Tropas israelíes matan a quince palestinos en una incursión en Gaza
·El primer ministro Abu Ala acusa al Gobierno de Sharon de recurrir al «terrorismo de estado»
Las tropas israelíes culminaron ayer una nueva y sangrienta incursión en los campos de refugiados de Nuseirat y Al Bureij, en la franja de Gaza, que se saldó con la muerte de quince palestinos, cuatro de ellos jóvenes de entre 11 y 16 años. Mientras las organizaciones de la resistencia palestina juraban venganza, el primer ministro Abu Ala denunció el «terrorismo de Estado» israelí y pidió protección a la comunidad internacional para detener la permanente agresión de Israel contra el pueblo palestino. Asimismo, Abu Ala lamentó el silencio internacional y criticó la actitud de EEUU ante la «continua sangría»
GARA
GAZA
Un militar israelí definió la última y sangrienta incursión israelí como «una operación de gran precisión» para «prevenir ataques terroristas contra objetivos israelíes». El «preciso» ataque fue una nueva matanza de palestinos, quince, que sumados a las seis víctimas del sábado suman un total de 21 palestinos muertos.
Abu Ala acusó al Gobierno israelí de «terrorismo de Estado»y pidió el amparo de una comunidad internacional que volvió a responder con su silencio. Salvó la «gran preocupación» mostrada por el Estado francés, no hubo condenas, sólo un silencio que permite a Israel llevar adelante su política de exterminio con la mayor impunidad. Mientras que en los campos de refugiados atacados, Nuseirat y Al Bureij, más de 10.000 palestinos clamaban venganza en los funerales por las víctimas.
Tras el ataque frustrado de la resistencia palestina de la víspera, que se saldó con seis palestinos muertos cuatro activistas y dos policías palestinos, la venganza israelí llegaba a primera hora de ayer.
Fuerzas el cuerpo israelí Guivati invadían Nuseirat y Al Bureih, campos de refugiados separados por una calle, con la protección de decenas de tanques y helicópteros Apache, de fabricación estadounidense. Al confirmarse la incursión ocupante, desde las mezquitas llamaron a la resistencia.
Según testimonios recogidos por el Centro Palestino para los Derechos Humanos (CPDH) los soldados hicieron una redada en tres edificios de viviendas propiedad de las familias Quwaider, Aliyan y Ghazal, y en al menos un caso se informó de que usaron a uno de los vecinos como escudo. Mientras, desde las azoteas, francotiradores controlaban las calles y tiraban a matar. Ellos causaron la mayor parte de las víctimas.
El desenlace de la desigual batalla, que comenzó a las tres de la mañana y finalizó a las diez, fue de quince muertos. El CPDH informó de que entre los 15 muertos hay cuatro menores de edad: Mahmoud Abdullah Younis, de 11 años, Mohammed Amer Abu Zuraiq, de 12, Mohammed Ali Bedawi, de 15, y Haitham Mohammed Al Issawi, de 16. El resto de los muertos son nueve milicianos del Movimiento de la Resistencia Islámica (Hamas) y otro de los comités de resistencia Popular. La incursión israelí también causó la muerte a un agricultor. Entre los cerca de 80 heridos hay 26 menores.
Israel anuncia más «operaciones ofensivas»
GARA
GAZA
El jefe del Estado Mayor israelí, el general Moshe Yaalon, anunció que «otras operaciones ofensivas» serán lanzadas tras las incursiones de ayer. Las amenazas del militar se cumplían horas después, y una nueva incursión era lanzada en la tarde de ayer contra la localidad de Yabati, cerca de Jenín (Cisjordania).
«Nuestras tropas realizan una operación de rastreo contra terroristas en el campo de refugiados de El Bureij y tenemos la intención de lanzar otras operaciones ofensivas» en Cisjordania y en la franja de Gaza «mientras los terroristas sigan con sus ataques», afirmó el general a la radio pública después de que se conocieran las consecuencias de la operación de la que hablaba.
Fuentes citadas por el diario “Haaretz” aseguran que los israelíes planean llevar a cabo ataques contra los palestinos en la franja de Gaza antes de que Ariel Sharon ponga en práctica su plan para evacuar las colonias judías.
Por su parte, el ministro palestino Saeb Erekat, que condenó la doble incursión y que pidió que se produzca un regreso a las conversaciones en torno a la llamada hoja de ruta, afirmó que «en un momento en el que ellos están hablando de salir de Gaza, están destruyendo Gaza».
Al respecto, Nabil Abu Rudeina, portavoz de Arafat, dijo que «Israel pagará el precio de esta escalada y no podrá imponer sus designios a nuestro pueblo», en alusión al «plan unilateral de desconexión de los palestinos», en el que la ANP ve una intención de anexionarse zonas de Cisjordania.