Euskal Herria: Dos formas de enfocar el sindicalismo

02.Nov.03    Análisis y Noticias

La lucha contra la precariedad será la clave en la negociación colectiva 2004
·ELA y LAB reeditarán «con casi toda probabilidad» la alianza que firmaron en febrero

La lucha contra la precariedad laboral será una de las principales claves en que se moverá la negociación colectiva de 2004. ELA y LAB reeditarán con casi toda probabilidad la alianza que firmaron, junto a ESK, el pasado mes de febrero para hacer frente a la patronal, que cada vez muestra una posición más cerrada, y a los sindicatos estatales CCOO y UGT, que en más de una ocasión «salvan de aprietos a la patronal con pactos de eficacia limitada».

Juanjo BASTERRA

BILBO

Los sindicatos abertzales calientan motores para la próxima negociación colectiva de 2004. En torno a 300.000 trabajadores estarán afectados en Hego Euskal Herria con la renovación de los convenios del Metal, del sector Público; la Construcción, de Gipuzkoa; Artes Gráficas, de Bizkaia y Gipuzkoa; Hormigones y Canteras de Bizkaia, donde hace dos años se produjo un conflicto que paralizó el sector de la construcción con una intensa huelga; o el de Transportes de Nafarroa, entre otros muchos.
La economía parece, aunque no de forma muy nítida, volver a una senda de crecimiento; los empresarios están consiguiendo importantes beneficios; y la productividad de la industria vasca alcanza un nivel muy satisfactorio para cerrar acuerdos comerciales en todo el mundo. De hecho, las exportaciones han vuelto a un panorama de crecimiento.

Sin embargo, en el otro lado de la balanza, el aspecto puramente laboral, todavía la elevada temporalidad y precariedad entre los trabajadores son un problema importante, porque generan inseguridad entre los mismos y sumisión ante las direcciones. Además, se mantienen las discriminaciones hacia la mujer trabajadora, o entre los propios trabajadores con la inclusión de dobles escalas salariales o con la introducción de incentivos lejos de la letra impresa en los convenios; o los problemas de seguridad y salud en las empresas.

Todas estas cuestiones conforman un cóctel que estará presente en la próxima negociación colectiva, como así lo manifestaron Sebas Andreu y José Luis Rezabal, responsables de ELA y LAB en este ámbito, respectivamente.

Andreu aseguró a GARA que «es el único instrumento que tenemos para incidir en las situaciones reales de los trabajadores y sus condiciones de trabajo», mientras que Rezabal, igual que el dirigente de ELA, expresó que se debe ahondar en la nueva dinámica sindical que se plasmó en febrero de 2003 y que conllevó «un nivel de confrontación más y mejor que en años precedentes». Ambos reconocieron que para el año 2004 se reeditará, «con casi toda probabilidad», la alianza sindical abertzale, pero explicaron que «se debe consolidar el proceso y extender los espacios posibles», según el dirigente de LAB. Por su parte, Sebas Andreu destacó que «el logro de un nuevo escenario para los trabajadores es un planteamiento de trabajo a medio y largo plazo, donde cada campaña de negociación colectiva debe suponer un avance», opinión compartida por José Luis Rezabal. Las claves en que se moverán en 2004 se basan en la lucha contra la precariedad laboral, muy extendida en los centros de trabajo, y las discriminaciones.

En este sentido, desde ELA se asegura que se irá, aunque falta por concretar en cada convenio, a una perspectiva de reivindicación del IPC más 2 puntos; reducción de la jornada semanal para «ponerla en línea con las 35 horas» pero, a partir de ahí, «dándole muchísima preferencia en la acción reivindicativa a la precariedad en su sentido más amplio y a la discriminación», tal y como explicó Sebas Andreu.

En este caso, José Luis Rezabal insistió que la precariedad debe ser el elemento central «para obtener el empleo de calidad en todos los ámbitos de negociación». LAB pretende ahondar algo más para que «no queden sólo en declaraciones más o menos dignas, sino que debemos profundizar en cada ámbito. Es decir, pasar de las palabras a los hechos».

«CCOO y UGT no negocian con la patronal, hacen lo que les dicen los empresarios»
J. BASTERRA

BILBO

Los responsables de Negociación Colectiva de ELA y LAB son conscientes de que otro elemento de discordia en 2004 será la propia división sindical, que hace que CCOO y UGT «se plieguen a los intereses de la patronal».

Hace unos días, el secretario general de CCOO, José María Fidalgo, afirmó que «aceptarán más flexibilidad si hay más inversión productiva». La cuestión que plantean Andreu y Rezabal es hasta dónde quieren llevar la flexibilidad laboral.

Andreu dejó claro que la referencia sindical en Hego Euskal Herria será la alianza que entre ELA, LAB y ESK «porque la otra alternativa a nuestra forma de entender la negociación colectiva la está liderando la patronal en connivencia con CCOO y UGT, que consiste en dejar todo tal cual está y firmar acuerdos en minoría». «No negocian con la patronal, sino que ésta es la que les dice lo que tienen que firmar».

Rezabal indicó «que UGT y CCOO trabajan para la patronal y son los elementos imprescindibles para cortocircuitar la acción de ELA y LAB, como son los acuerdos de eficacia limitada, que supone una fórmula de coacción y chantaje a los trabajadores, que se ven privados de los incrementos salariales y no pasan por la humillante firma individual del pacto».