Un a?o de crisis en Nicaragua

Un a?o de crisis en Nicaragua

Bolpress
Publicado el: 17 abril, 2019

El 18 de abril se cumple un a?o del estallido de la crisis pol?tica en Nicaragua, la m?s grave de las ?ltimas cuatro d?cadas. Antes de pasar a algunas claves para comprender lo que ocurre en este pa?s centroamericano, presentamos una entrevista de DW a Madelaine Caracas(20) que cuando las protestas universitarias estallaron en Managua, dej? sus estudios y se sum? a las barricadas. Hoy vive en el exilio. Unas 62.000 personas dejaron Nicaragua este ?ltimo a?o. La mayor?a, unos 55.000, se refugiaron en la vecina Costa Rica, seg?n ACNUR. Pese a dos intentos de di?logo entre el gobierno que dirige el veterano ex guerrillero sandinista Daniel Ortega y la opositora Alianza C?vica, el conflicto no termina de resolverse en un pa?s altamente polarizado y con una econom?a en acelerado deterioro.

?Me encantar?a ser optimista?

?Cu?ndo comenz? la crisis?

Se inici? con una protesta de estudiantes universitarios contra una impopular reforma al Seguro Social, aunque los expertos consideran que esto fue solo el detonante, ante un creciente descontento social hacia el gobierno de Ortega, que ostenta el poder desde 2007 y se ha reelegido dos veces en comicios cuestionados por la oposici?n y por organismos internacionales.

Las manifestaciones comenzaron en abril de 2018 y se extendieron r?pidamente a varias ciudades del pa?s, tras la violenta acci?n de la Polic?a y grupos paramilitares contra civiles desarmados, que dej? gran cantidad de muertos, detenidos, heridos y exiliados.

?Qu? costos ha tenido el conflicto hasta hoy?

Seg?n la Comisi?n Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), 325 personas murieron y m?s de 2.000 resultaron heridas por participar en protestas, en su mayor?a j?venes alcanzados por impactos de bala. El gobierno reconoce 198 fallecidos, mientras ONG de derechos humanos elevan la cifra hasta 545.

Tambi?n de acuerdo con la CIDH, que document? la crisis desde el punto de vista humanitario, cerca de 700 nicarag?enses permanecen en prisi?n y otros 60.000 se vieron forzados al exilio, refugi?ndose mayoritariamente en Costa Rica. La polarizaci?n pol?tica provoca una profunda divisi?n en miles de familias.

Protesta contra el Gobierno nicarag?ense en septiembre de 2018.

?Cu?l ha sido el impacto en la econom?a?

La crisis ha dejado p?rdidas econ?micas por m?s de 1.600 millones de d?lares. El Banco Central de Nicaragua (BCN, emisor) report? a inicios de abril una importante ca?da en inversi?n extranjera directa (63,2 por ciento), turismo (41,1 por ciento) y exportaciones (25,4 por ciento), mientras las reservas internacionales se redujeron en 1.000 millones de d?lares (33 por ciento).

El Fondo Monetario Internacional (FMI), que desde 2014 constat? un crecimiento econ?mico promedio anual del 4,5 por ciento, ha pronosticado una contracci?n del Producto Interno Bruto: -5% este a?o, frente al -3,8 reportado en 2018. Se estima que unas 300.000 personas (10% de la poblaci?n econ?micamente activa), han perdido sus empleos y que el n?mero de afiliados a la seguridad social se redujo en 17, 2 por ciento.

?Por qu? fracas? el primer di?logo?

El primer intento de di?logo entre el gobierno y la oposici?n, con la mediaci?n de la Conferencia Episcopal, se inici? en mayo y termin? en julio, cuando la delegaci?n oficial rechaz? la demanda de la Alianza C?vica de adelantar las elecciones presidenciales previstas para 2021. Sin embargo, el di?logo permiti? que un equipo de la CIDH y otro de la ONU llegaran a Nicaragua para documentar las denuncias de violaciones a los derechos humanos.

Al abandonar la negociaci?n, Ortega acus? a la oposici?n y a los obispos de ?promover un plan golpista?. Simult?neamente, polic?as y paramilitares sofocaron a sangre y fuego las protestas mediante operativos conjuntos y capturas selectivas de l?deres sociales, estudiantes, docentes y campesinos que hab?an instalado ?tranques? en las principales carreteras del pa?s.

El segundo di?logo solo arroj? resultados parciales.

?Qu? ha pasado con el segundo di?logo?

El gobierno y un equipo de la Alianza C?vica ?formado esta vez por m?s empresarios y menos delegados del movimiento social- iniciaron un di?logo el pasado 27 de febrero, para negociar una agenda de cuatro puntos: libertad definitiva de los ?presos pol?ticos? y anulaci?n de todos los juicios; fortalecimiento (restituci?n) de libertades y garant?as individuales; reforma electoral y un plan de justicia y reparaci?n para las v?ctimas de la represi?n estatal.

Las partes dieron por concluida la negociaci?n el 3 de abril, con acuerdos s?lo en los primeros dos temas. El gobierno puso bajo arresto domiciliario a 200 reos desde febrero, pero no ha comenzado a liberar a otro grupo mayor (770 seg?n la Alianza C?vica) conforme un acuerdo con el Comit? Internacional de la Cruz Roja. Tampoco ha restablecido el derecho de la oposici?n a realizar manifestaciones p?blicas, vetado por la Polic?a desde septiembre.

En los otros dos temas (electoral y justicia) no hubo acuerdos debido a la negativa oficial al adelanto de elecciones y al rechazo de la oposici?n a un programa de ?justicia y reconciliaci?n? dirigido por la Polic?a y otras entidades gubernamentales.

?Qu? posici?n ha tomado la comunidad internacional?

Diversos pa?ses han instado al gobierno de Nicaragua a respetar los derechos humanos y retomar el rumbo democr?tico, advirtiendo que de lo contrario se aplicar?an sanciones. Estados Unidos aprob? a fines de 2018 la ley MagnitsKy Nica Act, que prev? sanciones para funcionarios y familiares de Ortega involucrados en corrupci?n y violaci?n de derechos humanos. La misma ley podr?a obligar a la Casa Blanca a vetar pr?stamos de organismos multilaterales solicitados por Managua.

Por su parte, 12 pa?ses miembros de la Organizaci?n de Estados Americanos (OEA) han apoyado una eventual aplicaci?n de la Carta Democr?tica, para forzar al gobierno de Managua a restaurar las libertades. Similar posici?n mantiene el Parlamento Europeo, que ha amenazado con sanciones a personas allegadas al r?gimen, si ?ste no da ?se?ales de buena voluntad? en la mesa de di?logo.

Del otro lado, Daniel Ortega ha recibido apoyo diplom?tico de sus aliados -Venezuela y Cuba-, as? como de Rusia, que expl?citamente anunci? su respaldo al ?gobierno leg?timo? de Nicaragua.

?La tortura sicol?gica es dif?cil de sobrellevar?

.Madelaine Caracas tiene 20 a?os y hace 12 meses que no ve a su mam?. A mediados de abril de 2018 cursaba el ?ltimo a?o de la carrera de Comunicaci?n y pintaba cuadros al ?leo, pero cuando las protestas universitarias estallaron en Managua, dej? su mochila de libros y se sum? a las barricadas donde los j?venes se enfrentaban a pedradas a la Polic?a que disparaba balas de fusiles AK-47.

El 16 de mayo de 2018, su voz fue escuchada por millares de televidentes que segu?an en vivo la primera sesi?n del infructuoso di?logo nacional. Madelaine ley? uno a uno los nombres de sus compa?eros muertos en las universidades, frente al rostro imperturbable del presidente Daniel Ortega y de su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo.

Semanas despu?s debi? huir y exiliarse en Costa Rica, pa?s que ha dado refugio a m?s de 50.000 nicarag?enses en los ?ltimos meses.

En entrevista con DW Madelaine Caracas analiza su vida, su trabajo de denuncia internacional, el drama de sus padres clandestinos y la situaci?n de Nicaragua a un a?o de la rebeli?n que no logr? tumbar del poder al veterano caudillo sandinista, pero cambi? para siempre a este pa?s centroamericano, inmerso todav?a en el peor conflicto de su historia reciente.

-?Cu?nto te ha afectado esta crisis a nivel individual? ?Qu? perdiste y qu? ganaste, si acaso es posible hacer un balance?

Esta pregunta es demasiado dif?cil, porque la crisis nos afecta a todos de muchas formas. En mi caso el exilio, las amenazas y el nivel de exposici?n p?blica es lo que me ha da?ado m?s, como la tortura sicol?gica y las amenazas que he recibido. El hecho de que yo est? exiliada y mis padres no tengan trabajo y est?n escondidos, porque no pueden regresar a nuestra casa, me provoca un estado de stress dif?cil de sobrellevar.

Tambi?n me afecta ver a mis compa?eros presos, el trabajo desgastante de la denuncia internacional, poner el cuerpo y la cara para hacer este trabajo y de repente sentirte culpable de estar viva. Es horrible, pero una se pregunta ?por qu? estoy viva?

Madelaine Caracas: ?Me encantar?a ser optimista?

Saber que estaba en el ?ltimo a?o de una carrera que me cost? esfuerzo porque deb?a mantener una beca y finalmente tuve que dejarla, ha sido muy dif?cil. S? que hay muchas personas que han perdido m?s, hay quienes perdieron su vida y entonces perder una carrera no se compara. Pero finalmente cada quien tiene sus procesos y sus dolores.

Yo creo que gan? muchas experiencias porque jam?s imagin? que a mis 20 a?os me convertir?a en una defensora de derechos humanos, que estar?a aprendiendo tanto, que entrar?a en el Parlamento Europeo o hablar?a en las Naciones Unidas. Tambi?n gan? muchas familias, porque en cada viaje me he quedado con familias de nicarag?enses migrantes y cada una se convirti? en mi familia. Ahora me siento menos sola, tengo muchas mam?s que me cuidan desde lejos y tengo refugio en distintos pa?ses del mundo.

Pienso que en medio de los infortunios y el dolor no hay ganancias, pero s? lecciones: saber que existen herramientas para construir un mejor futuro y que esto no vuelva a repetirse. Nunca pens? que tendr?a que aprender tanto de pol?tica, diplomacia, historia y relaciones internacionales en tan poco tiempo y tan temprano.

La verdad es que nos toc? crecer y madurar muy r?pido. Por eso estas lecciones y este abril quedar?n para siempre en mi vida. Son historias que nunca voy a olvidar: las familias que he ganado, la familia que he perdido y dejado, y los procesos que vienen.

? ?Qu? les pas? a los estudiantes en 2018? ?Hubo un despertar sorpresivo de la conciencia social, o una explosi?n causada por el hartazgo frente a los pol?ticos y al poder?

Antes de abril no exist?a en Nicaragua un movimiento estudiantil independiente, aut?nomo, que respondiera a los verdaderos intereses de los universitarios. En muchos espacios, los j?venes nos cuestion?bamos nuestro rol y nos pregunt?bamos qu? hacer. Nos agobiaba el hecho de crecer en un pa?s donde vas a votar por primera vez y siempre queda el mismo presidente porque se roba los votos; donde ves violencia a diario y la corrupci?n permea cada entidad del Estado; donde no hay justicia para las mujeres abusadas y donde el Ej?rcito mata a los campesinos sin que la Polic?a o el Poder Judicial den respuestas.

Madelaine Caracas: ?Algunos pensaban que los j?venes ?ramos indiferentes?

El cansancio frente a tanta corrupci?n e impunidad fue clave para cuestionar el sistema, pero el nivel de represi?n brutal de la Polic?a contra nuestras primeras marchas fue lo que termin? de rebalsarnos. Cuando el 18 de abril nos atacaron en la Universidad Centroamericana (UCA) violaron el espacio de autonom?a universitaria; ah? vimos a los activistas de la Juventud Sandinista destruyendo las instalaciones de nuestra universidad, apoyados por la Polic?a.

Algunos pensaban que los j?venes ?ramos indiferentes, pero en realidad est?bamos frente a una olla de presi?n que iba a explotar. El incendio en la reserva de Indio Ma?z (sur de Nicaragua) se inici? el 3 de abril con quemas indiscriminadas por parte de colonos protegidos por el gobierno y fue lo que deton? las primeras protestas. Muchos de nosotros hab?amos estado antes en manifestaciones por las pensiones de vejez, el medio ambiente y los derechos de las mujeres. Nos pregunt?bamos qu? hacer frente a un gobierno autoritario y un presidente que estaba por encima de todo y jam?s escuchaba las demandas populares.

-?Qu? futuro avizoras para Nicaragua? ?C?mo es el pa?s que te imaginas?

Me encantar?a ser optimista, pero estoy clara de que el proceso de construcci?n del pa?s que queremos nos va a tomar muchos a?os. Porque el gran reto no es sacar a Ortega, sino construir un Estado con nuevas instituciones, sin corrupci?n ni impunidad y crear una nueva cultura pol?tica basada en la justicia.

Es fundamental la articulaci?n entre sectores, porque los movimientos sociales siempre han sido fiscalizadores del poder y han apoyado las demandas de la gente en la calle, poni?ndose al frente de la defensa de los m?s vulnerables y de sus derechos pisoteados.

Tambi?n tendremos que sentar las bases para la construcci?n de la memoria, para no repetir el pasado, para que dentro de 40 a?os no tengamos otro r?gimen dictatorial. Nicaragua merece paz, democracia y un cambio estructural del autoritarismo, el machismo y la corrupci?n, para construir una naci?n m?s plural, m?s inclusiva y m?s diversa, donde todos podamos tener una voz.