Tratado contra la guerra

Tratado contra la guerra

Por Jaime Yovanovic Prieto (Profesor J)

A quienes nos tocó la época de resistencia armada contra la dictadura de Pinochet nunca nos dio placer meterle una bala a un milico, que eran soltados como jauría a matar, torturar, desaparecer y triturar como quien hace carne molida. La bala del milico era una agresión, la bala de la resistencia era autodefensa. En Chile fue mucho más que un golpe militar y que una pugna izquierda-derecha: eran las legiones dejándose caer a mansalva contra un pueblo que sólo no tenía armas porque los partidos de la UP preferían negociar con los empresarios, la Democracia Cristiana y los militares, lo que al final lograron después de acabar con Allende, con el MIR, los rebeldes al interior del PC y los deseos de cambio en la población. Hoy día la UP está aliada a sus enemigos de antaño: la DC, los empresarios y los militares. Allende se debe estar revolcando en su tumba. En el MIR muchos militantes eran mucho más que militantes, ser mirista era una forma de vida que costó adaptar a las nuevas circunstancias, donde algunos han entrado a militar a la UP, otros han generado nuevos grupos rebeldes y la mayoría está a la espectativa sembrando por todos lados las simientes del mañana en diferentes formas y lenguajes. Pocos han perdido la esperanza y aunque no haya una senda común hay aún esa rabia de haberse destruido lo construido en niveles de organización y conciencia popular, sin embargo una reflexión más serena puede llevarnos en la dirección de iniciar nuevos modos de construcción a condición de que hagamos una severa evaluación personal de los hechos, ya que no podrá ser colectiva, so pena de instalar nuevas divisiones o cadenas de dimes y diretes donde los más hablantines silencian al resto haciendo aparecer una especie de consenso donde no lo hay ni puede haberlo. El hacer no puede esperar el acuerdo de todos, hay que hacerlo ahora. Poco a poco otros van emprendiendo sus propios haceres. La multiplicidad de haceres e iniciativas nos mostrará en hormiguero o en abejas politizando, digo polinizando, por todos lados. Mostremos los haceres, no para que los vea otro que venga a aplaudirnos, sino para que cada uno aprenda de los demás. Hacer, hacer. Ya tenemos mucho tiempo «organizando» el plan y el diseño, pero la mini estructura del poder de base intelectual y vertical no nos deja ver el bosque. Muchos quieren hacer primero vanguardia para luego sumar gente detrás, por eso proliferan las vanguardias en Chile y Argentina, dos de los países más atrasados respecto de las nuevas formas de hacer política a nivel continental.

Algo así como los rusos, rodeados de conflictos debidamente alimentados desde la Otan, han decidido avanzar pasando por encima de las provocaciones externas (Siria, Ukrania y ahora Israel) para re-instalar cabezas de playa en nuestro continente en histórica visita fotografiada y filmada de Putin a Fidel Castro, antes que le hagan más rebeliones nacionalistas en su periferia, lo que ha encendido la luz de la esperanza del nacional-populismo venezolano, ya que por lógica, siendo Putin también un nacional-populista, se apoyan entre los socios del club de Tobi y si los israelitas están arrojando racimos flamígeros asesinos, es un buen momento para venir a ofrecer amistad también a Fernández en Argentina, que para efectos electorales está levantando la bandera anti-yanqui de los fondos buitres, lo que le permite activar las tropas enardecidas de la izquierda argentina, pues desde días atrás, que empezó a decaer el piso de votos de la presidenta, ha recrudecido el tema Malvinas, para lo cual no andaría nada de mal la amistad con el sr. Putín, hijo del señor del mismo apellido, por eso le dicen «hijo de putín», que de tonto no tiene nada y entiende los juegos psicológicos del nacional-populismo, que es lo mismo que el nacional-socialismo, el nazismo, con la diferencia que unos parecen de derecha u los otros de izquierda, cuando Perón, el fundador del nacional populismo en Argentina era admirador de Muzzolini, el Duce, nacionalista como el nuevo partido nazi de Francia, que crece como espuma de jabón, dado que no hay diferencias, salvo matices, entre los nacionalismos, por más que unos se pinten de rojo y los otros de negro, ya que la teoría del uso de los colores se agotó con los semáforos. Y como el Putín de nuestra historia decíamos podrá empaparse de la mística alienante del chauvinismo peronista, todo ello debidamente mezclado en la olla del aprendiz de brujo donde se mezcla el tema Malvinas con los fondos buitres y la baja electoral de Fernández. Así el susodicho Putín, nada de tontín, está resultando una bella pieza propagandística del lado «bueno” de la vida frente a los buitres carroñeros. Nada de raro que Fidel llame a Maradona para meterlo de cabeza en la olla de la nueva Maléfica y se haga una foto con Putín y Fernández, ya que el pepe Grillo que Putín lleva en el hombro le ha dicho que le vendría de perillas copiarle a Bachelet que se puso en la foto en el momento oportuno del inicio del mundial, ya que después era incierto. Juan segura vive cien años y para la presidenta de este lado de la cordillera austral la foto debía hacerse al comienzo, así como el viaje de Putín debía esperar para ver si las fotos las haría con Fernández o con Dilma. Ganó Fernández, tirar el plan H y utilizar el Plan Doble ele. Se me quedó en casa. Corre a buscarlo. Ya sabemos como funciona la diplomacia y la sociedad del espectáculo. Hay días que Putín acaba mareado de tanta vuelta y ensayos de fotos con la gordi, la viuda del tuerto, la otra, en fin, pero ya tienen copias de cada una para ir ensayando en el avión super presidencial, parecido al que irá a Marte, donde ojala vayan todas las autoridades y allí se queden y se ahoguen por la falta de oxígeno y lloren por su amado planeta tierra que se está quedando sin aire.

Los funcionarios rusos en Chile metieron a la máquina desintegradora todo el Plan W que saldría a la luz si Chile pasaba a la final, pŕesentándole a la señora presidenta una serie de propuestas que no podría rechazar. Ni tonta. Le gusta el cilantro, pero no tanto. Pero los hechos son como se presentan, aunque como siempre pueden modificarse en cada segundo que pasa, lo que explica que junto a los planes comentados, existan al menos unas dos a tres mil variantes al lado de un computador que podrá adaptarlos en una milésima de segundo a nuevas variables.

En Colombia no se podrá meter este hijo del caballero, pues Obama acaba de declarar que apoya los resultados alcanzados por las negociaciones Santos-Farc en La Habana, con lo que no hay que echar gatos en el gallinero, pero en Brasil no andaría nada mal un empujoncito a Dilma, en Uruguay a Tavaré y en Bolivia a Morales, que saca el tema del mar cada vez que vienen las elecciones que cierran en estos días las inscripciones de candidatos y programas presidenciales. Así los sionistas sueltan bombas racimo en Gaza, bien, entonces Putin desembarca en Caracas dando aquel espaldarazo a los gobiernos nacional-populistas nativos. En Ecuador y Nicaragua no puede entrar el ruso, ya que son cotos de caza de los chinos, donde han entrado de tal manera que no dejaron ni para un café a los pobres rusos, en Nicaragua entregaron a los oriundos de Katay el canal transoceánico que mandará a la jubilación el canal de Panamá y en Ecuador, el presidente Colea (como le dicen los chinos por tema de dicción, no porque se balancea), está dando tanta tierra al imperio oriental que ni los mismos chinos se lo creen y ya están pensando fundar ciudades ultramodernas donde el diablo perdió el poncho. Ya los modernos mandarines están imaginando una especie de puente flotante que haga línea entre China y Ecuador, carne tierna y abierta al apetito voraz de los golosos seguidores del estalinista Mao Tse Dong, más conocido vulgarmente por su nombre político, Mao Tse Tung. En la última reunión del comité central chino se analizó que ya Colea se está maleando de tanta plata oriental de modo que están evaluando traerlo a China para revisarle algún cáncer cerebral o inventarle uno si no tiene, así quien sabe después lo endiosan y se queda conforme mientras lo van sustituyendo, como los fundamentalistas árabes que se atan 40 kilos de explosivo plástico para ir al cielo en medio de gritos contra todos los demás que no son seguidores de Mahomé, claro, en este caso (el del bisturí) con más sutileza, no vaya a ser que se abra la puerta del horno y se desinfle el pastel.

Rusos y chinos están nutriendo de armas a los fundamentalistas árabes en todas partes y nadie olvida que Al Qaeda nació con apoyo financiero occidental. Cuando La URSS había entrado en Afganistan, tras un diagnóstico sumamente equivocado de la situación, los que hoy rasgan sus vestiduras por Palestina aplaudían cada muerto bajo los tanques rusos. Todos saben que los dos partidos en el poder en Palestina están ligados fuertemente al capital, el Hammas, del fundamentalismo, y Al Fatah de la tradicional burguesía palestina financiada por los poderosos capitales árabes afincados en todo el mundo. La oposición a estos dos bloques poderosos está fraccionada en decenas y decenas de grupos, partidos, movimientos, agrupaciones, clubes, hermandades y demás, donde la inteligencia palestina opera dividiendo aún más y la inteligencia israelita penetra hasta con periscopios desde las tazas de los baños. Es claro que Israel es un estado ficticio, nadie lo niega, sin embargo todos los estados lo son. Nosotros, autónomos comunitarios, apoyamos todos los procesos de independencia y ojala todos los estados se fragmenten en decenas y cientos de estados menores, hasta que se abra y se destape la realidad de que los estados no sirven y hay que sacarlos de encima de los pueblos para la autodeterminación de las localidades y comunidades. Como decía Marx: la comuna cumple las funciones del estado, a lo que su falso amigo Engels puso el grito en el cielo y con guitarra cantaba en todos lados «se equivocó la paloma», sosteniendo que esta frase de Marx «había que interpretarla». Carerraja. Otras, las que le conviene, no interpreta, o sea que el muy patudo se auto-otorga la atribución de determinar cuales frases de Marx son textuales y cuales no. Lo que en realidad quiere decir «tome las palabras de Marx y saque de allí lo que le venga en gana» o mejor aún «las palabras de Marx que refuerzan el rol central de estado, van todas juntas y ese conjunto se llama marxismo». Así, interpretando, rechaza que la comuna cumpla las funciones del estado, diciendo muy suelto de cuerpo que «no es que cumple las funciones», sino que «es el estado», o sea: «la comuna es la forma que asume el estado». Si el estado asume la forma de comuna, entonces la comuna es el estado, según Engels. Sin embargo cualquiera se da cuenta que se trata de un racionamiento algo forzado, por decir lo menos, ya que decir que el estado asume las funciones del estado queda extraño y Marx no parece ser del tipo que va a decir algo tan de Perogrullo, de modo que cada quien lo toma como quiere y todos felices. El tema viene de esconderlo, lo que ya sería un segundo peldaño para avanzar en una no dirección, en una dirección sin sentido, que usted ahora va a demostrar lo que digo respondiendo la pregunta de en cual libro Marx dice que otra cosa que no es el estado asume sus funciones sin que por eso se transforme en estado nuevamente. No lo sabe? Vaya a buscarlo, no escape. Cuando lo encuentro verá que está fechado en 1872 y la introducción de Engels donde rechaza el nuevo concepto de Marx es hecha 11 años después, en 1883, pocos días después del fallecimiento de Marx, ya que si lo hacía en vida, el hombre se habría molestado en que lo «interpreten» de manera distinta a lo que dice y quiere decir. Tuve una discusión con un compa que sostiene que es un problema de traducción, lo que a la larga resultó falso, pero él no mentía, creía sinceramente en ello y me discutió durante años y luego, aún reconociendo su error, le cuesta muchísimo aceptarlo. Ese es el resultado esperado por la Nomenklatura: que la gente se aferre, independientemente del raciocinio, que se asuma como dogma religioso, dogma de fe. De allí la importancia de rescatar los textos escondidos de Marx, verificar que su mirada frente al estado cambió en sus últimos 10 años de vida al observar los resultados conctretos de las propuestas políticas en la Comuna de París. Todos los mal llamados «marxistas» de hoy consideran el estado un escalón para transitar a la sociedad sin clases, el estado socialista como capitalismo de estado, o sea, terminan defendiendo el capitalismo, la gran sagacidad de la actual ideología, que consigue hacer que los críticos del capital terminen defendiendo el estado, ya que lo van a ocupar en acumular riquezas para distribuir a la población, lo que no funciona así, ya que todo gobierno para recibir del capital, debe entregar su alma a las sombras, como mostró Goethe en su irrepetible Fausto y Wilde en su Dorian Grey, evitando ambos los discursos y apelando a que en la lectura, al que le venga el sayo, que se lo ponga. Hay que leer otra vez el Frankenstein original donde el romanticismo intenta rescatar y recuperar los valores perdidos por el proceso de desnaturalización del ser humano. Volver a lo humano desde el punto de vista del romanticismo opositor al «humanismo» fue difícil y hubo que enfrentar las dos persecusiones, de los humanistas religiosos, especialmente soldados y 007 (espías con licencia para matar) del vaticano, cuyo servicio de inteligencia y contrainteligencia no tiene nada que envidiar a la CIA, la Cheka, el Mozad y otros clubes de espionaje, y de los humanistas liberales, soldados de la asamblea, de la masonería y del protestantismo. Un clásico es «Las desventuras del joven Werther», también de Goethe. Por eso los que no somos partidarios del estado como determinante de las conductas y del cambio social, podemos tener una actitud crítica hacia todas las guerras, a diferencias de los estatistas, que escogen un estado o varios próximos a sus ideas y toman partido en contra de los adversarios de los primeros. Se suman e invitan a otros a sumarse con este contendiente y atacar virulentamente al otro contrincante, ayudando así a reforzar el concepto de que todos tenemos que meternos a la guerra con los mismos instrumentos, herramientas o armas de los que se están matando en nombre de otros intereses, ya que no hay interés humano en asesinar a otro, salvo, reitero, cuando bajo la agresión de los estados, los pueblos desarrollan la autonomía y la autodeterminación de auto-defenderse, pero no cuando los convoca el explotador como es el caso los actuales conflictos.

Los oprimidos están interesados en el cambio, el fortalecimiento de las formas de vida en común, no en la disputa del poder, por eso no nos afecta ni nos interesa que se agarren entre los estados, salvo en lo que nos corresponde en nuestras tareas humanas y familiares de informar a la tropa que los empresarios, gobiernos y oficiales están coludidos para la defensa del capital, la propiedad, el patriarcado y el poder, por sobre nuestros cuerpos, nuestros hombros, nuestras vidas y nuestras muertes. Ni en el mundial de fútbol estamos interesados, ya que la competencia fomenta el chauvinismo, las fronteras, el comercio y demás vicios de la sociedad de consumo.

Los que nos intentan convencer de las bondades de la tecnología, encuentran en las bombas de racimo solamente un problema ético y teleológico, es decir, la ciencia «controlada», transfiriendo así las responsabilidades a los centros de poder, y con eso ya nos han hecho el truco de magia de que aceptemos el estado como vía del cambio, por una parte haciéndonos creer que el control de los buenos acabará con las matanzas y por la otra que los buenos destinarán los beneficios del capital a uso social, lo que es imposible, pues para acumular capital hay que explotar a los humanos y destruir a la madre tierra, donde también estamos incluidos los humanos. Es para escribir libros la cantidad de argumentos que se emplean para justificar hoy día la tecnología y el desarrollo, ya que culturalmente se trata de llenar de ilusiones la mala vida de la mayoría de la población del planeta y hasta ahora lo que ha funcionado es la promesa que parece traer el progreso, esto es, si los demás progresan, entonces yo también puedo hacerlo, escondiendo que el capital no puede traer progreso para todos, por mucha ciencia y tecnología que ponga en ello, sino solamente para algunos que va incorporando en sus redes y mantiene a condición de que ayuden a reproducir la convicción de que el único camino es el progreso, no importa que sean izquierdistas, lo que es mejor aún, lo que importa es que hagan su obra destructiva y se la justifiquen para si mismos y para los demás repartiendo argumentos en todas direcciones, como Evo Morales, hoy día el principal enemigo de la madre tierra y el principal discurso mundial en favor de la madre tierra. No se puede negar que el hombre es un artista, exactamente como Bachelet, aunque a algunos les duela la comparación. Ambos tienen indigenistas levantando las mejores banderas habidas y por haber, como Bachelet ha puesto en el micrófono a Huenchumilla, pero podemos estar seguros de que la presidenta no se va a colocar ninguna cinta mapuche. Ambos tienen como prioridad la gran minería y la energía mal habida como ejes de sus procesos de acumulación por desposesión. Ambos recibieron el espaldarazo de los partidos comunistas, en fin que no le voy a hacer el trabajo a usted, pues usted mismo, o misma, debería ver las similitudes, a menos, claro, que no las quiera ver por su postura personal o ideológica frente a todos estos temas. Si hay guerra entre Chile y Bolivia por el tema del mar, sería lo mismo que la guerra Israel-Palestina. ¿O no?

Obama acaba de decir que Michele 2 es lo máximo, de modo que se pondrá en esa guerra al lado del estado chileno, mientras Putín lo hará al lado del nacional-populismo evista, que se pone pluma para camuflarse de indianista. Los oficiales de las fuerzas armadas chilenas tendrán el rostro resplandeciente. Cualquiera podrá identificar un oficial uniformado en la calle, aunque ande disfrazado de civil, que es como poner a la novia junto a las damas de compañía y visitantes en el matrimonio, todos vestidos igual, y preguntar cual es la novia. Es el éxtasis, el non plus ultra, si para eso los preparan toda la vida: para matar, destruir, pisotear, aniquilar, odiar. En fin que esa guerra será de beneficio y argumentación para el capital, los gobiernos y los jefes militares y de ningún beneficio para la población y la tropa, que es lo mismo, ya que decir tropa es decir pueblo, miembros de familias y de comunidades. De modo que la población, las familias, comunidades y tropas chilenas son lo mismo que la población , familias, comunidades y tropas bolivianas. No hay fronteras entre ellos, solo para el capital, los estados, gobiernos y militares. De la misma manera la población, las familias, comunidades y tropas palestinas son lo mismo que la población, familias, comunidades y tropas israelitas, tampoco hay fronteras entre ellos. La pelea por el mar boliviano es la misma pelea por el fin de la ocupación del estado de israel sobre territorio palestino, ya que los kibutz podrían haber funcionado en cualquier lugar sin importar quien esté arriba profitando de la falsa superestructura del poder. Ni chilenos ni bolivianos tienen la razón, ambos deben irse de allí y cortar ya con el vaciamiento de comunidades, con la destrucción de la naturaleza, la desposesión territorial, la ausencia de alternativas de pueblos, villas y localidades y el repoblamiento de ciudades que ambos hacen exactamente igual. Ni Palestinos ni israelitas tienen la razón, son los pueblos y comunidades palestinas, israelitas y de otras identidades o nacionalidades los que necesitan vivir, alimentarse, cultivar, producir, cantar, bailar, reir. Lo demás es secundario, como el chat.

Von Klautzevitz (o como se escriba) decía que la guerra es la continuación de la política y la escuela china sostiene que la guerra es un arte, la primera ve la guerra dentro de su contexto y la segunda la ve como acto donde se expresan capacidades y habilidades innatas y adquiridas para obtener objetivos pre establecidos. Ambos tienen razón, pero al parcializar o mostrar solamente algunos aspectos del fenómeno estudiado, aparecen tergiversando, generando conceptos-fetiche o mitos de expresión ideológica. Veamos como nacen esos dos conceptos: Cuando Marco Polo visita con fines comerciales la gran Katay, escribe en sus notas varios elementos del desarrollo de la estrategia militar china, que obviamente no guardan muchas diferencias con las tácticas acumulativas empleadas por los Kan, a través de quienes ya habían chocado las estrategias oriental con la europea representada por la escuela clásica de los griegos y luego los romanos hasta el modelo francés-napoleónico que intentó devolverles la pelota llegando hasta la capital del zarismo, cuyas artes militares evidentemente provenían de sus antepasados que habían alcanzado hasta Europa al más puro estilo elástico-yoyo que va y se recoge. Napoleón Bonaparte, que tenía un brazo más corto como Piñera y tuvo el prurito de cubrirlo, instaló el imperio francés del moderno capital hasta las Rusia, siendo derrotado por el invierno, clavando las estacas del nuevo modo de producción capitalista y las formas del estado moderno. Es bueno leer el «18 Brumario de Bonaparte” de Marx para conocer como y por qué la expansión del imperio del capital que llegó a subordinar a la oligarquía europea. Los prusianos eran el corazón militar europeo, Prusia es una nación como Austria, de origen bárbaro-germánico que no puso ser aniquilada por las huestes romanas, pues su tradición militar guerrera proviene no sólo de la experiencia de las comunidades pre-romanas, sino que tenían a diferencia de otras comunidades un fuerte sentido de la disciplina de bloque de combate, en lo que se asemejaban a los espartanos, que eran ascetas y practicaban constantemente el entrenamiento militar lo que hacía de Esparta prácticamente un cuartel, a diferencia de Atenas, donde floreció el modelo democrático, es decir que el mando era llevado adelante por el encuentro de los miembros del demos, que eran los propietarios que contaban con más de cierta cantidad de tierras y más de cierto número de esclavos. El carácter asceta. militarista, vertical, centralizado y autoritario, sin permitir disidencias de ninguna especie, de la ciudad de Esparta, era similar en Prusia, donde Von Klautzevitz dirigió la estructura y operaciones. De Prusia viene la formación del ejército chileno, en tanto la marina viene de Inglaterra y la Fach de Estados Unidos, carabineros de Italia y detectives de Investigaciones de la estructura de la Masonería.

Las disputas y contradicciones de clase, nacionales, por territorios, etc. son todas ellas derivadas de la estructura económica, es decir, del modo de producción y, por extensión, de la formación económico-social: modo de producción y superestructura político-ideológica, todo ello como expresión del antagonismo de la sociedad patriarcal Vs. la comunidad matriarcal, a la que derrotó históricamente y debe mantener subyugada mediante el poder, evitando que sus partes vuelvan a reunirse en los modos originales biológico-naturales (Ver mi texto de la auto-liberación del común en http://clajadep.lahaine.org). Hay teóricos que resultan un tanto burdos o prosaicos para sostener los factores de la fragmentación del ser común, como Thomas Hobbes, el secretario personal de Sr. Francis Bakon, padre de la ciencia experimental moderna, que sostiene en el Leviatán que el estado natural del hombre es la guerra permanente, que el hombre es el lobo del hombre, es decir que por biología nacen atacándose los unos a los otros y que por eso es necesario que acepten ser prisioneros, les guste o no les guste, en bien de la civilización y el orden, todos deben ceder su libertad, su autonomía, su potencia, su soberanía, su poder a una figura unipersonal que asume el total de la autoridad y la soberanía concentrada de todos, de allí que la autoridad se denomina «soberano», en un proceso de substantivación del adjetivo, de «poder soberano» o «sujeto soberano» se pasa al soberano, como algún dios todopoderoso que pasa a ser simplemente «el todopoderoso», como en la oligarquía: «su gracia», su «merced», o en el campo chileno: «su mercé», o en los protocolos institucionales: «su excelencia», «su señoría», para que no nos olvidemos que estamos en presencia del poder y que somos nosotros los pecadores inferiores postrados frente a «su divina gracia». Es la reverencia, doblar el cuerpo hacia adelante bajando la vista en señal de subordinación. Lo contrario es la irreverencia. Por eso la importancia de los cuerpos armados, ya que la irreverencia viene en el instinto y los primeros destacamentos de hombres armados debían contenerlo, reducirlo, inhibirlo, evitar su ejemplo, reproducción y multiplicación, ya que la rebeldía es contagiosa debido a que rescata lo arrinconado y permite el despliegue de la potencia.

De allí que podemos sostener que el arma, el grupo armado y la guerra son instrumentos del hombre contra si mismo. Distinto es alimentarse de un búfalo que reventar decenas a punta de dinamita, como hacía el «gran» Búfalo Bill. Diferente es la pesca artesanal que la pesca industrial. Esa es la guerra, dispararse a si mismo, una parte de la humanidad dispara contra otra parte, es como uno dispararse en el ṕie o en el estómago.

Para conseguir que nos interesemos en matar a otro humano, primeramente nos hacen creer que no somos partes de un todo fragmentado, sino que somos grandes, inteligentes, hermosos, es decir «individuos», una integralidad, cuya semejanza con los dioses es superior obviamente a nuestra similitud con las hormigas. Nos han hecho vivir separados borrando nuestro pasado comunitario y nos hacen competir, ganar, perder, ser superiores o inferiores, buenos o malos, mejores o peores, en fin, ni se te ocurra pensar en plural, eres solo contra el mundo, el mejor de todos (y el ego entrenado para ronronear como un gato se manda sus voladas onanistas a más no poder), el último sobreviviente, el ejemplo de tu raza, el explorador del espacio, el Max Mad, el superhéroe, el Xman, el Rambo, el vengador del futuro, el que se lleva las mejores minas. Bájate Pacheco. Ya sabes que por todos lados y a cada momento vienen desde todas partes los estímulos a esas sensaciones altamente positivas que nos llenan de bienestar quasi orgásmico. Tú puedes, a usted lo necesito, disfrute este perfume como Antonio Banderas y la mansa rubia o beba la Morenita o la rubia, en fin, se las van a poner todas por delante, en una secuencia interminable para evitar que la ausencia de placeres alguna vez lo haga pensar en donde está parado. Y ese sujeto, o usted, rodeado de placeres, placeres que caminan como garrapatas por su hedonismo condicionado, no siente nada cuando tiene que competir y ganarle el quien vive al otro. Nada. Ni tan siquiera cuando extrae del otro cuerpo la bayoneta sangrante, ya que Tarantino se encargó de la banalización del chorro de sangre humana, así que no joda. Si se ha divertido con Tarantino o las películas de vampiros jadeantes y babosos permitiendo que sus hijos acompañen, acepten y no griten de horror ante el espectáculo de los ojos de usted brillando ante el color de la sangre, no le creo para nada su dolor ante la Palestina arrasada. Cuando usted haga campaña en su barrio para acabar con la profusión de juegos electrónicos y cibernéticos llenos de muertos con que están educando a nuestros niños y usted, el baboso, no entendía por qué aumenta el bulling escolar y ahora recién le cae la ficha, ahí lo miraré y diré: al fin una persona sensible, Uf! Aún hay esperanza. Los partidarios de Palestina que aplauden los muertos del lado de Israel y viceversa, parecieran espectadores de un partido de fútbol.

No es posible que ante un espectáculo sangriento usted se conforme con tomar partido por uno u otro bando dando gritos de mátalo, mátalo. Y si está por los israelitas no va a sentir dolor por la bala que entra en el cuerpo de un palestino. A su vecino que es de derecha usted iría a meterle una bala y más encima bailar el mambo alrededor del cadáver?

Así nos tienen. El problema no está ni en los israelitas, yanquis ni fundamentalistas, sino en cada uno de nosotros, nuestra casa, nuestra familia, nuestro barrio y nuestro entorno, donde reproducimos los tipos maniqueos en que se divide el mundo, los buenos aquí y los malos allá. La categorización, calificación y clasificación de las personas genera tipos, estereotipos y prototipos. Constantemente estamos evaluando, criticando y juzgando a los demás, ya que es una práctica imprescindible para darle cierto perfil, consistencia, seguridad y auto-estima a nuestro ego, el pobre, taaaaan necesitado que llega a dar risa ver tanto «perfeccionamiento» personal para ser mejores, ya que sabemos que acercarnos a los demás es para que nos dejen sin cuero ninguno y justamente llegamos todo chupados, cohibidos, dando pie para que nos disparen pullas, chistes y demás, ya que esa es la continuación de la inseguridad propia de una individualidad exigida para ser fuerte, hermosa, única, poderosa, talentosa. Pocos pueden llegar a un lugar atravesando todas esas barreras de mierda, empezando por las propias, caray, por eso la agresividad, golpear primero antes que me lo hagan a mi, es la regla y las familias prestan poca atención a ese silencioso proceso de formación del odio y la distancia. Llama la atención ver familias donde la hija corre asustada por cualquier bicho y exige que lo maten, enseñando a sus vecinas y amiguitas sin hablar, simplemente con gesto de horror, gritos y actos destructivos contra el pobre animalito, generando psicosis e histeria anti-bichos, lo que es sólo un ejemplo, pues eso mismo se da en diferentes planos de la vida. Quien mata un bicho es un desnaturalizado, lo que no es una ofensa, simplemente se ha distanciado y opuesto a lo natural, por tanto a si mismo.

La lucha por el poder obliga a los que aspiran a ocupar sillones allá arriba a declarar la guerra contra los otros candidatos, por lo que no es extraño el despliegue de la violencia en ese terreno, así todos los troskistas del mundo se van a mover en determinada dirección, tal vez diferente a la que escojan los anarquistas. Hoy día la izquierda de todos los colores está del lado de los Palestinos, sin importar que el financiamiento del actual gobierno provenga de la explotación capitalista y del extractivismo que destruye la madre tierra. Las pugnas entre serbios y croatas fueron escenario de posicionamiento ideológico donde la postura más derechista de los croatas llevó al posicionamiento internacional de los más derechistas en su apoyo, lo contrario que los serbios, de allí que basta que un gobernante se posicione de una manera para que se despĺacen los apoyos de acá para allá, aunque nadie pregunta a los pueblos, sólo se mira el color de la ideología.

Por eso los de arriba van a seguir en guerras, mientras los de abajo vamos a seguir como carne de cañón de la guerra de los de arriba, a menos que cambiemos la situación, lo que no pasa por cambios de gobierno, sino por miles de experiencias de formas de vida comunitaria en todas partes.

Abrazos

Jaime Yovanovic Prieto (Profesor J)
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