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Desde hace dos semanas los pobladores de La Convención, organizados en un comité de lucha, retuvieron trece camiones que transportaban tractores y tubos hacia los campamentos de Ayacucho, cuatro vehículos que llevaban alimentos, un camión con semillas y otros cuatro camiones-cisterna llenos de combustible.
¿El motivo? Ellos exigen la rehabilitación de los puentes y la carretera que están en mal estado supuestamente por el trajín de vehículos pesados que van hacia la obra.
Funcionarios del Consorcio Camisea pidieron a los dirigentes de las federaciones de trabajadores y campesinos de La Convención que liberasen por lo menos los camiones con alimentos, debido a que unos ochocientos trabajadores de Kiteni y Kepashiato, de las firmas Techint y Transportadora de Gas del Perú (TGP), se encuentran desabastecidos.
Sin embargo, en forma sorpresiva, unos cincuenta policías que arribaron de Lima ingresaron al centro poblado de Kiteni empleando bombas lacrimógenas para disuadir los piquetes de huelga que mantenían bloqueado varios tramos de la carretera de acceso.
El presidente del gobierno regional, Carlos Cuaresma Sánchez, dijo que como consecuencia del enfrentamiento hay 26 detenidos, quienes serán liberados una vez que rindan su instructiva.
Mientras tanto, voceros de la policía indicaron que cinco de sus efectivos se encuentran heridos, mientras que los dirigentes campesinos dicen tener unos veinte heridos y más de una decena de personas asfixiadas por los gases lacrimógenas.
En estos momentos hay decenas de vehículos a mitad de camino, mientras que el servicio interprovincial hacia La Convención fue suspendido hace una semana.
Hasta ayer la localidad de Kiteni se encontraba en tensa calma, mientras que más campesinos llegan para reforzar la medida de fuerza. Se anuncia que una comisión integrada por los viceministros de Energía y Minas, Transportes y Comunicaciones y el Interior, así como funcionarios de la TGP y Techint llegarán hasta Quillabamba para tratar de buscar una solucionar al problema.
