Análisis de coyuntura y cambios en la política chilena

Análisis de coyuntura y cambios en la política chilena

A nivel mundial se ha ido aclarando que hay dos modos de entender y actuar la política, la una en la pugna de partidos por ocupar cargos institucionales del poder, incluyendo las guerras por control de territorios, la otra es la práctica de la democracia y la asamblea en todos los niveles, incluyendo barrios, centros de trabajo, centros de estudio, organizaciones sociales y el mundo de la vida, así como la participación, la deliberación, la autogestión de alimentos y medicinas, el protagonismo, el ejercicio directo de la soberanía popular y el autogobierno de localidades.

Los partidos insisten que la política es la disputa del poder relegando a la población a ejercer la soberanía popular solamente mediante el voto que definirá quienes van a administrar las instituciones del poder y la distribución de las finanzas estatales.

Por ejemplo en Argentina y Brasil, la oposición de izquierda se dedica a luchar contra el gobierno de derecha e intentar ganar las siguientes elecciones negando todas disposición constructiva a la derecha (la que por su vez hace exactamente lo mismo), pero negando también las capacidades propias de influir en los cambios necesarios a nivel de población y nuevas relaciones sociales en el mundo de la vida que representen avances en dirección al cambio civilizatorio que permita sustituir al capitalismo. La conclusión parece ser: No hay cambios posibles si no se controla el gobierno, por ello se abandona la política democrática para concentrarse meramente en la política electoral o de fuerza para acceder a los aparatos del estado. Por ello es que se ha transformado la política en simple lucha izquierda-centro-derecha-extremos, lo que a su vez coadyuva a la mayor fragmentación de la gente y multiplicación de los onstáculos que entorpecen la recuperación del común.

En esos dos países la derecha es acusada de ser capitalista, sin embargo los gobiernos anteriores de izquierda fueron capitalistas también, haciendo creer que se necesitan varios gobiernos seguidos que finalmente terminan siendo coto de caza de la nomenklatura y la burocracia que acaba devolviendo los gobiernos a las derechas y regresando a la oposición para movilizar masas en contra e intentar nuevamente el acceso a los aparatos.

Lo mismo sucede en Chile. El que está en el gobierno lo defiende y el que está en la oposición vive luchando para acceder otra vez al comando de la nación. El resultado está a la visat: el extractivismo está destruyendo el planeta y la brecha entre ricos y pobres sigue creciendo.

La centro-izquierda de la Concertación tuvo varios gobiernos seguidos y la vida de la mayor parte de la población está peor. Quienes han tenido un leve crecimiento han sido los sectores profesionales que se hacen izquierdistas sin tocar sus intereses personales de capa social beneficiada de la educación universitaria y la tecnología, o sea, izquierdistas a medias, y además iluminados por el toque divino de ser vanguardias y apóstoles escogidos que llevarán a las ovejas al reino de la felicidad, y que son justamente los que han formado el Frente Amplio en que se han aliado a miembros de la aristocracia obrera y militantes obsesionados por las espectativas de status y poder.

Después de haber ganado la derecha con Piñera, la Concertación, convertida en Nueva Mayoría tras la incorporación del Partido Comunista, que modificó su vieja política del reformismo obrero por la del reformismo pequeño-burgués, ya no se ha podido recuperar más. Ha sido tan descarado el funcionamiento de los aparatos partidarios imbricados son el estado, que todos se han dado cuenta y reventaron con los destapes de la corrupción que salpicó a todos, sin excepción.

Hoy día la Nueva Mayoría está hecha añicos y los partidos van cometiendo un error tras el otro apremiados por los plazos de la próxima elección que ganará Piñera nuevamente quedando para el resto de partidos solamente la alternativa de constituir cada uno su grupo parlamentario para evitar que el gobierno de derecha haga un buen gobierno y para preparar el terreno de las siguientes elecciones municipales que abonarán el terreno de las siguientes parlamentarias y presidenciales que por su vez…. Y así por delante.

Hay razón para estar molesto y la población ve que:
1) Su situación es cada vez peor, no mejora ni se mantiene.
2) Los políticos manejan, usan, derrochan y se apropian de ingentes sumas monetarias.
3) Los partidos llaman a nuevas elecciones como si nada.
Qué ha hecho la gente?
1) Han dejado de votar
2) Se han dejado llevar por el consumismo y el sálvese quien pueda
3) Confunden la política electoral y los políticos en el poder, con la política democrática, participativa y protagonista, con lo que se niegan también a participar de las dinámicas alternativas y alterativas (Las alternativas son las que se alternan y las alterativas son las otras).

O sea la izquierda es como el perro del hortelano que no come ni deja comer, ya que controla y cohibe el protagonismo social para subordinarlo a la fuerza y votos que requiere para ganarle el quien vive a la derecha, y no puede permitirse la autonomía social debido a que si no tiene seguidores no tiene nada, de modo que la ataca tanto como ataca a la derecha.

Como resultado vemos que la Nueva Mayoría lleva dos candidatos presidenciales, el progresismo otro y el Frente Amplio otro. Veamos:

La tendencia es al aumento de la abstención, de modo que en el mejor de los casos para el bloque centro-socialdemocracia-progresismo-izquierda, así como el bloque de la derecha, ambos bloques mantendrían más o menos la misma votación de la elección presidencial primera vuelta pasada. Un sector NM votará Piñera, como sucedió en Providencia con Mathei, y otro sector NM votará Frente Amplio, de tal manera que la segunda vuelta, de haberla, será entre Piñera por la derecha y Guillier o Sánchez que, salvo pequeños detalles y pelos de la cola, son exactamente lo mismo, y como ya estarán definidos los bloques parlamentarios desde la primera vuelta, no habrá dificultad en que toda la NM llame a votar Sánchez o todo el FA convoque a votar Guillier y no habrán disidentes, pues para formar los bloques parlamentarios hay una enorme gama de intereses comunes a considerar. Ya hay varios indicadores que demuestran la simpatía que provoca Sánchez en las filas de la DC,

De modo que si compite Guillier o Sánchez y llegaran a ganarle a Piñera, lo que no puede ser descartado del análisis, tendremos un gobierno que no podrá superar en nada al de Bachelet y cuya principal característica será la subordinación al gobierno de los movimientos sociales que el FA ha arrebatado a la NM. En tanto la derecha con Piñera intentará congraciarse y hacerse el simpático con diversos sectores, pues tienen clara la necesidad del empresariado de tener el país quieto y tranquilo como una taza de leche y aceitado como buen engranaje pues se viene la crisis, que no es cuento de del lobo.

Y colorín colorado, este cuento no se ha acabado.
Pasamos ahora a hablar de política:

Dejando de lado la pugna por los cargos estatales, vemos en las noticias casi todos los días como se expresa y crece la política a nivel planetario de las dinámicas de pueblos que practican la democracia sin disputar el estado ni sus cargos ni intentar “destruirlo”, sino simplemente han hecho de la democracia y del protagonismo social una manera de administrar los asuntos públicos de todos desde el barrio, la comuna y la región, cambiando los modos de vivir, de alimentarse y de compartir interactuando con la madre tierra en lo que ha denominado el cambio civilizatorio de defensa del planeta y del ambiente.

A nivel internacional puede ver esas experiencias en http://clajadep.lahaine.org
y en el caso de los territorios ocupados por el estado chileno (y el argentino) puede ver la voz mapuche en http://alianzaterritorialmapuche.blogspot.cl

Jaime Yovanovic (Profesor J)
unlibre@gmail.com