Managua: “FSLN roza línea de la traición”

Nota de Clajadep:
Veamos como la izquierda y la derecha de FSLN se pelean por las tácticas y las cuotas de poder…

Víctor Hugo Tinoco: Pacto no tiene futuro

“El FSLN ha rozado la línea de la traición a sus principios. Se ha acostumbrado a que todo es negociación y eso es un grave error. La libertad de los corruptos no es negociable y menos cuando eso se hace sin consultar a las bases del FSLN.
“Este nuevo pacto es personal entre Arnoldo Alemán y Daniel Ortega, que ni consultó a la dirigencia. Y cuando se negocia entre dos, los beneficios no son buenos para todos. Por eso el FSLN debe volver a los orígenes y ser consecuente. Debe escuchar a la gente…por su bien y por el bien del país”.

Al ex vicecanciller y miembro del directorio del FSLN, Víctor Hugo Tinoco, no le cabe la menor duda que el pacto con Alemán dejará un costo político enorme para el FSLN y para Nicaragua. Y más aún, cree que si se empeña en mantener ese arreglo, provocará una crisis interna dentro del partido, “porque desde hace mucho las bases sandinistas tienen un discurso distinto al de la dirigencia tradicional”.

Tinoco es una de las voces que desentona en las reflexiones oficiales del FSLN.

No forma parte pues de la llamada “corte celestial sandinista”. Sus planteamientos tienen eco dentro y fuera del FSLN. Y a propósito de las últimas vueltas que ha dado la política nacional, ofreció esta entrevista en la que deja claro, de entrada, que el FSLN se “embarcó mal” en la segunda parte de la saga pactista con Arnoldo Alemán.

Daniel se “embarcó” mal

¿Por qué cree que Daniel Ortega se “embarcó mal”?

Porque se olvidó que después de Somoza, Alemán es el símbolo más repudiado por el sandinismo y por un sector de la población no sandinista, con la excepción de los fieles a él. Se olvidó que es el corrupto mayor y que, por principios, el FSLN está contra la corrupción. Eso se lo hemos dicho a Daniel pero no ha habido eco. Daniel se ha olvidado de consultar a las bases y eso podría llevar a una crisis dentro del partido.

El problema es que la dirigencia tradicional cree que sólo la negociación y la maniobra política garantiza espacios de poder en el país. Mi opinión es que los pactos son válidos en todas partes, pero la condena a los corruptos es innegociable. No entiendo qué negoció Daniel. Y tampoco cómo pudo hacerlo en contra de los intereses de Nicaragua.

Claro, en esto también tiene culpa el presidente Enrique Bolaños que, movido por los Estados Unidos, sacó su antisandinismo y contra la lógica de las negociaciones que tenía con el FSLN, quiso dar un golpe de mano y desmantelar la influencia real que tiene el FSLN en el poder Judicial.

¿Qué negociaba el FSLN con el gobierno?

Las negociaciones con el gobierno sí fueron debatidas en el partido. Desde enero de 2002 discutimos qué le convenía al partido: si reeditar el pacto de 1998 con Alemán o buscar a Bolaños para aprovechar las diferencias que tenía con Alemán y así debilitar al PLC.

Un grupo quería seguir con Alemán porque veía a Bolaños sin fuerzas. Pero otros buscábamos nuevas salidas. Entonces salieron casos como el de “la guaca”, la cárcel a Byron Jerez, y fue así que logramos que la vieja guardia del partido se abriera y buscara a Bolaños. Por eso se logró la desaforación de Alemán en la Asamblea Nacional. Luego, a inicios de 2003 se negoció con Bolaños, y así nació una nueva correlación de fuerzas con el FSLN y la bancada Azul y Blanco.

Las pláticas con el gobierno buscaban la estabilidad del país y el respaldo del FSLN para lograr la HIPC. Lo malo fue que el gobierno se alió a última hora con el PLC y quiso traicionar al Frente al sacarlo de la Corte Suprema con una reforma al poder Judicial. Esa fue una jugada absurda, porque lo que Bolaños pretendía era sustituir a gente sandinista por arnoldistas o gente de derecha afín al gobierno…que no acepta al FSLN como una realidad.

¿Usted apoya que los partidos manden en la Corte Suprema?

Mi tesis siempre ha sido que se llegue a un consenso para que haya más profesionalismo e imparcialidad en la Corte Suprema, buscando elementos de fuera. Pero no con puñaladas como la que quiso dar el gobierno.

¿Pero… por qué negocian con Alemán?

Por la lógica del FSLN de prolongar la división interna del PLC. Por eso, Daniel, de manera inconsulta pactó con Alemán. Lo malo es que la dirigencia cree que sólo la negociación sirve para avanzar, y por eso ha descuidado sus vínculos con los sectores sociales, su alianza política y su relación con los ONG. Ahora se ve a la dirigencia metida en los pactos, pero a nadie en el trabajo con las organizaciones sociales.

No conviene posponer elecciones

¿Era bueno posponer las elecciones municipales hasta el 2006?

A la dirigencia del partido le dijimos que eso no le conviene a Nicaragua, porque la democracia es demasiado débil. Le dijimos que suspender las elecciones traería inestabilidad al país. Y que al partido no le convenía porque en los departamentos se cree que ganaremos más alcaldías si las elecciones se mantienen separadas de las presidenciales.

Pero fijate que nadie de la dirigencia tradicional explicó la conveniencia de ese pacto y menos la conveniencia de posponer las elecciones. La Asamblea Sandinista, que según los estatutos es la que debe ver eso no se ha reunido para analizar la posposición de las elecciones municipales.

Eso sólo lo ha manejado la dirigencia tradicional. En este caso creo que cada municipio debe debatir si conviene suspender las elecciones. No se puede seguir con la lógica de atropello e ignorar lo que piensa la gente.

¿No cree que el FSLN se ha enterrado con este pacto?

Pienso que Daniel debe tener conciencia de que ha arriesgado mucho al hacer cosas contra el pueblo y las bases del partido. Ha creado una crisis nacional y es hora de recomponer las cosas. Pero también creo que el gobierno debe olvidarse de continuar con la aprobación de la Ley de Carrera Judicial sólo para afectar al Frente. Si esa ley el gobierno la usa como espada de Damocles, sólo logrará desestabilizar al país.

Aquí también creo que Bolaños y Alemán deben olvidarse de pasar factura a la brava al FSLN. Si no les gusta el FSLN es cosa de ellos; que no les gusta la influencia que tiene, entonces que negocie. El FSLN tiene algún nivel de discusión para buscar imparcialidad… pero no con golpes de manos.

Pacto no tiene futuro

Pero, ¿se ha enterrado el FSLN?

A la gente de las bases no le ha gustado que se haya negociado la libertad de los corruptos. La gente tampoco ve ventajas en eso de posponer las elecciones municipales, pero, más que eso, resiente que no le consulten. Eso del pacto ni la dirigencia lo sabía. Eso del pacto creo que sólo lo sabían tres personas.

¿Cree que es momento de que los movimientos de izquierda se apropien del papel y no se queden a nivel de condenas?

Creo que aquí los sandinistas que creemos que no todo es negociable debemos trabajar para que el sandinismo se apropie de ese planteamiento; que haga sentir a sus dirigentes que no hicieron lo correcto. Y los sandinistas que están fuera del partido y los no sandinistas, deben empujar el derecho a que se les consulte las transformaciones del país. El paso ahora no es un cambio de dirigencia sino el de la presión para que se tomen las decisiones correctas.

Se debe presionar porque al país no le conviene la dinámica actual con pactos entre el FSLN y el PLC. Ese pacto no tiene futuro a largo plazo. Ahora quizás al FSLN le permita mantener sus espacios, pero, al final, creo que el PLC no soportará la presión de Estados Unidos y volverá al redil de Bolaños.

¿Es demasiado fuerte la presión de Estados Unidos?

El injerencismo es histórico. Estados Unidos está acostumbrado a decir quién es bueno y quién es malo. Y la visita de Colin Powell fue la que desató la crisis. Es ahí donde sectores del FSLN creemos que es correcto maniobrar, pero siempre que se cuiden los principios. No todo puede ser negociable. Y menos sin consultar a la gente.

Dirigentes se han obnubilado

¿Se ha cegado la dirigencia del FSLN?

Algunos dirigentes se han obnubilado mucho con el tema de las negociaciones como instrumento para defender los sectores populares y sus espacios. A la dirigencia le dijimos que el costo político de un pacto con Alemán sería altísimo, pero ellos se apegaron a la idea de que a los nicaragüenses se les olvidan rápido las cosas.

A Tomás y a Daniel le he dicho que contra Somoza no sólo conspiró la parte económica, sino su carácter dictatorial y la corrupción. Insistí en que hay que cuidar ese tema y que se debe hilar fino para no dañar más al FSLN y al país.

Por eso espero que este pacto no pase de ser un capítulo más. Ahora el pacto ha amenazado hasta la ayuda internacional…

Pero es que aunque no estuviera en juego la ayuda, ese esquema Daniel-Arnoldo, como lo plantearon, yendo contra todo el mundo y contra toda regla, no lleva a nada. Se equivocaron.

Para mí que se debe abrir un proceso de consultas con el pueblo; con temas fundamentales como el Plan Nacional de Desarrollo que ahí está, sin variantes. El FSLN debe abanderar los cambios; es lo que más le conviene.

No se debe cerrar la discusión de los temas sociales. Se debe respetar los espacios en las minorías. Así como el FSLN reclama que se le respeten espacios en el Parlamento, así debe respetar los espacios de la dirigencia y las bases.

Se debe ser consecuente en lo nacional y lo partidario. Me preocupa que se ignore a todo el mundo.

Sin embargo, al final, siempre se impone la voz de los caudillos.

Yo estoy convencido del peso de Alemán y Daniel. Pero las hegemonías no son permanentes.