Ni estado paralelo de Guaid? ni gobierno autoritario de Maduro / Di?logo y Refer?ndum para cambiar y evitar la guerra

La “autoproclamaci?n” inconstitucional del presidente de la Asamblea Nacional (AN), Diputado Juan Guaid?, como supuesto Presidente (e) de la Rep?blica, contando con el apoyo pol?tico y militar del gobierno de EEUU, el respaldo del Grupo de Lima y varios pa?ses de la Uni?n Europea, el tren de la intervenci?n militar dirigida desde Washington, se encarril? hacia la que hemos llamado, la “ruta de guerra”.
En el otro extremo de la l?nea, el tren de Nicol?s Maduro se mantiene aferrado al poder con un rechazo del 80% de los venezolanos, contando con el respaldo de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y gobernando al margen de la Constituci?n, atrapado en el laberinto de sus propias contradicciones, sin darle respuestas efectivas a la crisis econ?mica y social que ha provocado la pauperizaci?n de la sociedad venezolana y la quiebra de la institucionalidad democr?tica.



Ni Estado Paralelo de Guaid? Ni Gobierno Autoritario de Maduro / Di?logo y Refer?ndum para Cambiar y Evitar la Guerra
Por: Gustavo M?rquez Mar?n | Martes, 12/02/2019 10:51 PM | Versi?n para imprimir
“Dichoso el ciudadano que bajo el escudo de las armas de su mando ha convocado la soberan?a popular para que ejerza su voluntad”.

Sim?n Bol?var. Angostura, 15 de febrero de 1819

Desde la Plataforma Ciudadana en Defensa de la Constituci?n (PCDC) hemos venido advirtiendo sobre el giro que ha tomado la crisis pol?tico institucional del pa?s, la cual avanza aceleradamente hacia un “choque de trenes” que podr?a desencadenar una guerra civil con participaci?n internacional. En efecto, a partir del 23 de enero, con la “autoproclamaci?n” inconstitucional del presidente de la Asamblea Nacional (AN), Diputado Juan Guaid?, como supuesto Presidente (e) de la Rep?blica, contando con el apoyo pol?tico y militar del gobierno de EEUU, el respaldo del Grupo de Lima y varios pa?ses de la Uni?n Europea, el tren de la intervenci?n militar dirigida desde Washington, se encarril? hacia la que hemos llamado, la “ruta de guerra” por la v?a del uno, dos, tres: 1) Cese a la Usurpaci?n; 2) Gobierno de Transici?n; 3) Elecciones”. La “primera estaci?n” supone la renuncia o salida por la fuerza del Presidente en ejercicio por la acci?n directa del gobierno de los EEUU y sus aliados. En el otro extremo de la l?nea, el tren de Nicol?s Maduro se mantiene aferrado al poder con un rechazo del 80% de los venezolanos, contando con el respaldo de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y gobernando al margen de la Constituci?n, atrapado en el laberinto de sus propias contradicciones, sin darle respuestas efectivas a la crisis econ?mica y social que ha provocado la pauperizaci?n de la sociedad venezolana y la quiebra de la institucionalidad democr?tica.

Los posibles desenlaces de esta confrontaci?n llevada al l?mite son: la capitulaci?n negociada del Presidente Maduro por la presi?n econ?mica y militar de EEUU y sus aliados, o el inicio de una guerra civil con participaci?n internacional siguiendo el patr?n de Libia o Siria. En el primer caso, los ganadores exigir?an su bot?n e impondr?an sus condiciones enfocadas fundamentalmente en el aprovechamiento de las reservas petroleras y mineras, adem?s de la instalaci?n de un gobierno “transici?n” t?tere que garantice la protecci?n de sus intereses geopol?ticos y econ?micos. Si ocurre el segundo desenlace, entrar?amos en la vor?gine de una guerra civil con participaci?n internacional por tiempo indeterminado que cobrar?a miles de vidas humanas, la destrucci?n de la infraestructura nacional y muy posiblemente la mutilaci?n y p?rdida de la integridad territorial del pa?s, con graves consecuencias para las generaciones presente y futuras. En ambos casos, el conflicto terminar?a en una negociaci?n con el gobierno de EEUU de espaldas al pa?s y en la humillaci?n hist?rica del pueblo venezolano, que ser?a la v?ctima y quien tendr?a que pagar las consecuencias y cargar con los costos y la p?rdida de soberan?a de la Naci?n.

Ante este terrible escenario, en el que est? en juego la existencia misma de la Patria, hemos venido planteando como salida a la crisis pol?tica la “ruta al alternativa de la paz y el cambio”, la cual tiene como primera estaci?n la apertura de un di?logo entre la AN y el Gobierno con el acompa?amiento de la ONU, para acordar por consenso la reestructuraci?n del CNE. La segunda estaci?n, es la convocatoria de un refer?ndum consultivo, aplicando los art?culos 70 y 71 de la Constituci?n, para que sea el pueblo qui?n decida si quiere o no renovar los poderes p?blicos. De esa manera, el protagonismo y la decisi?n para zanjar el conflicto politico institucional quedar?a en manos del soberano, sacando del primer plano a Trump y su pandilla. En ese di?logo y negociaci?n, los interlocutores deben dialogar con los movimientos sociales y pol?ticos, para construir un programa de emergencia y recuperaci?n nacional consensuado, que atienda con urgencia la grave y devastadora crisis social y econ?mica que agobia a los venezolanos.

Adem?s de hacer p?blica la propuesta, decidimos present?rsela a la AN y al Presidente Maduro, mediante un di?logo franco, dejando claro nuestra posici?n de rechazo a la conformaci?n de un gobierno paralelo al margen de la Constituci?n, impulsado por EEUU y sus aliados. La Directiva de la AN nos invit? a dialogar sobre la situaci?n del pa?s y sus posibles salidas. El pasado 5 de febrero acudimos a la sede del Parlamento Nacional a una reuni?n con el Diputado Guaid?, en su car?cter de Presidente de la AN, dej?ndole bien claro que no lo reconocemos como Presidente interino, sino solo como cabeza del Poder Legislativo. Le dijimos que no est?bamos all? como mediadores sino como proponentes de la “ruta de la paz y el cambio” como alternativa a la propuesta de EEUU y el Grupo de Lima asumida por ?l, que hemos denominado la “ruta de la guerra”. Le informamos que esper?bamos reunirnos con el Presidente Maduro para llevarle esta misma propuesta.

El Diputado Guaid?, descart? de plano el di?logo con el Presidente Maduro e insisti? en la secuencia de la ruta trazada por Trump y el Grupo de Lima, cuyo primer paso es el “cese a la usurpaci?n” con la salida inmediata de Maduro. Ante el emplazamiento que le hicimos respecto de s? estaba de acuerdo con una intervenci?n extranjera, respondi? de una manera ambigua que “no la deseaba”. Sin embargo, con el correr de los d?as ha dejado claro que no descarta, en uso de sus autoasumidas “competencias” y en “defensa de la soberan?a”, autorizar “si fuese necesario” una intervenci?n de EEUU en Venezuela[1] y llam? a constituir un voluntariado para que opere el “corredor humanitario” por el cual se forzar? la entrada al pa?s de la llamada “ayuda humanitaria” de la USAID, que como se sabe, es el dispositivo utilizado en caso de conflictos armados y el instrumento pol?tico del imperialismo estadounidense para intervenir pa?ses como parte de su juego geopol?tico. A esto se suma la aprobaci?n por la AN de la “ley del estatuto que rige la transici?n” que regula la “ruta de la guerra” en sus tres etapas. Este “estatuto” establece que la AN designar? un “gobierno de transici?n” plenipotenciario, que gobernar? el pa?s hasta que haya elecciones en un plazo indeterminado. Mediante esa ley se suspende la Constituci?n y mientras dure la “transici?n”, dicho gobierno designado por la c?pula partidista que domina la AN, sin ser electo por el pueblo, actuar? por un tiempo indefinido al margen de la constituci?n, el cual ?Se trata de un golpe a la Constituci?n? ?De un golpe de estado? ?La soberan?a de qu? pa?s se defiende llamando a una intervenci?n extranjera? ?De la Patria o de la del invasor que pretende convertirnos en un protectorado? Por su parte, el Presidente Maduro ha respondido con la posible convocatoria de unas elecciones anticipadas por la inconstitucional ANC, una reacci?n que en la cual en la actual coyuntura profundizar?a la polarizaci?n.

Ante este escenario, en el que las opciones se ubican en dos extremos que se confrontan por el poder en el marco de la disputa geopol?tica de las grandes potencias, ambos violentando la Constituci?n y avanzando peligrosamente hacia una guerra fratricida, el camino para garantizar la paz y evitar la p?rdida de la soberan?a de la Naci?n, siguiendo el pensamiento de El Libertador, es consultar la voluntad del soberano mediante un refer?ndum consultivo, previa reestructuraci?n del CNE por consenso, para que el pueblo decida si quiero o no relegitimar los poderes p?blicos, para que ejerza plenamente su soberan?a en un momento de extraordinaria trascendencia para el pa?s. Esa es nuestra apuesta por la paz y el rescate de la soberan?a popular, para lograr una salida constitucional, democr?tica, pac?fica y soberana a la crisis pol?tica.

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[1] www.eluniversal.com