ALEGRAMOS EL TERRITORIO DESDE EL CORAZÓN DEL FUEGO PARA ARMONIZAR LA COMUNIDAD
La tulpa Ipx Kwet Yat, es un espacio para conversar, ofrendar y pensar en las diversas situaciones que pasan dentro de nuestras comunidades. Antiguamente en las casas había dos tulpas, una para cocinar y otra para compartir con los espíritus.
Este espacio es de gran importancia para aconsejar y mantener la armonía familiar y comunitaria, pero lastimosamente son pocas las familias y territorios los que conservan estos espacios de dialogo y ofrenda alrededor del fuego, debido a la pérdida de identidad, cultura y el desarraigo territorial generado por la violencia.
Sin embargo, desde la parte organizativa y comunitaria se está revitalizando, desde la tulpa, los diferentes rituales mayores de nuestro pueblo Nasa, para así seguir floreciendo en el tiempo y el espacio bajo las enseñanzas de las y los mayores.
A causa de la pandemia COVID-19, nos damos cuenta que lo que se creía importante no nos garantiza una vida sabrosa, que es hora de reorientar el camino desde el calor de la familia y junto con la comunidad, reflexionar sobre la importancia de la espiritualidad para fortalecer y cuidar a el territorio para la defensa de la vida.
Hoy vemos la importancia del cuidado de la salud, de fortalecer la huerta tul en nuestras comunidades, de seguir liberando uma kiwe, de saber que es lo importante para nuestro pueblo Nasa, para así no seguir alimentando los espejismos de comodidad que nos aleja de una vida sencilla y sabrosa.
El ritual mayor de la apagada del fogón “ipx fxicxanxi”, que se realiza por este tiempo, es para equilibrar las energías del territorio, como espacio de revitalización de nuestro ser, nos invita a pensar desde el corazón y evaluar el caminar personal, familiar y comunitario, también nos convoca a estrechar el compromiso con nuestra Madre tierra de limpiar los territorios levantando el sucio en torno a la tulpa espacio vital y de esta forma caminar hacia el Wët WëtFxinzenxi.