Cumbres van y cumbres vienen. Greta Thunberg en las cumbres

Ella ha liderado e inspirado un movimiento que está calentando las calles de cientos de ciudades que todavía se están contabilizando en varios continentes. Se ha rebelado contra el quinto día de encierro escolar y los viernes los dedica a manifestarle a los políticos que no están haciendo nada contra la crisis climática y que no pueden pedirle a su generación que lo haga, cuando sean adultos, porque el tiempo no alcanza.



CUMBRES VAN Y CUMBRES VIENEN GRETA THUNBERG EN LAS CUMBRES

Guillermo Sira
09.08.2019
ruptura.org

Con urgencia, pedimos a los Estados miembros que vengan a Nueva York en septiembre con planes concretos y realistas.
António Guterres. Secretario General de la ONU

Para tratar el problema de la crisis climática, las cumbres de estados, de gobiernos, de presidentes, de jefes de estado, de jefes de gobiernos… han sido un fracaso. Cumbre nos remite al lugar más alto, al sitial de los que dirigen, de los que administran, al olimpo de los de arriba. Las Cumbres seguirán fracasando mientras los de abajo no se manifiesten. Pero a los de abajo no les toca manifestarse en Cumbres, sino en asambleas de ciudadanos y de campesinos, en marchas, en las calles, en acciones que todavía no se han inventado, pero que generen organización, coordinación y autonomía frente a un poder global que ha logrado colonizar la subjetividad de las mayorías.

Greta Thunberg, una joven Sueca que padece un tipo de autismo, va a tomar la palabra también en la Cumbre convocada por la ONU el 23 de septiembre en Nueva York.

Ella ha liderado e inspirado un movimiento que está calentando las calles de cientos de ciudades que todavía se están contabilizando en varios continentes. Se ha rebelado contra el quinto día de encierro escolar y los viernes los dedica a manifestarle a los políticos que no están haciendo nada contra la crisis climática y que no pueden pedirle a su generación que lo haga, cuando sean adultos, porque el tiempo no alcanza. Simplemente, en base a la información que dan los reportes científicos, toma la decisión de protestar contra el problema más grave que afrontan los seres vivos, que implica nada menos que la extinción.

Greta ha sido un detonante para el despertar de la conciencia colectiva, que se encuentra entretenida en la búsqueda de las satisfacciones que oferta la quincalla global en el plano del consumismo en el mundo moderno.

Greta Thunberg ya ha recibido los primeros ataques de parte de los que niegan la crisis ambiental, muchos de ellos tan crueles como llamarla cuerpo sin alma, zombie, premio nobel del miedo, renacer del nazismo, etc. Saben ellos que la presencia de esta persona-síntesis de un clamor colectivo en crecimiento, en esta y otras cumbres, es una novedad que debe influir en los opacos acuerdos políticos que siempre resultan de estos eventos. Las multitudes que han tomado las calles estarán ahora atentas a lo que se discute en las cumbres.

El peligro del liderazgo de Greta y de todos los liderazgos, es que se desprendan del control de los movimientos que representan. Hasta el Papa quiere reunirse con ella. Pase lo que pase con la figura de Greta, lo importante es que hay un movimiento de las muchedumbres en las calles del mundo, creciendo en tamaño y en conciencia.