Chile: Carta a los abstencionistas y a los electores

Carta de abstencionistas a los electores

Por Jaime Yovanovic Prieto (Profesor J)

Estimados electores o electoralistas y no votantes o abstencionistas:

Tratarnos entre nosotros de abstencionistas y electoralistas es despersonalizarnos, vivir, pensar y comportarse como categorías sociales, como un club de Tobi, un tubo, una secta, un partido. “Nosotros los abstencionistas” Bravo! Vivan los abstencionistas! Tírame la a!. A! Tírame la b!, B!, Tírame la s!. S! Y así.

Pero no hay identidad entre los abstencionistas. Normalmente se trata de izquierdistas o ex izquierdistas, anarquistas o ex anarquistas, libertarios o ex libertarios, y más. El tema que algunos no hacen nada por el cambio, siendo meros espectadores y opiniólogos, seduciendo audiencias con sus análisis políticos y sesuda crítica al sistema o sus modos “alternativos” de convivir en y con las jaulas, imaginando que cerrando los ojos resulta aquello de “ojos que no ven, corazón que no siente”. Otros dicen que trabajan para el cambio y cuando uno va a ver, se trata de gente que vive del fetiche del estado y las instituciones, o a ocuparlo, por las malas o por las buenas, o a destruirlo, en una fijación doctrinaria y principista necesaria como necesitan diferenciarse los católicos de los evangélicos, los del Colo de la U, o los buenos de los malos, ya que para todos ellos el cambio, la reforma o la destrucción, se basan en las matemáticas, de sumar uno más el otro, el número, lo meramente cuantitativo, y hacen convocatorias para mostrar que su club tiene muchos seguidores, más que los otros, huichipirichi!, haciendo pirámides, conos, ángulos y triángulos desde el vértice donde están los inteligentes, los generales de la revolución, o más bien como la ley del embudo, donde tenemos la boca grande de los vendedores de pomadas y la boca chica que se espera introducir en una colonoscopia para soplar y soplar como el lobo que tumbaba las puertas de los chanchitos y de los gansos que de tanto gritar ”Ahí viene el lobo!” no resultó otra cosa que el flautista de Hammelin, cuya flautas debía cumpĺir las mismas funciones colónicas o colonizadoras del embudo.

Hay quienes contribuyen a las aproximaciones entre vecinos para generar el roce necesario para el brote del común, del instinto y del amor como modalidades de relaciones más profundas y así cambiar el mundo desde abajo, desde los corazones y ya no más desde la teoría y la estrategia, siendo nuestro eje, objetivo y estrategia el desarrollar el gusto de estar juntos. En este campo la gran mayoría son abstencionistas por rechazo a las instituciones que mantienen las distancias, el individualismo, los profetas, el odio, el miedo y la competencia, sin embargo entre los vecinos no podemos transferir nuestras miradas u opiniones, lo que sería lavado cerebral, una concientización. De allí que promovemos el no-anti, no al anti-estado, no al anti-capitalismo, no al anti-sistema, para motivar el pro, a favor de otra sociedad: las formas de vida comunitaria, el buen vivir de la cotidianeidad compartida, de manera que nos encontramos en medio de vecinos y vecinas que no vamos a “atraer” con el pelambre, es decir, hablando mal de los otros o atacando a las formas externas a nosotros mismos que determinan nuestras vidas, sino desplegando la potencia del ser , que en la medida que va formando un circuito de vida, amor, energías -el newen- y nuevas relaciones de afecto, respeto, comunicación, etc, se va creciendo como un árbol que extiende sus ramas hacia el infinito atravesando y sobrepasando todo aquello que obstaculice su crecimiento.

Entre nosotros y los “conscientes” se instalan lazos de oposición, choque, sectarismo y competencia verbal y aún de facto, ya que al negarnos a concientizar no estamos contribuyendo a la multiplicación de la manipulación, lo que es mal visto por quienes quieren “conducir” a la gente, cada uno por un camino diferente disputándose la clientela, por ello le tienen horror a la autonomía, pero se tranquilizan cuando ven que entre algunos de nosotros esa autonomía es sólo de un colectivo que no responde a los partidos, pero que en el fondo, cuando llevan una mirada preconcebida al barrio, están haciendo lo mismo. Más panico les produce a los pastores de ganado social que se disminuya el individualismo en las prácticas de compartir avanzando hacia las formas de vida comunitaria, por lo que tienen doble motivo para insistir con sus flautas de Hammelin o cantos de sirena.

También entre los propios vecinos existe la división entre quienes votan y quienes están cansados de votar porque siempre da en lo mismo, sector social que aumenta debido a la crisis de los partidos, institucionales o no, parlamentarios y extraparlamentarios, así como cansados de salir a marchar y movilizarse para que los partidarios de “la lucha” puedan pescar a río revuelto. Además entre los que votan hay más divisiones entre izquierda, centro y derecha y en cada uno de ellos varios partidos, movimientos y corrientes, en fin, una multitud de organizaciones y candidatos “independientes” disputando los favores del ganado formado por ellos mismos, que a veces se va detrás de un pastor, otras veces detrás de otro y cambian de siglas como de camiseta, en tanto los perros pastores muerden las patas que quienes se salen de la fila, perros de color verde, rojo, multicolor, negros, azules, naranjas, en fin, hay para todos los gustos y disgustos.

De manera que la coyuntura electoral municipal que se está abriendo en estos días, al estar en medio de la crisis, será una verdadera batalla campal entre partidos y corrientes, lo que ya comenzó por medio del globo sonda de regresar al voto obligatorio, esto es, con severas sanciones a quien no vote, por ejemplo el fin del crédito universitario a quien no presente el timbre respectivo, ya que la juventud es sumamente abstencionista y “si quieren que el estado pague sus estudios”, o sea, “quieren derechos”, entonces cumplan también sus “deberes ciudadanos”. Si sale o no sale esa vuelta a la obligatoriedad, será sólo un pelo de la cola, pues la avalancha de candidatos y partidos e independientes va a ser tan potente que va a alcanzar todas las esferas de la vida, del trabajo y los medios ,en formas no conocidas anteriormente, por la desesperación de los partidos para salvarse del hoyo. Además como gancho adicional se está discutiendo si junto al voto municipal se hace una especie de plebiscito de la constituyente, o sea, no hay que decir que están desesperados, lo dicen solitos.

Pfeir, el candidato “ecologista”, está promoviendo el parttido “Todos”. El Partido Comunista amenaza con salirse de la Nueva Mayoría, en especial tras su enorme pérdida de legitimidad entre los profesores y otros sectores. El Partido Igualdad con el PC(AP), el PTR (troskista), el frente patriótico Manuel Rodrígez, Andha, partidaqrios de la Asamblea Constituyente, el Todos a la Moneda, grupos formados de salidos del PS, de la Surda y del PC, el colectivo Acción Directa, los Hijos de Mafalda, el movimiento patriótico Manuel Rodríguez, el MPL (que tanto habla de la “autogestión”) y una enorme cantidad de grupos, partidos, movimientos (incluidos el de Alto Maipo y Modatima, del agua, ambos dirigidos por partidarios de la toma del poder), centros culturales izquierdistas, artistas e individualidades, se reunen para armar un bloque al estilo de “partido instrumental”. El PS y el PPD decidieron lanzar juntos sus candidatos a concejales.

En fin que la cosa está que arde y las chispas van a meterse hasta en el baño de las casas confundiéndose con objetos usuales derivados del cuerpo. Todo ello indicadores de la crisis en que se encuentran y que nosotros, autónomos que trabajamos en los barrios promoviendo encuentros de cotidianeidad, tendremos que sortear como toreros en medio de la vorágine electoral que va a dividir aún más a los vecinos y obligará a muchos centros culturales y similares a tomar partido por uno o por el otro, en especial los que dependen de fondos institucionales y los que son dirigidos camufladamente por alguna tendencia y que aparecen como “autónomos”, lo que no será problema ninguno para los que promueven guetos, corrientes de afinidad, comunidades cerradas, o la chuchoca callejera como “formas de lucha” de las vanguardias rebeldes y anarquistas que viven preconizando la violencia y la destrucción, que estarán en su salsa, pero sin contribuir un pelo al desarrollo del común y del protagonismo de los vecinos, que serán así empujados a buscar salidas entre los partidos y candidaturas “independientes”, por lo que algunos “alternativos” en el caso del voto obligatorio. promoverán el voto blanco o nulo para después anunciar la “victoria” de su propuesta, ya que van de vanguardias.

Por todo eso es que en varias comunas del país, entre grupos, experiencias y personas, se ha iniciado el intercambio para levantar candidatos independientes vecinales a concejal, uno por comuna, inscritos debidamente, sin propaganda, sin dineros, sin aspirar al cargo, sin pedir el voto y llamando a organizar actividades compartidas en cada barrio, aprovechando el vendaval de las propuestas y frascos de vitrina con etiqueta de marketing, para recorrer los barrios neutralizando la ofensiva institucional mediante actividades concretas como el candidato tomar la pala e iniciar una huerta junto con un par de vecinos, o una escuelita autónoma, o un comité de salud natural, o etc, cualquiera actividad que le guste a los vecinos, voten o no voten, abstencionistas y electoralistas.

No vamos a resisir ni oponernos al chaparrón, no vamos a participar de las divisiones, sino que estaremos en el medio del ojo de la tormenta, respetando la autonomía de quien quiere votar y de quien está cansado de hacerlo. No vamos a apoyar el referente de los abstencionistas ni vamos a apoyar los referentes electorales. No nos importa por quien voten, si por nosotros o cualquier otro, lo que importa es la realidad y la situación del barrio y del otro barrio para descubrir en ello las formas en que los vecinos pueden tomar en sus manos algunos asuntos comunes, aunque sean pequeños, pues son brotes y semillas, seremos pregoneros de los pequeños ejemplos ya existentes por muchos lados y contrbuiremos a la multiplicación de los incios de formas de vida comunitaria.

Podemos intercambiar al respecto en el correo de Vecinos Independientes
vecindep@gmail.com
Y en el grupo facebook “democracia comunitaria”

Reciban un saludo afectuoso

Jaime Yovanovic Prieto (Profesor J)

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