ARGELIA TRAS BOUTEFLIKA
Vacío de poder en Argelia: ¿Quién debe dirigir el país?
El mandato interino de tres meses del presidente del Senado expira sin haber cumplido con su misión de convocar elecciones
La Vanguardia
09/07/2019 13:40
¿Quién ha de asumir la jefatura de Estado en Argelia a partir de hoy? Los constitucionalistas del país magrebí dudan y debaten sobre el tema intensamente. Una crisis institucional puede desencadenarse en los próximos días tras terminar la pasada noche el plazo de 90 días que la Constitución argelina otorga a Abdelkader Bensalah, presidente del Senado para organizar unas elecciones presidenciales. Y no ha conseguido convocarlas.
La transición democrática no arranca
Crisis precipitada tras la dimisión de Bouteflika
El cargo interino de Bensalah le fue concedido tras la dimisión el 4 de Abril del sempiterno presidente Abdelaziz Bouteflika , desencadenada por las protestas contra su reelección desde febrero de este año.
Estas protestas denunciaban la corrupción institucional de un régimen autoritario personalizado en Bouteflika, en el poder desde 1999 y que aspiraba a su quinto mandato. A su menor acción política tras el ictus que sufrió en 2013 y que había reducido su agenda, se le sumó la presión callejera y la del jefe del Ejército, Ahmad Gaïd Salah, nuevo hombre fuerte del país.
Dudas sobre su legitimidad
La misión de Bensalah
La misión constitucional de Bensalah era organizar unos comicios limpios en los que el pueblo argelino certificara el cambio de régimen. Dado que no se ha producido ese hecho, la continuidad y legitimidad del edificio institucional estaría en entredicho. La Carta Magna no estipulaba nada, empero, en caso de que esas elecciones no se llevaran a cabo.
Los comicios se suspendieron por falta de candidatos. Bensalah pidió entonces revitalizar el diálogo entre sociedad civil y actores políticos. Sin embargo, el pueblo no aceptó esta oferta y se manifiesta masivamente todos viernes con mensajes del tipo “no hay diálogo con los impostores”.Temen que personalidades del antiguo régimen, como Bensalah o Ahmed Gaid Salah, puedan tutelar esa transición democrática.
El Presidente intenrino Abdelkader Bensalah durante una sesión parlamentaria en el Palais des Nations en Argel.
El Presidente intenrino Abdelkader Bensalah durante una sesión parlamentaria en el Palais des Nations en Argel. (Ryad Kramdi / AFP)
Según informa “Liberté”, rotativo argelino : “el Consejo Constitucional ya ha tomado la iniciativa hace más de un mes emitiendo un dictamen que prolonga, de facto, la interinidad en el actual jefe del Estado hasta la celebración de la elección presidencial”.
El periódico se pregunta si “al querer evitar a toda costa el vacío constitucional, las nuevas autoridades no hubieran sumido el país abiertamente en la inconstitucionalidad”. Pese a las dudas de los juristas, el Gobierno y el jefe del Ejército consideran que la suspensión de los comicios prolonga “de facto” el mandato de Bensalah.
Tampoco confía en Gaïd Salah
El pueblo no se fía de Bensalah
Bensalah es rechazado por amplias capas de la sociedad porque fue un firme apoyo de Bouteflika. Tampoco su estado de salud (padece un cáncer) le ayuda, como mostró su aspecto débil el pasado miércoles cuando apareció para confirmar su intención de permanecer activo hasta la elección de un nuevo presidente e instar a un diálogo nacional.
La población tampoco se fía del hombre fuerte, Gaïd Salah, designado jefe del ejército en 2004 por el propio Bouteflika. Y eso a pesar de que el militar ha impulsado estos meses de gobierno interino una campaña de “manos limpias” en la que trata de distanciarse del antiguo régimen. Para ello, ha llevado a la cárcel a políticos y empresarios ligados a la familia Bouteflika, incluido a Said Bouteflika, el hermano, y a sus dos últimos primeros ministros, Ahmed Ouyahia y Abdelmalek Séllal.