La historia de la patria, del poder, del estado, de la constitución, de la ley, del ejército, de las iglesias y del matrimonio, es la historia del patriarcado

Hemos nacido bajo el sistema del estado y la patria, y nos parece algo natural, pero antes se creía que el sol y demás astros giraban en torno al eje de toda la existencia que era nuestro planeta Tierra, pero …



LA HISTORIA DE LA PATRIA, DEL PODER, DEL ESTADO, DE LA CONSTITUCIÓN, DE LA LEY, DEL EJÉRCITO, DE LAS IGLESIAS Y DEL MATRIMONIO, ES LA HISTORIA DEL PATRIARCADO

Jaime Yovanovic (Profesor J)

Hemos nacido bajo el sistema del estado y la patria, y nos parece algo natural, pero antes se creía que el sol y demás astros giraban en torno al eje de toda la existencia que era nuestro planeta Tierra, pero …

Corría el 12 de abril de 1633 cuando el científico italiano Galileo Galilei (1564-1642) compareció, a la edad de 69 años, ante el Santo Oficio, la inquisición romana, para dar cuenta de un libro que había publicado un año atrás, el Diálogo sobre los dos máximos sistemas del mundo, en el que defendía el modelo heliocéntrico propuesto por Copérnico. En él planteaba que la Tierra y los planetas giraban alrededor del Sol, y ridiculizaba el geocentrismo, que colocaba a la Tierra en el centro fijo del universo y que está basado en la física aristotélica y, sobre todo, en el modelo ptolemaico, el que mejor encajaba con las Sagradas Escrituras.

Ahora ya nadie niega el modelo heliocéntrico, pero en su día refutar las teorías de la Iglesia era poco menos que ir en contra de la voluntad de Dios, lo que conllevaba duros castigos.

Ptolomeo fue un astrónomo que da las bases de “un modelo de universo” en su forma física, es uno de los personajes más importantes en la historia de la Astronomía. Astrónomo y Geógrafo, Ptolomeo propuso el sistema geocéntrico como la base de la mecánica celeste que perduró por más de 1400 años. Sus teorías y explicaciones astronómicas dominaron el pensamiento científico hasta el siglo XVI

Eso significa que tenemos sólo cuatro siglos de saber que la tierra gira a través del sol, y también significa que el patriarcado miente y oculta muchas informaciones con una gran soltura y desenvoltura para que aceptemos una falsa realidad.

 

El faraón egipcio se rodeaba por sacerdotes y sabios que se enteraban de todo, reunían informaciones de todo el mundo y tenían sus propios centros de estudio de modo que la figura del emperador llamado faraón invocaba a las masas esclavas rebeldes a una gran manifestación y demostraba su poder y condición divina escondiendo el sol y oscureciendo el firmamento haciendo gestos teatrales como un prestidigitador ante el terror de la multitud que se arrodillaba pidiendo perdón y entregándose de cuerpo y alma a ese ser supremo que tenía delante, mientras los sacerdotes se sobaban las manos y proseguían sus investigaciones para saber cuándo sobrevendría el próximo eclipse u otro fenómeno natural para incorporarlo al calendario de los actos divinos del gran jefe.

 

El patriarcado nace mintiendo, obviamente, ya que destruyó la forma de vivir en comunidades apresando a las brujas de la época que sabían todos los secretos de la naturaleza y constituían el eje, el cuerpo y el alma del grupo humano que se organizaba como un hormiguero o un enjambre de abejas. Atrapando a las mujeres y desorganizando la vida, generaba las condiciones de una sociedad artificial, armada a pedazos con mentiras y artes de prestidigitación que diseñaban otro esquema explicativo del mundo que permitiera al mismo tiempo reemplazar la espiritualidad comunitaria por una especie de espiritualidad individualista inventando que un señor patriarca muy poderoso, que se metía a espiar y castigar pecados por todos los rincones de la vida, sentado en un trono de autoridad con una gran barba blanca y de piel ídem oscurecía el cielo como quería al más puro estilo faraón

Y arrojaba a la hoguera del infierno quemando a todos los que dejaran de creer y descubrieran la verdad para expulsarlos del paraíso a pagar por comer el fruto del árbol del saber-poder.

 

Así la tierra donde se vivía dejaba de ser común y de todos para todos, pasando a ser las tierras del señor patriarca, naciendo así la propiedad, que significa el uso exclusivo (mi posesión) y excluyente (nadie más) de esa tierra o de cualquiera cosa sobre o bajo ella, incluso personas, así la tierra dejaba ser libre y se llamó “la tierra del señor patriarca” o “patria” y los asesores de este caballero constituyen una casta especial muy importante para el poder que desarrolla la ideología de tratar a las personas sometidas que habían sido disgregadas después de la destrucción de las formas comunitarias del buen vivir, una ideología llena de mentiras y cuentos para intentar quebrar las cosmovisiones comunitarias que daban cuenta del conocimiento ancestral del mundo y del ser, una ideología que permitiera re-ligar a estas personas ya individualizadas pero no entre ellas y menos horizontalmente (gran peligro para el poder), sino atadas a un señor patriarca imaginario que estaba en todas, era omnipotente y omnipresente. Nace así la religión, el arte de religar a los disgregados en jaulas o cercados, con pastores que guíen el camino y con perros pastores que muerden las patas de los que salen de la fila.

 

El patriarca feliz en la patria y con el ganado bien ordenado debe enfrentar las rebeliones de los octubres del pasado y así nace el estado como instrumento de dominio y sometimiento con pastores por todos lados y con un montón de eunucos o servidores castrados a los que se entregan armas    –el parto de los montes: nace el ejército- y cuando dejan de castrarlos les entregan salario, que es el modo de someter más palatable, ya que todos los dominados finalmente deben entregarse por cuatro chauchas si quieren comprar papas y dar de comer a la prole, pues siendo la patria la tierra de los propietarios exclusivos y excluyente, el que comparte es un ladrón, pero el que se somete al mercado puede comer tranquilo y hasta ser candidato a ocupar cargos de poder, con lo que nacen los partidos políticos, que luchan por el poder de la polis o ciudad-estrado.

 

De allí que los propietarios del reino patriarcal, la patria,  no pueden permitir el comunismo de compartir las tierras y los alimentos, pues ello debilita el mercado que obliga a todos a correr detrás del salario o algo de dinero, así temen a las huertas comunitarias y a las ollas comunes, pero no pueden detenernos, pues se está agudizando la crisis,

 

La patria, el poder, el mercado y los empresarios pueden permitir que algún partido se llame comunista, socialista o como se llame, pues siendo legales o ilegales, electorales o armados, al tener como objetivos la conquista del poder patriarcal de la patria y ocupar cargos estatales, están ayudando a engatusar a la gente, igual que las iglesias, a llenarla de ilusiones y falsas esperanzas trayendo de vuelta al ganado rebelde que quiere transformar el mundo multiplicando las huertas comunitarias, ollas comunes y formas de administración  vecinal de los barrios, poblaciones y comunas, mentirles y hacerlos formas filas disciplinadas para aprobar esta vez una nueva constitución que llene de flores y música la tierra del señor patriarca, la patria. 

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