Venezuela: Alianza por el Refer?ndum Consultivo se reuni? con Comisi?n de la ONU

El pasado 13 de marzo se reunieron con la Comisi?n enviada por la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, una delegaci?n de la Alianza por el Referendum Consultivo (ARC), integrada por Gustavo M?rquez Mar?n, Enrique Ochoa Antich, Edgardo Lander, Santiago Arconada y Estaban Emilio Mosonyi, con el fin de presentar su visi?n sobre la grave crisis sist?mica por la que atraviesa el pa?s y su enorme impacto en la precarizaci?n de la vida y en la violaci?n de los derechos humanos de la gran mayor?a de los venezolanos. Dicha Comisi?n realiza una visita de dos semanas, con el fin de evaluar si existen condiciones para que la Alta Comisionada epte la invitaci?n que le hizo el gobierno nacional, para que nos visite pr?ximamente con el fin de evaluar la situaci?n de los derechos humanos en Venezuela.



Alianza por el Refer?ndum Consultivo se reuni? con Comisi?n de la ONU
Por: Aporrea.org | Mi?rcoles, 20/03/2019 12:43 AM | Versi?n para imprimir

20 de marzo de 2019.-

El pasado 13 de marzo se reunieron con la Comisi?n enviada por la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, una delegaci?n de la Alianza por el Referendum Consultivo (ARC), integrada por Gustavo M?rquez Mar?n, Enrique Ochoa Antich, Edgardo Lander, Santiago Arconada y Estaban Emilio Mosonyi, con el fin de presentar su visi?n sobre la grave crisis sist?mica por la que atraviesa el pa?s y su enorme impacto en la precarizaci?n de la vida y en la violaci?n de los derechos humanos de la gran mayor?a de los venezolanos. Dicha Comisi?n realiza una visita de dos semanas, con el fin de evaluar si existen condiciones para que la Alta Comisionada epte la invitaci?n que le hizo el gobierno nacional, para que nos visite pr?ximamente con el fin de evaluar la situaci?n de los derechos humanos en Venezuela.

La ARC le hizo saber a la comisi?n de la ONU, la importancia que tiene la actuaci?n urgente en Venezuela de la Alta Comisionada como garante de los derechos humanos, no solo para que haga una constataci?n en campo rigurosa de la emergencia social y la violaci?n de derechos fundamentales consagrados en la Constituci?n, sino tambi?n, para que interponga sus buenos, oficios dentro del ?mbito de sus competencia, para evitar que la crisis pol?tico institucional venezolana desemboque en una guerra civil con participaci?n internacional. La estrategia para lograr ese prop?sito es promover el di?logo y la negociaci?n con el acompa?amiento de la ONU, entre la Asamblea Nacional y el Gobierno de Nicol?s Maduro, dejando en manos del pueblo soberano la decisi?n de relegitimar o no los poderes p?blicos nacionales, a trav?s de un refer?ndum consultivo convocado por un Consejo Nacional Electoral de consenso nacional que garantice la confiabilidad del voto. En ese refer?ndum consultivo (art?culo 5,70 y 71 de Constituci?n) el pueblo decidir?a si quiere o no relegitimar los poderes p?blicos en una elecciones a realizarse en un plazo no menos a 6 meses. De esa manera, a partir de ese refer?ndum se iniciar?a el proceso de restablecimiento de la Constituci?n y reinstitucionalizaci?n del pa?s. En el contexto de un di?logo social amplio y como parte de los acuerdos que deben alcanzarse a corto plazo entre la Asamblea Nacional y el Gobierno, con el apoyo decisivo de la Oficina de la Alta Comisionada, Michelle Bachelet y del Secretario General de la ONU, se avanzar?a en la construcci?n y ejecuci?n de un plan para atender la emergencia social compleja de Venezuela, direccionado a la atenci?n de las necesidades m?s apremiantes del pueblo venezolano en materia de salud, alimentaci?n y servicios esenciales, operativizado a trav?s de los organismo especializados del Sistema de Naciones Unidas (UNICEF, ACNUR, FAO, PNUD, OMS, OPS, CICR etc.) y financiado a trav?s de un fondo especial de cooperaci?n y solidaridad con Venezuela. De esa manera, la ayuda humanitaria ofrecida por EEUU y la UE podr?a canalizarse a trav?s de este fondo, evitando as? que siga siendo utilizada como un instrumento intervencionista, violando las normas que regulan este tipo de ayudas en la comunidad internacional.

En relaci?n a la crisis pol?tico institucional, la ARC considera que “En estas circunstancias, en que ambos factores se disputan el poder actuando al margen de la Constituci?n, provocando una grave crisis institucional que amenaza la gobernabilidad del pa?s en el contexto de una aguda crisis econ?mica y social que ha precarizado la vida de la gran mayor?a de los venezolanos, cuando esa confrontaci?n podr?a terminar en una guerra civil con participaci?n internacional, la OHCHR podr?a jugar un papel fundamental dentro de su ?mbito de acci?n para evitar ese desenlace, que de darse, agravar?a la situaci?n de los derechos humanos de los venezolanos e incluso, podr?a hacer nugatoria la ayuda que pudiera adelantar en lo inmediato dicha instituci?n, para atender el drama social venezolano”

Finalmente la ARC, se puso a la orden para apoyar en lo que est? a su alcance para el ?xito de su misi?n, que en definitiva ser?a tambi?n un logro para pueblo venezolano.

EXPOSICI?N DE LA ARC A LA COMISI?N DE LA ONU

UNA SALIDA A LA CRISIS PAC?FICA, CONSTITUCIONAL Y SOBERANA

LA ONU DEBE GESTIONAR LA COOPERACI?N INTERNACIONAL CON VENEZUELA

PARA ATENDER LA EMERGENCIA HUMANITARIA COMPLEJA EXISTENTE

QUE EL PUEBLO DECIDA LA RELEGITIMACI?N DE LOS PODERES P?BLICOS
Solicitarle a la OHCHR su consideraci?n de la propuesta que en nuestra opini?n, garantiza una salida pac?fica, constitucional, electoral y soberana a la crisis pol?tica venezolana, sin la cual tampoco ser? posible superar la emergencia social humanitaria compleja que padece la sociedad venezolana y evitar?a que el desenlace de dicha crisis sea la guerra civil con participaci?n internacional. Le hacemos esa solicitud en nombre del pueblo venezolano, en momentos en que se cierne sobre nuestra Naci?n una grave amenaza por la agudizaci?n de la crisis social y el escalamiento del conflicto pol?tico interno. La crisis pol?tica ha tomado un nuevo giro a partir del establecimiento de un “estado paralelo” encabezado por el autoproclamado presidente de la Asamblea Nacional como “presidente de la rep?blica interino”, Juan Guaid?, con el respaldado de EEUU, del llamado Grupo de Lima y algunos pa?ses de la Uni?n Europea, quienes han pasado a jugar un papel protag?nico, bajo el liderazgo del gobierno del Presidente Donald Trump, para forzar la salida inmediata del Presidente Maduro mediante la aplicaci?n de sanciones econ?micas y financieras extremas, que han agravado la ya precaria situaci?n de nuestro pueblo, y con la amenaza de una intervenci?n militar bajo la fachada de proveer una supuesta “ayuda humanitaria” que ellos mismos est?n ayudan do a profundizar con las ansiones y no califica como tal seg?n la CICR, repitiendo el libreto aplicado en Libia y Siria.

Esta acci?n injerencista de EEUU y sus aliados, asumiendo arbitrariamente la representaci?n de la “Comunidad Internacional”, sin tenerla, reafirma su empe?o en dinamitar las bases del multilateralismo, para imponer la l?gica unilateral del dominio geopol?tico por la fuerza y la guerra, pasando por encima del derecho de los pueblos y los Estado a autodeterminarse, que es la regla de oro de la coexistencia pac?fica de las Naciones. Con la conversi?n de Venezuela en un escenario de la disputa geopol?tica entre las grandes potencias, Am?rica Latina dejar? de ser zona de paz, afectando seriamente la seguridad global. En este contexto, estamos convencidos que la ONU puede jugar un papel de mediaci?n eficaz para evitar que el conflicto venezolano desemboque en la guerra, mediante la promoci?n y el acompa?amiento del di?logo y la negociaci?n entre la Asamblea Nacional y el Gobierno de cara a la sociedad, para construir una salida pac?fica, constitucional y soberana a la crisis.

Desde la Alianza por el Refer?ndum Consultivo (ARC), estamos impulsando un movimiento nacional para la convocatoria de un refer?ndum consultivo con base en los establecido en los art?culos 5, 70 y 71 de la Constituci?n, para que el pueblo venezolano decida si quiere o no renovar los poderes p?blicos, previa reestructuraci?n del Consejo Nacional Electoral con el fin de garantizar la transparencia y confiabilidad del sufragio, con la convocatoria a una elecciones nacionales en un plazo no mayor de seis meses despu?s de efectuado dicho refer?ndum. Este refer?ndum puede ser convocado mediante acuerdo entre la Asamblea Nacional y el Gobierno. Por nuestra parte, adelantaremos un proceso de recolecci?n del 10% de las firma de los electores para formalizar la solicitud. Simult?neamente, estamos promoviendo el di?logo social y pol?tico incluyente, la negociaci?n entre la AN y el gobierno1, para avanzar en la construcci?n de la “ruta de la paz”. Esta pasa por la convocatoria al referido refer?ndum y por el abordaje, sin m?s dilaciones, de un plan de emergencia y recuperaci?n nacional, que atienda la emergencia social humanitaria compleja y la estabilizaci?n de la econom?a.

EL PAPEL DE LA ONU PARA PROMOVER LA PAZ Y UNA SALIDA POL?TICA A LA CRISIS
A la luz de los pronunciamiento del Secretario General de la ONU, de la mayor?a del Consejo de Seguridad, del llamado Grupo de Lima y recientemente de la vocera de la Uni?n Europea, se afianza m?s la tesis, de que son los venezolanos los que deben decidir su situaci?n sin injerencias for?neas ni intervenci?n militar extranjera, utilizando como herramienta el di?logo y la negociaci?n. Sin embargo, el plan del sector opositor que controla la Asamblea Nacional, encabezado por el autoproclamado “Presidente interino” Juan Guaid?, que hemos llamado la “ruta de la guerra”, de entrada desecha el di?logo y la negociaci?n al proclamar la cesant?a del gobierno de Maduro y pretender instalar un gobierno de transici?n regido por un “estatuto ad hoc” al margen de la Constituci?n, para luego convocar en un a?o a elecciones preparadas por dicho gobierno, presumiendo del respaldo econ?mico y militar de EEUU y un grupo de pa?ses que lo han reconocido a los cuales le asignan arbitrariamente, sin tenerla, la representaci?n de “comunidad internacional”. Del otro lado, el gobierno autoritario de Nicol?s Maduro sigue ejerciendo a trav?s de un inconstitucional estado de excepci?n permanente violatorio de los derechos humanos y una ?rrita “asamblea nacional constituyente plenipotenciaria y supraconstitucional”, mostrando permanentemente su incapacidad incapacidad para manejar la crisis y atender la emergencia social humanitaria compleja que padece el pueblo de Venezuela, la cual se agrava d?a a d?a y la cual se est? haciendo m?s aguda e insoportable , con la aplicaci?n indiscriminada por nuevas y mayores sanciones econ?micas por el gobierno de EEUU y sus aliados.

En estas circunstancias, en que ambos factores se disputan el poder actuando al margen de la Constituci?n, provocando una grave crisis institucional que amenaza la gobernabilidad del pa?s en el contexto de una aguda crisis econ?mica y social que ha precarizado la vida de la gran mayor?a de los venezolanos, cuando esa confrontaci?n podr?a terminar en una guerra civil con participaci?n internacional, la OHCHR podr?a jugar un papel fundamental dentro de su ?mbito de acci?n para evitar ese desenlace, que de darse, agravar?a la situaci?n de los derechos humanos de los venezolanos e incluso, podr?a hacer nugatoria la ayuda que pudiera adelantar en lo inmediato dicha instituci?n, para atender el drama social venezolano. Entendemos que el alcance de la acci?n de la OHCHR en su rol de garante de los derechos humanos incluye la prevenci?n de los conflictos armados, la atenci?n de las secuelas durante y despu?s de los mismos, apoy?ndose en los organismo especializados del Sistema de Naciones Unidas como ACNUR, UNICEF Y el CICR a trav?s de los organismos especializados y sus respectivos programas espec?ficos. En ese sentido y con base en esa amplia experiencia acumulada en su participaci?n en situaciones conflictivas a nivel global, consideramos que la OHCHR y la ONU en general, podr?a asumir el rol de promotor de la “ruta de la paz” para evitar la guerra, a trav?s de la promoci?n, acompa?amiento y facilitaci?n del di?logo y la negociaci?n transparente entre la Asamblea Nacional y el Gobierno, para transitar una salida pol?tica a la crisis que permita restablecer la Constituci?n, derogada de facto por ambos e iniciar el proceso de reinstitucionalizaci?n del pa?s y, simult?neamente, gestionar un programa integral de atenci?n de la emergencia social humanitaria compleja que padece nuestro pa?s. Ese proceso de restablecimiento de la Constituci?n y reinstitucionalizaci?n, comenzar?a por la consulta al pueblo, en refer?ndum consultivo, para que decida si quiere o no relegitimar los poderes p?blicos nacionales a trav?s de la convocatoria en un plazo no mayor de seis meses de una elecciones nacionales.

UN PROGRAMA DE EMERGENCIA HUMANITARIA DE SOLIDARIDAD CON VENEZUELA
Por tratarse de una crisis sist?mica, el programa de atenci?n de la emergencia social humanitaria debe considerar este car?cter para que realmente sea eficiente y genere el impacto sustantivo esperado. Eso adem?s tiene sentido y se reafirma en la la visi?n que maneja la Alta Comisionada para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet en su discurso ante la 40va sesi?n del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, en Ginebra el 6 de marzo de 2019, el cual citamos a continuaci?n:

“Ayudar a los Estados a crear y mantener una din?mica positiva, de modo que los derechos civiles y pol?ticos, y los derechos econ?micos, sociales y culturales trabajen en sinergia para lograr el m?ximo efecto positivo, es un papel esencial para las Naciones Unidas en su conjunto. La Oficina participa de manera muy s?lida en esa tarea y aprecia la colaboraci?n genuina de muchos Estados Miembros”.

Espec?ficamente en el caso Venezuela apunta:

“La situaci?n en Venezuela ilustra claramente la forma en que las violaciones de los derechos civiles y pol?ticos, incluida la falta de defensa de las libertades fundamentales y la independencia de las instituciones clave, pueden acentuar una disminuci?n de los derechos econ?micos y sociales. Tambi?n muestra c?mo esas condiciones econ?micas y sociales que se deterioran r?pidamente dan lugar a m?s protestas; incluso mayor represi?n; y nuevas violaciones de los derechos civiles y pol?ticos, una espiral de tendencias aceleradas y fuertemente negativas. Esta situaci?n se ha visto exacerbada por las sanciones, y la actual crisis pol?tica, econ?mica, social institucional resultante s alarmante. La cantidad sin precedentes de venezolanos obligados a abandonar sus hogares y su pa?s tambi?n tiene serias consecuencias en toda la regi?n”

El car?cter sist?mico y la magnitud de la crisis venezolana, y el enfoque integral e interdependiente de los Derechos Humanos, exigen que el programa para atender la emergencia social humanitaria sea concebido y ejecutado con base en esa consideraci?n. En este caso, en el que adem?s el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaid?, con el apoyo del gobierno de EEUU y el Grupo de Lima, pretendi? utilizar el ingreso forzado al pa?s de una supuesta “ayuda humanitaria” como una excusa para provocar el levantamiento de las FANB, se impone la mayor transparencia y coherencia con los principios que rigen la cooperaci?n internacional en materia de derechos humanos y la atenci?n de la emergencia humanitaria. Otro criterio importante a tener en cuenta en el dise?o y operativizaci?n del programa de atenci?n a la emergencia social humanitaria deriva del enfoque basado en los derechos humanos que aplica la OHCHR precisamente a la acci?n humanitaria6, el cual “asegura la participaci?n de la poblaci?n afectada en los esfuerzos de preparaci?n, respuesta y recuperaci?n. Nuestro objetivo es empoderar a las personas que reclamen sus derechos y fortalecer las capacidades y responsabilidades de los responsables de cumplir con sus obligaciones legales en virtud de las leyes internacionales de derechos humanos y humanitarios. Intentamos incluir a los m?s vulnerables y excluidos de la protecci?n y asistencia humanitaria, reducir la discriminaci?n y la politizaci?n de la distribuci?n de la ayuda, y sugerir medidas para prevenir las violaciones y su repetici?n”. Otro aspecto que hay que tener en cuenta es la existencia de un escenario pol?tico altamente polarizado, lo cual exige m?xima transparencia y sustentaci?n sin?rgica entre la ONU, el Estado y las organizaciones sociales, en el dise?o y ejecuci?n del programa de cooperaci?n internacional, para atender las necesidades en materia de salud, alimentaci?n y servicios esenciales. El financiamiento de ese programa debe dar lugar a la constituci?n de un fondo constituido a partir de los aportes de pa?se donantes y seg?n los procesos establecidos por la ONU.