rodean la ciudad y se adentran como pulpo por todos lados en las quebradas, donde en invierno se acumula el agua originando una fuerte presencia de matorrales de todo tipo junto y entremedio de la existencia ancestral del bosque (Ver mi artículo sobre la Catástrofe de Valparaíso en http://clajadep.lahaine.org) los que al secarse se transforman en verdaderas bombas flamígeras que estallan en verano y otoño para abalanzarse contra las casas. En épocas anteriores los incendios de bosques eran contados con los dedos de una mano. Hoy día son cada año. Los incendios eran famosos por los ratones que roían los viejos cables eléctricos en los entretechos, causando espanto porque una o tres casas eran devoradas por las llamas, debidamente contenidas por los bomberos, con escasa participación de otras instituciones. Hoy día son ni más ni menos que alrededor de 3 mil casas.
Las empresas inmobiliarias, del cemento y materiales de construcción están de fiesta, ya que las autoridades se encargan de que el proceso pos-incendio se mantenga dentro de los límites del mercado y la base material e ideológica de la propiedad privada. Esto es mío. El fantasma de los ladrones se ha utilizado inteligentemente para reforzar las cadenas del individualismo, en tanto la sensibilidad y los afectos son canalizados por la acción de un sujeto externo, el ayudador, el solidario, que ayuda a reforzar la pasividad constante de los habitantes. Eres damnificado, quédate quieto que te traeremos algunas soluciones parches, debidamente asociadas con los rieles del tren mercantil. Ni se te ocurra imaginar otra forma de ciudad, pues ella debe ser la ratonera de los subordinados, los esclavos del horario y de las cuentas, los consumidores. Todo el mundo a comprar, aumentar el consumo, pues hay que llevar agua y demás a los afectados. Pues que la regalen los empresarios y supermercados, que felices hacen cuentas con el sonido de la máquina registradora que anota peso a peso el agua y alimentos que el corazón solidario transfiere inocentemente del amor a la ganancia. Son muy generosos ellos, dice el empresariado y las autoridades, convocando a seguir y multiplicar el ejemplo.
Es lo que hay, no existe otra manera, dicen algunos, que les da maní que su acto generoso sea capitalizado para la reproducción material e ideológica del sistema. Bueno, que sigan así, pero al menos echen una mano en las ideas, críticas y reflexiones de como hacer un Valparaíso mejor, más seguro y más amable. La propaganda sistémica se encargará de rehacer la tranquilidad y la confianza de que los próximos serán mejor atendidos, y lo más probable es que así sea, ya que otro incendio como éste no lo aguanta nadie, ni abajo, ni arriba. Pero el tema no está en cuanto tranquilizamos a la gente con el verbo y con el mimo, sino en cuanto se realizan soluciones eficaces, que de paso den cuenta de los otros problemas que tiene Valparaíso.
Veamos algunas líneas de reflexión para la búsqueda de ideas y formas prácticas de encarar el problema desde la gente y no tan sólo desde la pasividad reproductora de estructuras y funciones. Eso implica que sería conveniente que la gente contara con el espacio para circular sus ideas y propuestas, un espacio propio, no satélite de las estructuras ligadas al mercado, que andan merodeando como buitres para que las autoridades no se equivoquen de donde aprieta el zapato y quien manda realmente en el país, por ello se puede pensar y proponer a algunas personas la formación de comités o consejos de vecinos, que permitan que no ande cada uno para su santo, sino estimular el brote del instinto del común y del afecto, trabajar en minga vecinal, no sólo apoyados cada uno en la minga externa, la que debe seguir los lineamientos emanados de los vecinos y de nadie más. Pero ese consejo de vecinos no debe ir más allá de una manzana o cuadra, o unas muy pocas manzanas o cuadras articuladas.
En esos espacios u otros similares es necesario estimular el intercambio de ideas sobre las causas de los incendios, mostrando que no están en el aspecto urbano, sino en el descuido de las urbanización y construcción en los límites de las ciudades, ya que es allí que se acumulan las malezas flamígeras que van a venir nuevamente cada temporada de calor, ya que pájaros hay muchos y todos hacen chispas a lo largo del país, así como muchas otras causas, por lo que es sano pensar en el eterno peligro de los cables eléctricos y la necesidad de que cada región y localidades del país desarrolle sus propias soluciones energéticas, ya no más los mega proyectos que requieren kilométricas redes de cables para llevar la electricidad a la gran minería. Además hay que pensar soluciones para restaurar el equilibrio natural en los bordes urbanos y quebradas.
Así esos grupos o pre comunidades de vecinos pueden pensar en reunir bicicletas viejas para hacer ejercicios en espacios compartidos adosando dinamos para cargar baterías, lo que les permite un suministro propio de electricidad para sus refrigeradores, lavadoras y demás utensilios de uso doméstico y personal, manteniendo tal vez los contadores de la empresa eléctrica exigiendo que bajen todos los cables a tierra.
Por ejemplo los habitantes de una manzana pueden pensar en un patio común, donde tengan un lavadero para todos con varias lavadoras juntas o haciendo turnos y una especie de comedor común para compartir en oportunidades. También en ese espacio común puede imaginarse una huerta y un espacio de juegos de niños. Las posibilidades son muchas.
Veamos ahora como desde cada área del saber y del mundo de la vida pueden abordarse estas reflexiones:
Área jurídica.
El mercado requiere que cada propietario refuerce sus limites o aún que intente ampliarlos cuando le sea posible, así los bancos, acreedores, inmobiliarias o casatenientes pueden sumarlos a sus patrimonios en caso de hipotecas fallidas, deudas impagas y otras formas, por lo que los vecinos organizados pueden solicitar juntos condonación de las deudas hipotecarias, comerciales, municipales, fiscales, etc. Será un tema atractivo para estudiantes de derecho y abogados con sensibilidad social.
Por otra parte es tema de estudio y reflexión para estudiantes de ciencias jurídicas y similares el abordaje de los tipos de propiedad: privada, común, mixta y otras, ya que en el campo mapuche el sistema intenta acabar con la propiedad comunitaria para instalar parcelas de propiedad privada, así el mercado puede penetrar y subordinar la vida de los pueblos originarios. Sin embargo en la ciudad algunos vecinos que lo deseen pueden hacer lo contrario, es decir transformar un conjunto de propiedades privadas en propiedad común, instalándose allí en lo que antes era una dispersión que reproduce el individualismo, esta vez sería una comunidad o formas de vida comunitaria o pre comunidad, una especie de lof urbano. Hay bastante jurisprudencia, teoría, doctrina, derecho comparado y otros donde se puede echar mano.
También podemos estudiar y solicitar la libertad de los presos de las familias afectadas para que se reincorporen al espacio comunitario bajo la tutela y vigilancia de los familiares.
Para profundizar estos temas y similares estamos organizando el taller del Otro Derecho.
Salud
Proponemos la reflexión sobre la formación de comités autónomos de salud comunitaria adscritos a estas agrupaciones locales de vecinos o aún donde no las haya, que hagan catastro propio de enfermos y tengan la orientación de las plantas medicinales que pueden sustituir a la avalancha de remedios e inyecciones que van a llegar. Las inscripciones al taller de salud comunitaria, así como para el resto de los talleres temáticos están abiertas de forma gratuita.
Economía y alimentación
Estamos pensando en comité de suministros en un consejo de vecinos, que reciba y organice los medios que van llegando, que estudie la forma de acceder a la condonación efectiva de las deudas, el no pago de las cuentas y haga la vaca o la caja para adquirir de conjunto al por mayor lo que sea necesario para las necesidades del común.
Arquitectura y construcción
Habrá que elaborar diseños de casas adaptadas a las necesidades del común, con los espacios privados y comunes, así como la utilización de materiales naturales como tierra, piedras, arcilla, madera, ladrillo, adobe y otros, tratando de que el cemento ocupe el menor porcentaje debido al daño que hace a la circulación de aire y energías del equilibrio ambiental. Ver las formas de conexión con energía alternativa y técnicas de reciclaje del agua usada en la cocina y el lavado.
Reciclaje
Tal vez sea prudente trabajar métodos de separación, selección y ordenamiento de los escombros haciendo una especie de almacenamiento común, para nivelación de terrenos, separaciones, etc. La basura orgánica se recomienda juntarla para realimentación y recuperación de la tierra en aceras, patios y jardines. La basura no orgánica puede reutilizarse como materia prima de artesanías y manualidades para niños.
Educación y juegos de niños
Interesados en prepararse como facilitadores y monitores de educación popular comunitaria para estimular las actividades conjuntas de niños y niñas en medio del proceso de construcción del hábitat, pueden inscribirse en per.reconstruccion@gmail.com
Huerta y semillas
Se abre el banco de semillas donde se reunirán solamente aquellas que demuestren su origen natural sin transgénicos ni tóxicos.
En definitiva estamos abriendo el espacio para trabajar todas las áreas del saber y del mundo de la vida desde el punto de vista de las formas de vida comunitaria con autonomía.
Para participar e informarse de las reuniones o de los talleres en Valparaíso, solicitar información en per.reconstruccion@gmail.com
Atte.
Jaime Yovanovic (Profesor J)
Coordinador
Universidad Libre
unlibre@gmail.com