PIRUETA DE JXCAT Y ERC
Torra se abona al procesismo y vota el mismo día a favor de la independencia y del diálogo
La moción del diálogo, de la diputada socialista Eva Granados, contaba con el apoyo de ERC y JxCAT, los mismo partidos que luego votaron también a favor de la ruptura con España
Confidencial
06/07/2018 05:00
El presidente catalán, Quim Torra, rizó el rizo de nuevo. Su grupo y ERC votaron a la vez crear un espacio de diálogo entre el ‘president’ de la Generalitat y los grupos parlamentarios para apoyar “una nueva etapa de diálogo con el Gobierno de España”, según la moción presentada por JxCAT, ERC, PSC y los comunes. Pero al mismo tiempo ERC y JxCAT también votaron una moción de la CUP que mostraba de manera literal: “La firme voluntad de llevar a cabo las actuaciones necesarias previstas y aprobadas por este Parlament para alcanzar y culminar democráticamente la independencia de Cataluña”.
La moción del diálogo, presentada por la diputada socialista Eva Granados, contaba con el apoyo de ERC y JxCAT, los mismo partidos que luego votaron a favor de la ruptura. Pero tuvo que ser la CUP, de nuevo, la que dijera las verdades del barquero. “No se puede obedecer y desobedecer a la vez”, sentenció la diputada de la CUP Natàlia Sànchez. Se lo explicaba a un presidente de la Generalitat que el día anterior había estado manifestándose frente a la misma cárcel que gestiona su Administración. Procesismo ayer, frente a la prisión; procesismo hoy, en la cámara catalana. Lo importante no es avanzar. Los soberanistas ya saben que no van a ninguna parte, la clave es decir a sus votantes que se están moviendo.
‘’Queremos saber si Sánchez tiene respuestas a cómo culminar nuestra independencia'’
La moción presentada por la CUP ha recibido la amonestación de los letrados del Parlament, que han recomendado que no se tramite. Pero atrapados en el simbolismo, los partidos soberanistas votaron a favor, como una especie de ducha preventiva cara a la reunión de Torra con Pedro Sánchez en Moncloa el próximo lunes.
Para Elisenda Alamany (Catalunya en Comú), “esta moción nos lleva a la derrota, a pesar de estar envuelta en mucha épica”, y pidió a los soberanistas que dieran pasos “para avanzar y no para tropezar de nuevo”.
En opinión de Sergi Sebrià, de ERC, en cambio, era necesario “dar apoyo a esta moción porque han pasado muchas cosas y estamos más cerca”, y ha calificado la moción de “gesto simbólico”. Por su parte, Josep Costa, de JxCAT, ha asegurado que “estamos en un proceso de independencia”. Costa dijo que este proceso se inició en septiembre de 2015 y que continuó el 21-D. ‘Procés’, ‘procés’, ‘procés’…
Cs, a la contra
Para los socialistas catalanes, la aprobación de la moción a favor de la ruptura se trata de un gesto feo. Pero poco más. Carlos Carrizosa, de Cs, recordó la advertencia de los letrados: “Esta moción es ilegal e inconstitucional”. Añadiendo: “Y una vez más los miembros de esta Mesa incurren en responsabilidades personales del todo innecesarias”.
El portavoz de Ciudadanos en el Parlament, Carlos Carrizosa. (EFE)
El portavoz de Ciudadanos en el Parlament, Carlos Carrizosa. (EFE)
Portavoces de JxCAT han relativizado la moción de la CUP y la han calificado de una mera “declaración de objetivos políticos a largo plazo”. En cambio, para Carrizosa, “este ‘procés’ ha supuesto muchas cosas, actos de tensión, la marcha de más de 4.000 empresas, la división de la sociedad”. “Ustedes no tienen derecho a preocupar a todos los catalanes, a empobrecernos y a dividirnos”.
Para el diputado del PSC Ferran Pedret, “esta moción supone un error político y parte de una falsedad: que ustedes tengan un mandato democrático a favor de la independencia. Fuera de esta cámara no hay una mayoría social a favor de la independencia”.
“Fuera de esta cámara no hay una mayoría social a favo de la independencia”, les tuvo que recordar a los soberanistas el diputado del PSC Ferran Pedret
“Esta moción es la carta de presentación del señor Torra ante Pedro Sánchez para la reunión del lunes”, ha valorado Xavier García Albiol.
Dos caras
Pero si el revés a Sánchez con la moción era claro, la mano tendida al Gobierno de Madrid quedaba patente en la otra moción, la de favorecer el diálogo con el Gobierno español. Una jugada con la que Miquel Iceta busca reforzar el Parlament ante la ofensiva de Carles Puigdemont desde fuera de España.
Eva Granados ha pedido a los soberanistas que “han de abandonar el postureo de la desobediencia. Esto cada vez es menos creíble. En nuestro grupo encontrarán nuestra mano tendida para el diálogo, pero también de firmeza en la defensa de la ley”.