Ecuador. Del sartén a las brasas: Elección presidencial disputada entre la oligarquía y la dictadura

Después de la victoria electoral del progresismo de López Obrador en México que lanzó el militarismo para imponer a sangre y fuego los megaproyectos enfrentando la resistencia de los pueblos, vence en Argentina el progresismo peronista en su variante más derechista que apoyó la victoria electoral del MAS en Bolivia que hoy se debate en crisis debido a la salida de dirigentes cansados de Evo Morales que ha evitado la elección interna de candidatos a las elecciones subnacionales cambiándolos por sus allegados parte de la burocracia estatista. Ahora viene el turno de Andrés Arauz, de UNES, el delfín de Correa el dictador progresista de Ecuador, que enfrenta al banquero o exbanquero Lasso mientras por el lado popular disputa desde una tercera posición Yaku Pérez del partido Pachakutik creado por la Conaie, poderosa confederación indígena a la que Pérez dio la espalda devorado por el electoralismo sacrificando así el apoyo electoral de su principal bastión.



Ecuador. Del sartén a las brasas: Elección presidencial disputada entre la oligarquía y la dictadura.  

Jaime Yovanovic (Profesor J)

Después de la victoria electoral del progresismo de López Obrador en México que lanzó el militarismo para imponer a sangre y fuego los megaproyectos enfrentando la resistencia de los pueblos, vence en Argentina el progresismo peronista en su variante más derechista que apoyó la victoria electoral del MAS en Bolivia que hoy se debate en crisis debido a la salida de dirigentes cansados de Evo Morales que ha evitado la elección interna de candidatos a las elecciones subnacionales cambiándolos por sus allegados parte de la burocracia estatista. Ahora viene el turno de Andrés Arauz, de UNES, el delfín de Correa el dictador progresista de Ecuador, que enfrenta al banquero o exbanquero Lasso mientras por el lado popular disputa desde una tercera posición Yaku Pérez del partido Pachakutik creado por la Conaie, poderosa confederación indígena a la que Pérez dio la espalda devorado por el electoralismo sacrificando así el apoyo electoral de su principal bastión.

 

A pesar de los esfuerzos de Pérez por arrastrar al movimiento indígena desde arriba sin el apoyo real de las formas de autoorganización y autonomía obtenida en las asambleas, los autogobiernos y los Parlamentos Populares, estas formas de articulación y despliegue de la potencia del protagonismo social siguen operando y las encuestas vaticinan una elevada abstención, la que permitirá observar si la población se inclina hacia las tres burocracias o si prefiere concentrar esfuerzos en desarrollar sus propios modos de vivir, sobrevivir, producir y reproducirse.

 

Ya en Bolivia se ha podido observar que la subjetividad aymaquechua dentro y fuera del MAS se ha ido decantando por una severa crítica a Evo Morales y la burocracia estatista que le acompaña, y en México se ve que las múltiples comunidades y pueblos indígenas han optado por ampliar aún más las formas de autogobierno, municipios autónomos y organizaciones de defensa del territorio y la vida en abierta confrontación con el avance despiadado y militarizado del extractivismo de los megaproyectos del progresismo, así como en Chile, a pesar de la enorme división que obtiene el estado con sus candidaturas por todos lados a la constituyente y cargos institucionales, los lof mapuche no han podido ser atrapados en esa dinámica colonial y han avanzado a la constitución de la Policía Comunitaria Mapuche.

 

Por todos esos factores internos y externos regionales, nos inclinamos a sostener que lo más probable es que en Ecuador predomine la conciencia antioligáquica y antidictatorial sumada a la convicción antiburocrática que alimentará la idea, la legitimidad y la simpatía de los órganos de la autoorganización popular y habrá una fuerte abstención que de ser mayoritaria significará una victoria contra las tres tendencias del poder aunque una de ellas se haga de los asientos y palancas de la máquina de moler carne y las otras dos compartan espacios secundarios.

 

De haber mayoría electoral de la abstención se abrirá un nuevo período para la Conaie y organizaciones hermanas para acrecentar las formas de la democracia local, la autonomía y los autogobiernos haciendo abstracción de los repartos en el poder distanciándose de las tres cúpulas electoralistas.

 

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