A segundo trámite.
Avanza proyecto que reconoce al pueblo chango como etnia indígena de Chile.
Se modifica la ley N° 19.253, que establece normas sobre protección, fomento y desarrollo de los indígenas, y crea la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena.
26 de octubre de 2017
La Cámara de Diputados aprobó el proyecto (boletines 11188 y 11335) que modifica la ley N° 19.253, que establece normas sobre protección, fomento y desarrollo de los indígenas, y crea la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena, para reconocer al pueblo chango como etnia indígena de Chile.
Las mociones que dieron origen a este proyecto mencionan que los changos están integrados a grandes ciudades, caletas, algunos viven en los puertos y muchos permanecen fieles a sus balnearios, como Tongoy, Guanaqueros y la llamada Playa Changa de Coquimbo. Y en la región de Atacama en localidades como Chañar de Aceituno, el Obispito, Carrizalillo, entre otros.
En suma, han conservado sus patrones culturales ligados a la pesca y al manejo de los recursos hidrobiológicos. Existen estudios que demuestran que los changos presentarían rasgos culturales de los pueblos de tradición chinchorro, lo que sugiere una ocupación continua de la costa por cerca de ocho mil años y una posible vinculación genética entre todas estas etnias.
La costa de lo que actualmente son las regiones de Antofagasta y Atacama han estado habitadas por comunidades de cazadores recolectores y pescadores desde hace más de doce mil años. A lo largo de estos milenios, las comunidades fueron forjando un modo de vida y un conjunto de instrumentos, prácticas y saberes adaptados a las especificidades del territorio costero del Norte de Chile a lo que sumaron el intercambio de productos, conocimientos y parejas con grupos costeros de más al norte y de más al sur, así como con grupos interiores.
El texto señala que, a pesar de procesos de mestizaje, los modos de vida vinculados al conocimiento y explotación del mar mantuvieron importantes elementos de continuidad durante toda su historia.
Ejemplos de ello son las formas de uso del espacio de orilleros y pescadores que viven parte o todo el año en las denominadas changuerías a lo largo del litoral. De hecho, a lo largo de la vida costera hay asentamientos humanos permanentes, como Paposo, Taltal, caleta Cifuncho y un conjunto de pequeñas ensenadas y puntas aisladas como La Colorada, Bandurrias, Punta Negra y El Blanco, todas de la comuna de Taltal, entre otras, que albergan una población flotante a lo largo del año, constituidos por conjuntos de “rucos” utilizados como emplazamientos estratégicos de producción de los pescadores artesanales.
También, se agrega por la iniciativa, son herencia de sus ancestros la tecnología y los instrumentos usados por los actuales orilleros y pescadores costeros. Por ejemplo, el uso de instrumentos tales como chopes, pesas, anzuelos, chunguillos, redes y ganchos pulperos, tienen una antigüedad en la zona de Taltal de más de 8.000 años y continúan siendo usados hasta la actualidad. También la caza de la albacora en balsas y utilizando arpones, actividad que ya era frecuente hacía unos 7500 años atrás y que se mantuvo a lo largo de toda la prehistoria y hasta nuestros días como una fuente de recursos y de prestigio para los cazadores del mar.
Sin embargo, agrega el proyecto, el avance de la modernidad y las transformaciones en las tradiciones ancestrales ponen en peligro los modos de vida característicos. Afirman los legisladores que ya se ha perdido la lengua originaria y muchos rasgos de la cultura ancestral de los changos.
Por ello, concluyen los autores de la moción resaltando la necesidad de realizar las acciones necesarias para que no se pierda lo que aún queda de esta rica historia cultural y de este conocimiento ancestral sobre las formas de habitar y adaptarse al territorio costero arreico.