La lucha kurda por la supervivencia en Siria

Creo que la humanidad en su conjunto deber?a reconocer su deuda con los kurdos.



La lucha kurda por la supervivencia en Siria

V?ctor de Currea-Lugo (Especial desde Irak para La Opini?n)
https://www.laopinion.com.co/mundo/la-lucha-kurda-por-la-supervivencia-en-siria-178416
Domingo, 9 Junio 2019 - 4:12am

Creo que la humanidad en su conjunto deber?a reconocer su deuda con los kurdos.

Hay ciudades simb?licas de resistencia, como Stalingrado y Varsovia, donde la guerra toc? a la puerta y la gente le plant? cara a la muerte. Eso es Kobane, ciudad kurda en Siria. ?Recuerdan a Alan, el ni?o muerto en las playas de Turqu?a, con su camiseta roja y su pantal?n azul, cuya foto le dio la vuelta al mundo? Alan Kurdi era de aqu?, donde una escuela de hu?rfanos por la guerra lleva su nombre.

Kobane hace parte del corredor kurdo en el norte de Siria y ha sido v?ctima de la pol?tica de discriminaci?n del gobierno central. Decir Kobane es acto de rebeld?a: es el nombre en kurdo, idioma prohibido. Aqu?, un ni?o no puede pedir a la mam? un vaso de agua en la lengua de sus abuelos.

El viaje a Kobane toma varias horas. Pasamos cerca al campo Ain Issa, donde hay unos 20.000 desplazados, as? como esposas e hijos de miembros del Estado Isl?mico (Daesh o Isis).

As? qued? Kobane, luego de la tomara por el Estado Isl?mico y de la recuperaci?n por fuerzas sirias y kurdas.​

La batalla por Kobane fue violenta. En el lado kurdo han estado las Unidades de Protecci?n Popular (Ypg) y las Unidades Femeninas de Protecci?n (Ypj), milicias que aguantaron en una ciudad amenazada. El ataque a los kurdos por los islamistas en Siria empez? a finales de 2011, pero el enfrentamiento armado se agrav? desde julio de 2013. En septiembre de 2014, las milicias de Daesh entraron para izar su bandera. La ofensiva hab?a empezado tres meses antes, apenas fue anunciado el Estado Isl?mico. El 85% de la ciudad cay? en manos de los islamistas.

A la entrada de Kobane hay un cementerio de m?rtires de guerra: gente kurda y, en menor medida, ?rabe, que viaj? a defender una ciudad por la que muy pocos apostaban. Los kurdos vinieron de Turqu?a, de Ir?n, de Irak y de muchas otras partes del mundo. En una calle est? la estatua en honor de Arin Mirkan, nombre de guerra de una kurda que prefiri? morir antes de ser capturada por Daesh. Sab?a lo que suced?a a las capturadas.

Desde Turqu?a, cientos de kurdos trataron de cruzar la frontera para incorporarse a la defensa de la ciudad, pero tropas turcas parcialmente lo impidieron. El cementerio da fe de ello: las l?pidas tienen nombre de ciudades kurdas de varios pa?ses y un final com?n: Kobane.

Pr?cticamente no qued? ni piedra sobre piedra.

El paso de Daesh por peque?as aldeas kurdas caus? el ?xodo de m?s de 180.000 personas. Los kurdos fueron los grandes sacrificados por la comunidad internacional en la Primera Guerra Mundial al negarles su derecho a un estado propio; despu?s, fueron abandonados en los a?os 90 en su lucha contra Sadam Hussein en Irak y, de nuevo, sacrificados por la misma comunidad internacional que establece categor?as entre v?ctimas y causas para actuar. El miedo durante esos meses de guerra fue que, si ca?a Kobane, los que perder?an no ser?an solo los kurdos. All? se jugaba parte del futuro de Oriente Medio.

Los ?ltimos 150

En Kobane sobr? coraje. Muchos civiles huyeron y otros se incorporan a la resistencia. Las esperanzas de ayuda humanitaria o de un corredor para proteger civiles kurdos se desvanecieron, mientras los bombardeos de la coalici?n contra Daes algo ayudaron, en una batalla entre septiembre de 2014 y febrero de 2015.

Tarde en la noche, me recibe en su casa Amed (nombre de guerra). Con ?l est? Yassir. Son dos de los pocos combatientes que estuvieron durante toda la batalla. Podr?an recordar a alguien diferente en cada casa destruida. ?No luchamos para proteger nuestra ciudad, sino la humanidad?, dice Amed, mientras Yassir abre su computador para mostrarme cientos de fotos y videos de la guerra. Es como si temiera que yo no les fuera a creer tanto hero?smo.

Subrayan que un par de a?os antes, los islamistas del entonces llamado Frente Al-Nusra fueron copando los pueblos alrededor de Kobane. En 2013, ya controlaban la ciudad de Tal-Abyad y se hab?an engullido a las fuerzas del Ej?rcito Libre Sirio, que hab?a girado de una propuesta nacionalista a una islamista. En 2014, Daesh apareci? como tal, teniendo un cord?n de la ciudad, excepto por el norte, que limita directamente con Turqu?a.

Las palabras sobran ante la estremecedora escena.

Duraron los primeros meses de 2014 bajo un bloqueo impuesto por Daesh: no hab?a suficientes alimentos, ni agua, ni medicamentos. Los kurdos tienen fama de hacer buenos pozos, as? que la mayor?a de casas hoy tiene un pozo de agua subterr?nea construido durante ese tiempo. La comida y las medicinas las consegu?an de contrabando, con la ayuda de ?rabes. Pero no pod?an moverse mucho: en los controles militares de Daesh deten?an a los que tuvieran identificaci?n de Kobane y eran tratados como ?infieles?. La comida era costosa porque, como en toda guerra, la especulaci?n se impuso.

Daesh estaba m?s y m?s cerca. Los kurdos decidieron reunir a sus comunidades, como parte de los preparativos para la guerra. ?Les dijimos que esperaran lo peor; que esto no iba a ser f?cil. Nos sent?amos fuertes en el coraz?n, pero limitados en recursos. Ten?amos algunos fusiles y los de Daesh ten?an hasta ametralladoras Doshka?, me dijo Yassir.

Y entre frases cruzadas, los dos me dec?an que ?de nada sirve tener solo armas, si no tienes coraje. Mire lo de Mosul: 20.000 hombres bien armados fueron vencidos por unos pocos de Daesh y la ciudad cay?; pero claro con solo coraje tampoco se ganan las guerras. Pero aqu? aguantamos seis meses?.

Amed sab?a lo que hab?an hecho los extremistas en Sinjar y all? no esperaban algo diferente. Se apoyaron en las organizaciones tribales. Trataron de evacuar ancianos y ni?os. ?No serv?a de nada tener miedo?. En una avanzada, 11 kurdos quedaron atrapados en una escuela. Ellos les comunicaron por radio a sus camaradas que no se rendir?an y as? lo hicieron. El ejemplo de esos muertos fue una dura realidad para todos.

Desde mucho tiempo atr?s hab?an creado milicias kurdas: las Ypg y las Ypj. A estas, se sumaron j?venes voluntarios que ven?an de las otras regiones del Kurdist?n: de Ir?n, Turqu?a e Irak. ?Algunos fueron directo al frente de batalla y murieron sin que siquiera hubi?ramos podido registrar sus nombres?, dice Amed. Tambi?n llegaron unos internacionalistas de Europa. Y se sum? un grupo del Ej?rcito Libre Sirio llamado Los Hijos del Norte. Eran 42 y sobrevivieron 5.

Yassir muestra un video donde ellos se abrazan y se despiden de unidades que van a tratar de romper el cerco. Amed dice que nada parec?a impedir el avance de Daesh. Los 150 combatientes restantes, con pocos recursos, reducidos al 15 por ciento de la ciudad, sab?an, como Arin Mirkan, que era preferible morir que caer prisionero. Entonces tomaron una decisi?n radical: colocarse todos explosivos en el cuerpo.

Se juntaron el ?ltimo aliento de esos 150, donde hab?a muchas mujeres; la llegada de refuerzos del Pkk de Turqu?a y de unos 150 Peshmerga de Irak con armas pesadas, y los bombardeos de la coalici?n contra posiciones de Daesh. Finalmente, el sol volvi? a salir. La ciudad fue recuperada por los kurdos a mediados de marzo de 2015.

Kobane resisti?. Esa peque?a ciudad se hab?a convertido en la prueba de que unidos era posible derrotar a Daesh. Import? mucho la convicci?n kurda de defender su tierra, no por simple voluntad sino porque era una situaci?n de vida o muerte, una guerra de supervivencia.

El cementario de Kobane aloja cad?veres de milicianos de muchas partes del mundo.

Fueron 12.000 los combatientes que intentaron tomar Kobane. Amed me explica que ellos recogieron m?s de 800 cuerpo de islamistas, pero el c?lculo que hay es que Daesh perdi? all? 8.000 militantes.

El apoyo de los bombardeos de la coalici?n internacional fue ?til, lo que no convierte a los kurdos en agentes de Estados Unidos o de Europa, pero los bombardeos por s? solos no hubieran funcionado.

El triunfo dependi? de haber superado las tensiones internas para defender Kobane, perder el miedo ante Daesh (del que sufri? el ej?rcito iraqu?), aprovechar la ayuda internacional sin vender el alma al diablo, y la capacidad de entender las diferentes fases de la guerra y desarrollar una razonable pol?tica de alianzas.

Los kurdos salieron ganadores tanto militar como pol?ticamente. Eso no deja de ser un dolor de cabeza para los reg?menes de Irak, Turqu?a y Siria. La derrota de Daesh es, para los kurdos, el fracaso de la pol?tica de Turqu?a en la regi?n. Creo que la humanidad en su conjunto deber?a reconocer su deuda con los kurdos, por marcar el camino hacia la derrota del Daesh.

Por: V?ctor de Currea-Lugo (Especial desde Irak para La Opini?n)