Entender a Fidel Castro: La derecha lo atacó y la izquierda lo usó.

Entender a Fidel Castro: La derecha lo atacó y la izquierda lo usó.

El grupo de activistas que asaltaron el Cuartel Moncada, que luego formaron el Movimiento 26 de Julio y se alzaron en la Sierra Maestra, no era un grupo de izquierda, eso lo sabe todo el mundo, sino que eran jóvenes idealistas, nacionalistas, democráticos y constitucionalistas, odiados a muerte por el Partido Comunista, los títeres de Moscú del Partido Socialista Popular, que se opusieron tenazmente a la guerrilla y que al Che no lo pasaban ni en pintura, ya que nunca quería filiarse a un partido y expresaba una forma rara de autonomía para la época de alguien que ni siquiera se molestaba en disputar a los camaradas la “verdadera” interpretación del mundo, estudió a Marx y Lenin llegando a conclusiones distintas de la ortodoxia. También era sabido que, junto al Che, el principal aliado y consejero de Fidel era Camilo Cienfuegos que, proveniente del anarco-sindicalismo traía la imaginación, creatividad y autonomía de la potencia social, aunque con sus limitaciones ideológicas, en tanto Fidel insistía en el programa estrictamente democrático y rescatar la constitución aplastada por la dictadura militar, para lo que se dedicó más a la creación de la que se llama malamente “fuerza social”, aunque su programa democrático expresaba las necesidades de coyuntura.

Fue la reforma agraria realizada en la sierra la que unificó a los campesinos detrás del ejército rebelde, o sea, empezaron a aplicar el programa y así se pudo canalizar la potencia social en la dirección concreta de la transferencia de las relaciones de servidumbre hacia las relaciones de la tierra y la producción más compartida.

Triunfando la revolución, los Estados Unidos estrechan el cerco y no les quedó más remedio a los rebeldes que aceptar la ayuda “desinteresada” de la URSS, que a cambio exigió que el 26 de julio se unificara con el PSP y que sus cuadros ocuparan puestos administrativos y se aplicara la economía soviética instalando de facto un estado bajo la órbita del socialismo real.
Fidel quedó en medio del PSP y el 26, pero el cerco soviético le obligó finalmente al ostracismo, al arrinconamiento, pudiendo solamente dedicarse a mantener la figura de líder escribiendo documentos de análisis. Las guerrillas latinoamericanas nacen su mayoría como la ETA, es decir orientándose más por las ideas y ejemplo del Che que por el paradigma estatista soviético, lo que hace que entre guerrillas y alianzas sucedan hechos extraños que se mostraban como pugnas internas, como la muerte de Roque Dalton, de los comandantes Ana y Marcial, el gigantesco Cayetano Carpio, secretario general del PC salvadoreño que sale a formar una guerrilla guevarista en abierta pugna con el estalinismo, temas que esconde habilmente Marta Harnecker en sus estudios, entrevistas y libros publicados y distribuidos universamente gracias a su vínculo directo con la alta jerarquía cubana. También hay que anotar el sabotaje que realizó el PC boliviano al Che, que poco tiempo atrás se había comprometido en reunión con el PC cubano y el ELN a trabajar en conjunto la guerrilla con el campesinado y sectores urbanos, lo que el PCB hechó atrás quedando el Che aislado para que el pelotudo de Debray pueda escribir que el eje de la tesis del Che era el foco y muchos agarraron papa concentrando fuerzas en el plano militar, vanguardista y demás que muy luego llevaron al fracaso en todo el continente y hasta hoy muchos se preguntan el por qué.

Fidel no fue un traidor, pues sabía perfectamente que el pueblo cubano sería destruido si no se entregaban a los soviéticos, quienes obviamente se aprovecharon lisa y llanamente de la situación y acabaron con la revolución, lo que no ha podido hacer el estalismo con el proceso de la autonomía zapatista y la multiplicación de las autonomías diversas por todo México y nuestro continente Abya Yala, por más que les duele en el alma y siembran lo que pueden contra el zapatismo a nivel mundial arrastrando al resto de los destacamentos de las izquierdas estatistas que asumen el capitalismo para dirigir gobiernos y procesos aplastando la potencia social. Tampoco el estalismo ha podido acabar con la autonomía del confederalismo democrático kurdo, que ya ha sido implementado por otras comunidades árabes y diversas de la región.

Hasta siempre, compañero Fidel, fuiste honrado y consecuente hasta el final a sabiendas de que tu ejemplo y figura fue y es instrumentalizado venenosamente por las izquierdas estatistas y los partidos mal llamados “comunistas”, que no están ni ahí con el común. ¿Podías haber hecho otra cosa? Creo que no, te la pusieron para un si o si, ya que las bestias te acosaban por dos flancos: la izquierda y la derecha. Escogiste la que traería menos muertos, menos dolor, menos sufrimientos, aunque a la larga quedó demostrado que dio en lo mismo.

No deben haber lágrimas por ti, pero los oportunistas van a seguir usando ahora tu cadáver para vender sus pomadas y atraer gente buena detrás de sus falsas banderas. Sin embargo, la historia te absolverá.

Jaime Yovanovic (Profesor J)
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