La candidatura de Marichuy y la avanzada zapatista
Por: Las Comadres Púrpuras | Jueves, 01/02/2018
Aporrea
https://www.lascomadrespurpura s.com/
Desde el año 2017 el EZLN y el Congreso Nacional Indígena, escogieron una vocera para participar en las elecciones presidenciales como una estrategia para la re-organización de los movimientos sociales autónomos
En el marco de la dinámica social que se desató en México con la insurgencia indígena del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), se empezó a constituir una organización nacional para el encuentro de las comunidades indígenas, rurales y urbanas. En 1996 se conforma el Congreso Nacional Indígena (CNI) como producto del momento efervescente que habían propiciado los zapatistas. Después de años de construcción de una política basada en la autonomía de los pueblos, comunidades y barrios indígenas, entre el año 2016 y 2017, acuerdan elegir un Concejo Indígena de Gobierno (CIG) con y una vocera que los represente en las elecciones presidenciales del 2018. Así fue elegida María de Jesús Patricio Martínez (conocida como Marichuy).
La historia de Marichuy y los principios de la campaña
Marichuy es originaria de una comunidad nahua llamada Tuxpan, ubicada en Jalisco, una provincia del oeste de México. Desde jóven se acercó a la medicina tradicional de su comunidad, llegando a tratar y curar a su madre de una inmovilidad de la cintura hacia abajo. A la par que se desarrolla en la medicina tradicional, a partir de la insurgencia del EZLN en 1994, es invitada a diversos foros y encuentros, siendo elegida como representante por su comunidad. Posteriormente empieza a participar activamente en las diversas campañas e iniciativas que despliega el EZLN, convirtiéndose en una de las más importantes voceras de las mujeres indígenas.
La campaña de Marichuy se ubica entre los principios del anticapitalismo, la liberación de la mujer, y la defensa de las comunidades de los proyectos extractivistas. Sin embargo no se trata de una campaña que ofrece una “mejor gestión”. La candidatura de Marichuy busca representar a todas y todos los trabajadores del campo y la ciudad, a las y los excluidos y oprimidos. La campaña es un apuesta por la organización y la autonomía de los movimientos sociales y políticos que rechazan al sistema actual. En este sentido no es una campaña para llegar al poder, sino para promover los gobiernos propios y las autonomía de los distintos pueblos y comunidades. Para diferenciar su campaña, el CIG ha rechazado el financiamiento del Instituto Nacional Electoral (INE) y se ha propuesto construir una candidatura independiente.
La estrategia que representa la candidatura de Marichuy
La campaña que lleva a cabo Marichuy por todo México, es parte de una nueva avanzada CNI y el EZLN por encontrarse con todas las expresiones de lucha social y política de “los de abajo” e intentar re-organizar la resistencia y rebeldía que se expresaron en la insurgencia del EZLN. Marichuy no se postula como dirigente sino como vocera de este gran esfuerzo organizativo para intervenir en la dinámica política, no como una actora más, sino como su opuesto, como parte de “otra política”. El Concejo Indígena de Gobierno es la forma de gobierno que se expresa en la candidatura de Marichuy. El CIG está compuesto por dos concejales, un hombre y una mujer, elegidos por cada comunidad que participa en el CNI, los cuales actúan como voceros de las asambleas de sus comunidades y regiones. El CIG se rige por siete principios del mandar obedeciendo: “servir y no servirse, construir y no destruir, obedecer y no mandar, proponer y no imponer, convencer y no vencer, bajar y no subir, representar y no suplantar”.
Aunque el CIG se enfrenta a todos los obstáculos de un sistema electoral que dificulta las candidaturas independientes, Marichuy está recorriendo México para recoger el respaldo a la propuesta y las firmas necesarias para que sea aceptada su candidatura.
Encuentra más información crítica, autónoma y feminista en Las Comadres Púrpuras.