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El desvío ideológico de las elecciones en Bolivia
Jaime Yovanovic (Profesor J)
El lunes 21 el pueblo boliviano está convocado a votar para presidente de la república y la pelea allá arriba la van a dar Evo Morales, que sigue los pasos de los dictadores Ortega de Nicaragua y Maduro de Venezuela en la parodia de socialismo que ambos realizan en medio de la más dura represión a los pueblos. En el otro rincón está Carlos Mesa, abanderado de la derecha que intenta atraer las dinámicas sociales golpeadas por Morales, sin conseguirlo, aunque muchos van a votar por él para sacarse al Evo de encima. Esa es la rayada de cancha y resulta falsa de todos los lados, pues Evo Morales no puede ir de candidato por cuarta vezs debido a que esa propuesta fue rechazada en referéndum popular, figura constitucional que Evo sorteó haciendo que sus paniaguados del tribunal constitucional votaran que es su derecho humano ser candidato por cuarta vez. Ridíoculo argumento tomado con sonrisas a nivel mundial, pero indiscutible del, punto de vista formal dada la flagrante violación de la constitución que se hizo a si mismo el tribunal constitucional se lkacayos del presidente. Así entienden la democracia a su gusto quienes sólo viven del poder y no de la gente.
Desde abajo y diversos lugares se ha levantado el Comité Nacional de Defensa de la Democracia señalando este hecho y exigiendo que se aplique la Constitución en pleno reconociendo la validez del referendum que cerró el paso a la re-relección. Este Conade tiene una gran recepción y tegitimidad popular, pues sus integrandes han defendido los derechos humanos desde las dictaduras y son queridos y respetados por diferentes sectores populares. Evidentemente no se inclinan a los candidatos que van a disputar el cargo contra Evo Morales y son reconocidos comom luchadores incansables de las causas de los de abajo. Ellos priorizan por la aplicación del referendum, es decir que Evo Morales no puede ir de candidato, por lo que esta elección está viciada de hecho y de derecho, lo que no han querdido reconocer los partidos ansiosos por disputar cargos de la máquina del poder y están de facto legitimando que Morales sea real candidato.
De allí que no tiene importancia la elección y sus resultados, salvo sus efectos en la propaganda de cada uno en lisa: la izquierda burocrática y la derecha ídem. La derrota de Evo Morales puede traer como consecuencia el quiebre de sus lazos de amarre orgánico e ideológico con los movimientos sociales, todos ellos divididos en dos, sino en tres en algunos casos, pues el avance organizativo se había dado fuertemente entre los campesinos, los obreros encabezados por los mineros y en feneral por todas las organizaciones sociales, dentro de las cuales el partido de presidente seleccionó a algunos y sacándolos fuera montó una entidad paralela. Por ejemplo, en la organización campesina está Felipe Quispe incansablemente levantando la recuperación del sector, que hoy día como los demás, cuenta con el sector de gobierno y, lo más importante, el sector autónomo, lo que significa que la derecha no ha conseguido adenyrarse en ellos.
Es en los sectores autónomos de los cocaleros de Yungas, de los ponchos rojos de Achacachi, en fin en muchos sectores, donde se está dando lentamente el proceso de recuperación de la autonomía y de capacidades de incidir como sujetos protagonistas en y desde sus territoriosm de los sectores que podrán despertar nuevamente las esperanzas lejos de los aparatos y de las relaciones con el capiotalismo extractiviste. Sin duda el ejemplo de las comunidades ecuatorianas de decidir lo que el gobierno debe hacer, va a ser un nuevo e interesante punto que formará parte de las dinámicas sociales autónomas en todo el continente.