“La demografía de las tierras más estables y seguras de Siria está siendo modificada por el plan conjunto de la ONU, los Estados Unidos, Rusia y la Unión Europea”, escribe Ferda Çetin.

“La demografía de las tierras más estables y seguras de Siria está siendo modificada por el plan conjunto de la ONU (Organización de las Naciones Unidas), los Estados Unidos (EE. UU.), Rusia y la Unión Europea (UE). El ‘cinturón Árabe’, antes construido por el Régimen del Baaz, se ha transformado ahora en un ‘cinturón turco-ISIS’ por la red internacional de pirómanos”, escribe Ferda Çetin para Yeni Özgür Politika.

El artículo de Ferda Çetin es el siguiente:

Un juego sucio se está poniendo de manifiesto. Un juego que se desarrolla insidiosamente ante los ojos de todos, paso a paso…

Los actores son “respetados”, por lo que sus ilusiones son más que esperadas. En Rojava, los kurdos y los pueblos son expulsados de la tierra en la que han vivido durante cientos de años. Esta tierra ha sido arrebatada a su gente y entregada a Turquía y al ISIS.

El ex presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, Eliot Engel, describió al ex presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, como “un pirómano que se hace pasar por bombero”.

Hay tantos pirómanos…

La demografía de las tierras más estables y seguras de Siria está siendo modificada por el plan conjunto de la ONU (Organización de las Naciones Unidas), los Estados Unidos (EE. UU.), Rusia y la Unión Europea (UE). El ‘cinturón Árabe’, antes construido por el Régimen del Baaz, se ha transformado ahora en un ‘cinturón turco-ISIS’ por la red internacional de pirómanos.

En la frontera entre Siria y Turquía, 50 mil casas hechas en Mashhad son una parte importante de este plan. El primer objetivo de este rompecabezas es construir viviendas para un millón de refugiados en la “zona de seguridad”. Si no se evita, estas ciudades se ampliarán a lo largo de la frontera.

El cinturón turco-ISIS creado en el norte de Siria y Rojava no está consumado, se está estableciendo paso a paso, los pueblos de la región y la opinión pública mundial se están acostumbrando.

Recordemos:

El 18 de enero de 2018, Rusia abrió su espacio aéreo a la aviación turca, llevando tropas a la frontera en Siria. Dos días después, el Ejército Nacional Sirio (ENS), formado por militares turcos y grupos armados afiliados, ocupó las tierras de Afrin.

El 7 de octubre de 2019, la administración estadounidense anunció la retirada de sus fuerzas militares de Siria. El 9 de octubre de 2019, el espacio terrestre y aéreo al este del Éufrates se abrió al Estado turco. Turquía, junto con grupos del ISIS, entró en Serêkaniyê y ocupó Girê Spî. El presidente turco Erdoğan anunció en la 74ª Asamblea General de la ONU que la frontera siria se convertiría en una “zona de seguridad”. Aunque se trata de una violación de la soberanía del Estado sirio, no hubo objeciones ni por parte del Secretario General de la ONU ni del resto de los miembros de la ONU.

Por el contrario, el secretario general de la ONU, António Guterres, declaró su apoyo a la invasión diciendo: “La ONU examinará los planes de la zona de seguridad que el Estado turco establecerá en el norte de Siria”, tras su reunión con Erdogan en Estambul el 31 de octubre de 2019.

La canciller alemana, Angela Merkel, no sólo proporcionó todo tipo de apoyo político y económico al Estado turco, sino que también convenció a los países de la UE para ello. Merkel también convenció a los miembros de la UE que querían recortar la ayuda financiera para que pagaran ayudas adicionales para Turquía. Hace tres días Merkel dio un paso más y levantó las sanciones a Turquía.

En Rojava, el cinturón turco-ISIS se llevó a cabo abiertamente. De hecho, “todos sabían que el capitán estaba mintiendo y vieron los dados cargados”.

El 8 de noviembre de 2019, escribí esta columna:

“Los kurdos y los pueblos del norte de Siria serán expulsados de Serekaniyeê y Girî Spî y exiliados en los desiertos sirios; los grupos de violadores, saqueadores y ladrones del ISIS serán colocadas en sus tierras. Turquía tata de cubrir con una mentira sus intenciones hablando de una zona de seguridad. Este plan no tiene secretos”.

Quieren acabar con sus economías y producciones autosuficientes y hacerlos dependientes.

Si este plan se lleva a cabo, Erdogan construirá edificios para refugiados y ciudades con TOKI en las tierras abandonadas por los kurdos. Los grupos del ISIS vivirán en estos nuevos lugares “en paz y alegría”.

Así, se evitará la afluencia de refugiados a Europa, Rusia y el Cáucaso. Es el plan y los beneficios comunes de quienes apoyan abierta y secretamente la ocupación turco-ISIS.

El Observatorio Sirio en Gran Bretaña anunció previamente que 50 mil grupos del ISIS estaban luchando activamente en Irak y en Siria. ¿Todos los combatientes murieron? ¿Se evaporaron todos o se volvieron invisibles? Por supuesto que no.

Siguen luchando en nombre de Turquía en Idlib, Karabaj y Libia. La ONU, los EE. UU., Rusia y la UE saben muy bien que están bajo el control de Turquía y que esto es un crimen bajo el derecho internacional.

Después de la guerra de Libia, encontraron una “nueva” táctica para no enfrentarse a la verdad: fuerzas militares bajo control de Turquía.

Estos grupos, entre ellos Al Qaeda, Al Nusra o el ISIS, son terroristas ante la opinión mundial y tendrán que ser capturados, juzgados y sometidos a una sanción. El Estado turco, que es su principal valedor, se convertirá inevitablemente en objeto de juicio internacional.

Al inventar el término “fuerzas militares de Turquía en control”, asumen que los asesinatos, los robos, los saqueos y las violaciones no han tenido lugar, por lo que el ISIS y Turquía serán absueltos. En este sentido, el uso del término “fuerzas militares en control de Turquía” está creando una imagen. ¿Qué es lo que une a estas fuerzas que tienen profundas e irreconciliables contradicciones en Siria? ¿Qué se puede hacer contra este gran asedio y esta gran hostilidad?

Pero esta es otra historia…

ANF