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El Movimiento 5 Estrellas en los comicios legislativos italianos
Por Frank González
Prensa Latina, agencia de prensa cubana.
Roma, 24 feb (PL) Con un programa amplio y heterogéneo como sus seguidores, el Movimiento 5 Estrellas (M5E) participará aquí en los comicios de la próxima semana, sin posibilidades de alcanzar la mayoría parlamentaria, a pesar de su caudal electoral.
La abolición de 400 leyes para reducir la burocracia y por lo tanto el aparato del Estado es el primero de 20 puntos en los cuales la organización fundada en 2009 como antítesis de los vicios y malas prácticas de la política tradicional, expone sus objetivos y promesas de campaña.
A continuación aparece el concepto de ‘Nación Inteligente’ en función de crear nuevos empleos y puestos de trabajo, a través de inversiones en tecnología para el desarrollo de la internet de las cosas, la utilización de vehículos eléctricos y la informatización de la administración pública.
Otros aspectos relevantes son la asignación de dos mil millones de euros para apoyar a los desempleados mediante el denominado ‘ingreso de ciudadanía’ y la expansión de la economía verde, para que Italia funcione totalmente con fuentes de energía renovable y aproveche a plenitud las posibilidades del reciclaje.
Reducción de impuestos y costos de la política, revisión del sistema de pensiones, inversión de 50 mil millones de euros en sectores estratégicos, creación de una banca pública para el desarrollo de la pequeña empresa agrícola y familiar, además de medidas para luchar contra la corrupción, forman parte también del documento.
La agrupación creada por el comediante Beppe Grillo y el empresario del sector informático Gianroberto Casaleggio, plantea además, crear 10 mil nuevos empleos para el orden interior y otra cantidad igual para agilizar las solicitudes de asilo y la repatriación de los inmigrantes sin derecho a permanecer en el territorio nacional.
El M5E acude solo a esta cita con las urnas, a diferencia de sus dos principales adversarios, el gobernante Partido Democrático (PD), con su coalición de centro-izquierda, y el ex primer ministro Silvio Berlusconi y su partido Fuerza Italia, con otra de centro-derecha.
A pesar de tensiones internas como las surgidas recientemente cuando algunos de sus parlamentarios incumplieron el acuerdo de donar parte de sus salarios para un fondo de desarrollo de la pequeña empresa, el M5E participa en estas elecciones con el aval de principal fuerza política del país.
Con alrededor del 28 por ciento de la intención de voto, según los resultados de las encuestas publicados hasta 15 días antes de los comicios, el M5E era sólo superado por la coalición de centro-derecha integrada además por la Liga, Hermanos de Italia y Nosotros con Italia, con 37.
A continuación aparecían la alianza de centro-izquierda liderada por el gobernante Partido Democrático (PD), con 27 y Libres e Iguales con seis por ciento.
La ley bajo la cual se realizarán las elecciones se basa en un sistema mixto mediante el cual se disputará el 64 por ciento de los escaños de la Cámara de Diputados y el Senado por el método proporcional, en colegios plurinominales, y el resto, por el mayoritario, en uninominales, sin la posibilidad del voto diferenciado.
La norma favorece a las coaliciones en detrimento de Libres e Iguales y el Movimiento, atacado por Berlusconi, quien lo considera una amenaza el país, entre otras cosas, por su inexperiencia en asuntos de gobierno, y por el ex primer ministro y secretario del PD, Matteo Renzi, quien lo acusa de doble moral.
De acuerdo con los nuevos estatutos de la agrupación aprobados en diciembre último, Grillo pasó a ser garante y entregó el liderazgo político a Luigi Di Maio, parlamentario de 31 años, quien a los 26 fue elegido el vicepresidente de la Cámara de Diputados, el más joven en la historia del país.
Carismático y de verbo fácil, Di Maio, es criticado por sus oponentes porque no concluyó los estudios universitarios, de ingeniería primero y derecho después, además de su escasa experiencia laboral, aspectos sobre los cuales recalca Berlusconi para subrayar su poca preparación para ocupar el cargo de primer ministro.
En él recae la responsabilidad principal de conducir la organización que, aunque se mantiene apegada a principios fundacionales como honestidad y transparencia en el desempeño de la función pública, modera sus posiciones en lo que algunos denominan una mutación genética, para ser reconocida como una fuerza apta para gobernar.
A un lado quedaron propuestas como la salida del euro, para lo cual el referendo consultivo se mantendrá como una ‘alternativa extrema’, o dudas sobre la visión del Movimiento respecto al papel de Italia en la Alianza Atlántica, despejadas durante la visita de Di Maio a Washington en noviembre pasado.
En sus entrevistas con funcionarios del gobierno y congresistas tanto demócratas como republicanos, el candidato a primer ministro reafirmó el compromiso del Movimiento con la estabilidad del país y dejó claro que Estados Unidos es uno de los principales aliados de Italia, aunque Rusia sea un interlocutor histórico.
Un propósito similar tuvo la visita a Londres en enero último para, como señaló en el sitio web www.ilblogdellestelle.it su organizador, Lorenzo Fioramonti, corregir la percepción que los inversionistas, periodistas y socios extranjeros tienen del Movimiento y hacerles entender ‘de una vez y por todas que tenemos un programa sólido e intenciones serias’.
agp/fgg