Cataluña: La CUP ha decidido la abstención, por lo que Torra será electo mañana lunes como presidente catalán

La CUP ha decidido asumir un rol de oposición activa, trabajando, dentro y fuera de las instituciones, para generar un nuevo ciclo del movimiento independentista, que reformule y ensanche las alianzas y complicidades, construyendo unidad popular republicana



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Madrid / Barcelona 13 MAY 2018 - 16:04 CEST
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La CUP ha decidido mantener la abstención en la votación de mañana lunes sobre la investidura de Quim Torra, por lo que permitirá que el candidato de Junts per Catalunya sea elegido presidente de la Generalitat. El consejo político de la formación anticapitalista se había reunido este domingo para decidir el sentido de su voto. La formación había indicado que desconfiaba de que el presidenciable propuesto por Carles Puigdemont diera un giro autonomista y no avanzara hacia la república y “la ruptura con España y el Borbón”. Durante su discurso de investidura de ayer sábado, Quim Torra prometió “trabajar sin descanso” para lograr “la república catalana”, para lo que dijo que será fiel al “mandato del 1 de octubre” y que abrirá un “proceso constituyente”. Entonces no resultó elegido presidente porque necesitaba mayoría absoluta. Mañana lunes, en segunda vuelta, le basta con una mayoría de síes, algo que tendría garantizado con la abstención de los cuatro diputados de la CUP.La formación había indicado que desconfiaba de que el presidenciable propuesto por Carles Puigdemont diera un giro autonomista y no avanzara hacia la república y “la ruptura con España y el Borbón”. Durante su discurso de investidura de ayer sábado, Quim Torra prometió “trabajar sin descanso” para lograr “la república catalana”, para lo que dijo que será fiel al “mandato del 1 de octubre” y que abrirá un “proceso constituyente”. Entonces no resultó elegido presidente porque necesitaba mayoría absoluta. Mañana lunes, en segunda vuelta, le basta con una mayoría de síes, algo que tendría garantizado con la abstención de los cuatro diputados de la CUP.

“La CUP no bloqueará la formación de un nuevo Govern, manteniendo las cuatro abstenciones, pero no garantizará la gobernabilidad, haciendo una oposición activa durante la actual legislatura”, ha explicado la formación anticapitalista en Twitter.

“La CUP ha decidido asumir un rol de oposición activa, trabajando, dentro y fuera de las instituciones, para generar un nuevo ciclo del movimiento independentista, que reformule y ensanche las alianzas y complicidades, construyendo unidad popular republicana”, ha añadido.