La primera naci?n aut?noma en la Amazonia, los wamp?s

Una de las primera publicaciones que recogen aspectos del autogobierno amaz?nico. Los wamp?s bajo el estado peruano son los mismos shuar que habitan en la Amazonia ecuatoriana, y que tambi?n tiene su autogobierno. Los shuar o wamp?s son los famosos guerreros j?baros de la selva reducidores de cabezas, lo que hoy ya no se hace. Los medios no informan sobre ellos ya que sus formas de autogobierno y autodefensa no son del agrado de quienes promueven el extractivismo , las instituciones, los estados y los partidos pol?ticos que pugnan por controlar ese instrumento colonial.
La experiencia de los wamp?s, como de los nasa colonizados por el estado de Colombia y la Alianza Territorial Mapuche cuyo pueblo es sometido por el estado chileno, son junto a los zapatistas y los kurdos, las cinco experiencias m?s avanzadas de los cambios civilizatorios que exige la ?poca del fin de los partidos pol?ticos y de los estados para su progresiva substituci?n por redes y confederaciones de autogobiernos.



La primera naci?n aut?noma en la Amazonia, los wamp?s encaran el cambio clim?tico
Con territorio y gobierno independientes en Per?, los wamp?s tambi?n enfrentan madereros y garimpeiros ilegales, adem?s del ?xodo de j?venes hacia las grandes ciudades.

Mi?rcoles, 27 Febrero
Por Marcio pimienta
National Geographic
(Extra?do de la versi?n brasile?a de la revista)

Cuando, en 1541, el explorador espa?ol Francisco de Orellana parti? en busca de especias, especialmente seducidos por el sue?o de El Dorado , que no pod?a saber que su viaje le llevar?a a las curvas del mundo ’s r?o m?s grande. Entre los diversos peligros enfrentados por la expedici?n, el grupo habr?a perdido un enfrentamiento hacia las indias icamiabas, que dominaban el r?o. Al conocer el hecho, el rey espa?ol Carlos V nombra, en honor a estas mujeres guerreras, el r?o Amazonas . Desde entonces, numerosos exploradores, aventureros y grandes industrias navegan en sus aguas, bosques, historias y, por supuesto, en la b?squeda del oro.

Los wamp?s saben bastante sobre esos visitantes. Esta etnia ind?gena que vive, hace miles de a?os, dispersada en el denso bosque, por un territorio de 1,3 millones de hect?reas en los departamentos de Amazonas y Loreto, norte de Per?, se cans? de asistir a invasores deforestando sus bosques y contaminando los r?os con el r?o mercurio usado para extraer el oro de la tierra.

En contraste con el monocultivo y la extracci?n desregulada de los recursos naturales, Wrays P?rez quiere dejar un legado ambiental para las generaciones futuras.
M?s recientemente, cuando la industria petrolera tambi?n decidi? extraer del territorio ind?gena el oro negro, el conflicto se intensific? y alcanz? su punto culminante en 2009, cuando los lotes de petr?leo ya cubr?an casi el 70% de la Amazon?a peruana, durante el gobierno del presidente Alan, Garc?a, que public? dos decretos para que el poder ejecutivo tuviera total poder en la gesti?n de los recursos naturales. Los decretos, en realidad, ten?an el objetivo de facilitar la implementaci?n del Tratado de Libre Comercio entre Per? y Estados Unidos, pero eso atropell? los derechos internacionales, como el Convenio 169 de la Organizaci?n Internacional del Trabajo (OIT), que exige la consulta y participaci?n de los pueblos ind?genas en el uso, gesti?n (incluyendo control de acceso) y conservaci?n de sus territorios. Diversas etnias de seis regiones diferentes de la Amazonia, con el apoyo de la poblaci?n, formaron un grupo de m?s de cinco mil personas y bloquearon, por 55 d?as, una carretera que conecta el departamento del Amazonas con los de Loreto, Cajamarca y San Mart?n, en un punto conocido como ‘curva del diablo’ en Bagua. El gobierno reaccion? y el conflicto, que se conocer?a como “El Baguazo”, dej? 33 muertos (10 ind?genas y 23 polic?as), saqueos y destrucci?n de bienes p?blicos por toda la regi?n. Recientemente, en Puerto Galilea, el gobierno levant? un monumento para recordar la masacre, homenajeando a ind?genas y moradores. dej? 33 muertos (10 ind?genas y 23 polic?as), saqueos y destrucci?n de bienes p?blicos por toda la regi?n. Recientemente, en Puerto Galilea, el gobierno levant? un monumento para recordar la masacre, homenajeando a ind?genas y moradores. dej? 33 muertos (10 ind?genas y 23 polic?as), saqueos y destrucci?n de bienes p?blicos por toda la regi?n. Recientemente, en Puerto Galilea, el gobierno levant? un monumento para recordar la masacre, homenajeando a ind?genas y moradores.

Los wamp?s percibieron que s?lo con una estructura organizacional, legal y fortalecida tendr?an voz para defender no s?lo a su pueblo, sino al futuro del bosque. Despu?s de numerosas reuniones entre sus l?deres, finalmente, en 2015, representantes de 27 comunidades wamp?s, con una poblaci?n total de 15 mil personas, se unieron, invocaron el reconocimiento internacional de los derechos de los pueblos ind?genas y crearon la Naci?n Wamp?s - un gobierno territorial aut?nomo - para defender su territorio y su sustento de la creciente presi?n de las industrias extractivas.

El nombre por el cual son reconocidos viene de un pez conocido por la velocidad y habilidad de escapar f?cilmente del enemigo. Y ahora se convirtieron en una sola voz. A partir de eso, toda actividad econ?mica en territorio wamp?s necesita su consentimiento. “Seguimos siendo peruanos y as? queremos permanecer. “No queremos independencia, sino hacer la gesti?n de nuestro territorio, y contamos con la asociaci?n del gobierno del Per?”, explica Sh?mpion Noningo, director t?cnico del Gobierno Territorial de la Naci?n Wampis (GTANW).

Llegar hasta los Wamp?s no es tan f?cil - cuando la carretera acaba, s?lo es posible llegar navegando. Todav?a es temprano y la luz del sol aparece t?mida en el horizonte. Elmer Tuesta, conductor y propietario de uno de los barcos que hace el transporte desde Santa Mar?a de Nieva hasta Puerto Galilea, ciudad que marca el inicio del territorio wamp?s, no puede partir mientras no haya un n?mero m?nimo de pasajeros interesados ​​en subir el r?o Mara??n, uno de los principales afluentes del Amazonas y de all? encontrar el r?o Santiago. Tuesta aborda a todas las personas que circulan por el muelle en el intento de convencerlos a viajar. En el Amazonas, la regla que triunfa es aquella cl?sica que dice que se hace lo que hay que hacer. No tarda mucho y los esfuerzos de Tuesta son pronto recompensados, con el barco lleno de pasajeros. a continuaci?n, ?l avanza perezoso bajo la niebla que encubre los ?rboles de la inmensa selva tropical, como un hermoso vestido blanco. El viaje dura 3 horas y en las m?rgenes son avistados, aqu? y all?, peque?os barcos anclados con equipamientos para la extracci?n del oro. No se nota ninguna actividad. En la estaci?n de lluvias, los mineros que a?n se arriesgan van a buscar oro en otros territorios hasta que la estaci?n seca comience y luego facilite el camino hasta el momentoEl Dorado .

Entre los pasajeros hay muchos j?venes wamp?s que residen en ciudades grandes vistiendo camisas de f?tbol como la del ?dolo de la selecci?n peruana, Paolo Guerrero o de clubes espa?oles, como el Barcelona. “Son los wamp?s urbanos”, dice Sh?mpion, sin ocultar su decepci?n por el hecho de que los j?venes dejen de lado las tradiciones milenarias. “Esa es la parte m?s dif?cil del proceso de autonom?a”, sigue lamentando, “la seducci?n de la acumulaci?n de bienes”, dice. Para intentar atenuar este problema, los wamp?s refuerzan la necesidad de la ense?anza de las tradiciones en las escuelas, y los j?venes se han animado constantemente a las reuniones de los grupos de trabajo del gobierno territorial ya trabajar en la agricultura. Es el caso de John Milton, que, despu?s de vivir en la ciudad, se apasion? y se cas? con un wamp?s y decidi? quedarse. ?l todav?a intenta encontrar su espacio y alterna sus actividades entre la agricultura y la caza, pero confiesa sentir falta de la vida urbana. Diferente es el caso de Henery Cuja, que tambi?n decidi? volver despu?s de concluir el curso de t?cnico en enfermer?a y ahora es el responsable de atenci?n b?sica en la comunidad Ayambis. Se preocupa de c?mo el calor aumenta cada a?o y, con ?l, la proliferaci?n de mosquistesAnopheles darlingi (transmisor de la malaria) y Aedes aegypti (transmissos fiebre amarilla, el dengue, el chikungunya y Zika).

Aunque son elogiosas las campa?as del gobierno peruano para concientizar a la poblaci?n del Amazonas para que adopten acciones simples que ayuden a inhibir la proliferaci?n de los mosquitos, en la selva la historia es otra. Con el corte de madera ilegal, el Sol calienta las lagunas y los charcos transform?ndolos en creatorios de mosquitos. Lo que eleva los n?meros del a?o pasado y, de acuerdo a ?l, s?lo en la comunidad Ayambis, que tiene una poblaci?n de 250 habitantes, 76 estaban infectados por la malaria (hubo 3.749 casos en todo el pa?s, no hay registros de defunci?n), y algunos de ?stos para la Malaria falciparum, la m?s peligrosa por multiplicarse r?pidamente en el torrente sangu?neo. John y Henery son ejemplos que traen consuelo a las preocupaciones de Sh?mpion sobre el futuro de los wamp?s. “Ellos empiezan a entender que, preservando la biodiversidad, ellos pueden ganar m?s dinero que migrando a las grandes ciudades”, dice Sh?mpion.

El futuro de la Naci?n Wamp?s ahora est? escrito en el estatuto que, seg?n Shamo, establece la visi?n de la poblaci?n en todas las ?reas de la vida, incluyendo la espiritualidad y la educaci?n, pero es en la preservaci?n del medio ambiente y sus recursos naturales que es el principal argumento. Ellos consiguieron expulsar, por cuenta propia, a mineros ilegales - no s?lo peruanos, sino tambi?n venidos de Brasil y de Ecuador - de dos grandes ?reas. En otras oportunidades, avisaron a las autoridades, que actuaron para la retirada de los invasores. Sin embargo, todav?a es posible ver los impactos dejados por los garimpos ilegales.

Alejar los deforestadores ha sido un poco m?s dif?cil. A diferencia de lo que ocurre en otras partes del bosque amaz?nico (notadamente en Brasil), no hay carreteras en la regi?n de los wamp?s que faciliten el transporte de madera y permitan inmensos campos de deforestaci?n, y esa condici?n acaba dando una protecci?n natural para el bosque en el territorio wamp?s . Pero la ambici?n de obtener copias de ?rbol capirona ( spruceanum Calycophyllum), tambi?n conocida como palo-mulato, de reconocido valor para uso naval, estructuras pesadas y vigas para la construcci?n de casas, ense?a la actuaci?n puntual de los madereros ilegales. Cuando anochece, ellos cubren el barco en la orilla del r?o, ofrecen dinero para alg?n vigilante corrupto y desembarcan todos los equipos para derribar los ?rboles y hacer los cortes all? mismo, donde se embarcan todo de nuevo y llevan el cargamento por el r?o, ya a la ma?ana siguiente.

Desde que fundaron el gobierno aut?nomo, la relaci?n entre los wamp?s y el gobierno del Per? ha sido de tranquilidad, aunque las autoridades peruanas no se han manifestado formalmente. Esta tranquilidad se deriva, en parte, de la excelente relaci?n de ellos con las Fuerzas Armadas del Per?, que tiene fuerte presencia en el territorio debido a la frontera con Ecuador - l?mite del territorio wamp?s al norte.

En 1995, Per? y Ecuador entraron en un conflicto que se conoci? como Guerra de Cenepa. Despu?s del conflicto, Ecuador dej? muchas minas terrestres y el ej?rcito ha localizado y limpiado muchas ?reas en territorio ind?gena donde se encuentran los explosivos. El teniente coronel Herberts Cavero Medina, jefe de la Secci?n de Informaci?n de la 6? Brigada de Selva, cuenta que algunos j?venes wamp?s sirven en algunos batallones del ejercicio de vigilancia de la frontera y, de forma indirecta, reciben informaciones sobre actividades ilegales de mineros y madereros. El ej?rcito, entonces, informa a las autoridades competentes del pa?s para que alejen a los invasores - si los wamp?s ya no lo han hecho antes.

Para vivir de las riquezas del bosque, adem?s de la caza, cada miembro de la comunidad puede cultivar hasta cinco hect?reas en local libre a su elecci?n en todo el territorio. En una cuenta r?pida, si todos los wamp?s decidieran plantar pl?tano, cacao o mandioca, los principales productos comercializados por ellos, eso representar?a menos del 6% del territorio. Y la agricultura se muestra lucrativa. En el caso del cacao, por ejemplo, cada hect?rea produce en promedio 1,5 toneladas por mes, que se vende a compradores externos por 3,2 soles (equivalente a R $ 3,60) por kilo. Los Wamp?s rechazan monocultivo, tan com?n en los departamentos de Amazonas y Loreto, como en el caso del arroz que se produce en ?reas inundadas, y cuya forma de cultivo es una fuente importante de metano antropog?nico mundial (CH 4), un importante gas de efecto invernadero. “Ellos todav?a discuten c?mo, en un futuro pr?ximo, asumir la extracci?n del oro de sus tierras” de forma manual, sin m?quinas “, explica Sh?mpion,” que es para no agredir el bosque y valorar el oro “. Son planes que todav?a tendr?n que esperar, porque ellos necesitan discutir sobre la propia cultura antes de pensar en el futuro. “Desde la educaci?n, pol?tica, econom?a, cultura, juventud, g?nero, turismo, comercio …”. Y el gobierno actual es s?lo transitorio, pues su papel fue dar inicio a la estructura legal y pol?tica y luego ser? sustituido por el pr?ximo electo, para que ?ste persiga los objetivos trazados y fortalezca la autonom?a de su pueblo.

Las industrias que ven en la Amazonia una oportunidad para extraer petr?leo son las mayores preocupaciones de los wamp?s. El panuk , o presidente, WRAYS P?rez, no cita directamente, pero cuando se trata de la industria del petr?leo deja claro que es el Petroper?, el estado m?s importante - empresa de propiedad en el pa?s, que cuenta con la exploraci?n de petr?leo en la Amazon?a con un tubo conocido como Oleoducto Norperuano que se extiende 1106 kil?metros desde la selva hasta el Oc?ano Pac?fico en el terminal de Bay?var para el suministro de las refiner?as del pa?s. Seg?n la asesor?a de comunicaci?n de la empresa, desde el inicio de las operaciones del oleoducto, hace 41 a?os, ocurrieron 109 p?rdidas, siendo 11 por problemas t?cnicos, 69 por problemas de terceros y 29 por causas geodin?micas atribuidas a la naturaleza.

El presidente P?rez tambi?n est? atento al mundo externo, en especial a Brasil, la mayor econom?a de Am?rica del Sur. “El ascenso de gobiernos de extrema derecha en el continente, como el de Bolsonaro. Ver, ?l coloc? al Ministerio de Medio Ambiente bajo el Ministerio de Agricultura, no formalmente, pero en la pr?ctica. Y tambi?n quiere explorar las reservas ind?genas. Y eso afectar? mucho al Bosque Amaz?nico de Brasil y los derechos de los pueblos que all? viven por miles de a?os y siempre conservaron el bosque “, completa.

En un mundo en que las acciones de preservaci?n de los bosques y combate al cambio clim?tico encuentran resistencia en las viejas ideas de nuevos gobiernos, los wamp?s siembran un territorio libre. “Los espa?oles no nos conquistaron directamente, no fuimos esclavos, fuimos absorbidos cuando se formaron los Estados, por eso necesitamos mucho tiempo para finalmente organizarnos en una sola voz”, dice Sh?mpion. Y ahora, este parece ser el nuevo desaf?o en el camino de los wamp?s.