No soy de izquierda, menos de derecha: soy una mujer venezolana

La autora apoyó en las elecciones parlamentarias a la lista del Partido Comunista aliada con la APR, lo que no desmerece su carta abierta que resulta un buen elemento de análisis respecto de la dictadura de Maduro



No soy de izquierda, menos de derecha: soy una mujer venezolana

- Déjame quejarme. Déjame ser humana, es mi derecho. Déjame llorar.

Hace muchos días que no logro escribir, tengo varios inicios sin desarrollos ni desenlaces. Parece que me estoy desdibujando, se han ido cayendo pieles, escamas, disfraces, ropajes; se han ido desprendiendo etiquetas, las de socialista, revolucionaria, izquierdista, dirigente, política… me ha ido quedando solo mi esencial identidad, la de humana: hija, madre, hermana, abuela, mujer venezolana; y, al fin ha vuelto la inquietante duda inspiradora; quizás porque aquí donde me ubique está la mayoría.

Voy pues con mi realidad aplastante y opresora; con la verdad insomne que me hace trasnochada recurrente.

Ya no me importa ni quiero saber de componendas o conspiraciones imperiales; no me hablen de bloqueos ni sanciones o medidas coercitivas uni, bi o multilaterales.

No quiero escuchar de autoproclamados que desangran las arcas del Estado y caminan libremente por las calles.

No quiero saber de lealtad siempre y de traición nunca; tampoco de halos mágicos de comandantes supremos con cuentos de pajaritos habladores que intentan suprimir mi raciocinio.

 

Ya me harté de la derecha sincera y de la izquierda farsante, me fastidie de la izquierda martirizada y de la derecha asesina.

Del malo y el bueno, del ladrón y el policía; estoy ya aburrida.

No logro superar el trasnocho pues cada amanecer me abruma con la realidad dolorosa del tiempo perdido, deshilachado y malgastado, de la miseria que me rodea y aturde; no solo por la ausencia total de mínimas condiciones económicas sino sobretodo por la desesperanza implantada en la conciencia colectiva para que por doquier me tope con el chamo sin esperanzas y la chama sin planes ni ilusiones… La juventud sin ganas ni anhelos; los muchachos resignados y opacos.

- Hacia dónde huyó el porvenir Dios mío!

Son éstas algunas de mis motivaciones por las que les dejo aquí lo más importante que deseo decir: tal vez se asombraran algunos compañeros y otros se escandalizaran, aunque ya varias veces lo he advertido en público y privado a mis compas y camaradas, yo lo que soy es una mujer de este pueblo que salió en pos de Chávez y convencida por Chávez a luchar y entregar hasta la vida por un proyecto que me prometió un país de derecho y justicia, una Patria para vivir viviendo, un impulso para la construcción de un mundo mejor y posible, con protagonismo popular y participación democrática, con equidad, igualdad, suprema felicidad, estabilidad política y bienestar social; por eso dejé de dedicarme a tiempo completo a la cocina, la batea, la mesa de planchar, el escritorio, el pizarrón y la bicicleta de - spinning - para trabajar en la realización de ese AHORA que no se logró el 4F, para ser y hacer en el cumplimiento de las Líneas estratégicas del Gran Salto adelante, del Proyecto Nacional Simón Bolívar y del Plan de la Patria; pero antes de eso no era de izquierda y menos de derecha; hoy quiero hacérselo saber también a Nicolás, a mí eso de izquierdosa, infantilismo de izquierda o izquierda trasnochada no me dice nada, no me explica por qué no puedo criticar, denunciar o protestar por los derechos constitucionales vulnerados?

No me justifica la matraca institucional ni el despojo de tierras a los campesinos o la privación de libertad de líderes sociales, sindicales, campesinos.

 

No me explica por qué conculcan los derechos laborales al suplantar la ley orgánica del trabajo de Chávez por un decreto que despoja a los trabajadores y las trabajadoras de sus reivindicaciones. Por qué Movilnet, CANTV y las empresas administradoras y distribuidoras de la energía eléctrica dejaron de emitir facturación o cobrar por el servicio desde hace más de cuatro años y ahora nos llaman chulos y mala paga?

Por qué no invirtieron en la empresa de gas doméstico y nos tienen más de un año cocinando en fogón de leña para complacer las excentricidades caraoteras de Carola?

Por qué no completaron el plan de gasificación directa?

No me hacen comprender que se hizo entre 2013 y 2017, siendo que las sanciones y/o bloqueo iniciaron en 2017?

No me quita el deseo de ver la tan ofrecida lista de los raspa cupos y los que se hicieron millonarios con los dólares asignados para inversión y lo que hicieron fue abultar sus cuentas en paraísos fiscales.

Maduro, - no soy de izquierda, ni marxista, ni comunista-.  Yo no he leído a Marx más allá de algunas frases sueltas, no he estudiado el marxismo a conciencia y ahora hasta temo hacerlo pues no quiero terminar como -tú- ; tú qué -vienes- de la -Liga Socialista- y sabes más que yo acerca de eso de “-izquierda trasnochada-” y aún asi te atreves a calificar de esa forma a quienes militaron contigo solo por disentir de tus métodos, prácticas y criterios.

Pero ya lo dije al principio, - no soy de izquierda -, ni siquiera izquierdosa; más bien al oírte le doy gracias a Dios por no serlo y si llego a serlo, que no sea como - tú -

Antes, yo afirmaba que no lograbamos avanzar en el Proyecto Bolivariano por falta de formación y estudio; pero tú y los intelectuales, académicos e izquierdistas que aplauden tus desvaríos e irrespetos, que se callan ante tu llamado a la inquisición izquierdista, así como algunos izquierdistas de antaño me indican que así como no basta rezar tampoco basta estudiar y formarse en la izquierda. Hay que tener conciencia de clase, humanismo, sentido de solidaridad y de Patria pero sobretodo amor, como lo sintió Chávez. Tú no tienes nada de eso y a los que te rodean parecen tener aún menos.

Estoy tan decepcionada, tan triste, tengo tanta amargura acumulada Nicolás que hasta me atrevo a preguntarte por qué no le dijiste a Chávez:

-Presidente, no cuente conmigo que yo no puedo con esto.

Hubiese sido mejor ser sincero, asumir la realidad y decir de frente: -no puedo o no quiero -; en lugar de poner esa cara de yo no fui, ese gesto de pensador Diente roto mientras Chávez te encomendaba su vida que era la Patria misma.

No has podido Nicolás, no pudiste ni quisiste cumplir la tarea encomendada, tu plan no era el del Comandante y con ello nos has hecho sufrir demasiado, nuestros hijos se ven forzados a salir de la Patria, hijos y nietos perdieron la estabilidad familiar, perdieron el año escolar, ciudadanos y ciudadanas perdieron la vida por falta de atención de salud y medicamentos; otros tantos perdieron su vivienda, su vehículo, su empleo, su negocio familiar. En fin, hemos perdido el bienestar, la paz, la tranquilidad, la alegría…, muchos hasta han perdido las ganas de participar y protagonizar; de luchar y vencer… Estamos perdiendo la Patria; mientras tú Nicolás, qué te comprometiste con Chávez a echarle pierna a la cosa, a proteger al Pueblo y la Patria, a llegar al punto de no retorno y avanzar hacia la independencia y soberanía definitiva, - tú - , solo te dedicaste a pedirnos y luego a exigirnos resistencia y mas resistencia y lealtad a ti y a tu proyecto hasta entregar todo, hasta ser arrasados y tragados por el capitalismo salvaje que permitiste… Todo para qué?

Hicimos un máximo sacrificio, prácticamente hemos perdido todo lo que alcanzamos con Chávez, han sido siete años de sufrimiento y resistencia…, para que ahora nos digas que la dolarización es una bendición y que nosotros el pueblo trabajador que durante trece años sostuvimos la Patria junto a Chávez, no somos capaces de producir y debes entregar las tierras y las empresas que Chávez rescató a la burguesía parasitaria, a los terratenientes y sus inconstitucionales monopolios. A los mismos que nos sometieron por incontables años, que nos marginaron y arremetieron siempre contra la Patria. Que conspiraron de mil formas contra el Comandante Chávez hasta provocar su muerte. Con esos vienes a reunirte mientras nos llamas traidores a nosotros y nosotras!

Hoy cuando estamos arruinados económica y moralmente, cuando las familias están rotas, tan rotos como los sueños y esperanzas, - tú - Nicolás, tu mismo nos exiges aceptar al Dólar criminal que ahora cariñosamente llamas Cositas verdes, tú aspiras que todos aceptemos sin chistar que se violente -nuestra - Constitución aceptando una ley antibloqueo entreguista y asesina del legado Chavista.

Tú, en quien Chávez depositó su confianza, eres el primero en renegar de sus líneas y enseñanzas al llamar gamelote a la crítica y autocrítica exigida y agradecida por Chávez; al dar la espalda al pueblo y a los factores de izquierda en vez consultarle e incorporarlos en las propuestas y los planes de gobierno.

Nicolás, obligaste una ANC, un parapeto en el cual no quise participar ni involucrarme porque no creo en procesos tan fundamentales para el país que no se consultan al pueblo, eso lo aprendí de Chávez “si nos equivocamos que nos equivoquemos con el pueblo”; por eso me opuse y hoy los exiguos resultados de la ANC me dan la razón.

Esa ANC a tu medida no hizo nada para evitar que la herencia de bienestar, estabilidad política y felicidad social que legó Chávez se desmoronara; ni por proteger la progresividad de los derechos conquistados, ni por ampliar la base legal para evitar que involucionara el Proyecto Bolivariano; no ejerció contraloría y mucho menos soberanía; más bien despojaron a la ANC de la majestad y supremacía soberana, donde los otroras constituyentistas hoy flamantes diputados y diputadas de la Asamblea Nacional inician todas sus intervenciones con un “siguiendo las instrucciones del presidente, comandante, hijo de Chávez, obrero y mártir proponemos tal o cual cosa…” En esos espacios nadie habla por instrucciones, peticiones u órdenes del Soberano pueblo venezolano, allí no tenemos voz, en la Asamblea Nacional Constituyente y en la Asamblea Nacional todo se resume en ” -lo que diga Nicolás”-.

Por ésto y mas convencida estoy de que todo ha sido un concierto de cosas entre actores del gobierno y de la oposición para preparar el actual momento retrógrada de conciliación con la burguesía revolucionaria y la rancia oligarquía interna y externa en detrimento de la clase popular.

Tejieron su plan: primero había que desmontar, desmovilizar y desmoralizar a la base popular chavista y, ustedes, la dirigencia en la que el Comandante delegó la tarea de construir la Patria socialista han hecho de todo para posicionar en el imaginario colectivo que el plan de Chávez no es posible, ya falta poco para que digan que Chávez era un utópico, quieren hacernos creer que el Comandante no tenía un plan, que era un ingenuo o un soñador y en el peor caso que fue un irresponsable que nos metió en un berenjenal y no calculó el impacto y la magnitud del ataque imperial.

En verdad creen que podrán convencernos a todos y todas de que Chávez no había pensado y planificado nuestra defensa y protección cuando el imperio agudizara su arremetida!

Ahora, cuando la mayoría estamos conscientes de que ambos bandos y sus bandidos promovieron y permitieron que destruyeran nuestra moneda, desmontaran las industrias básicas, desmantelaran las empresas recuperadas; abandonaran las tierras, sabotearan la producción agrícola campesina y también la organización popular autónoma, siendo -aquietada- la lucha laboral; ahora que nuestra economía se encuentra gravemente lesionada y la expectativa de resurgimiento es casi nula; cuando han persuadido a muchos venezolanos y venezolanas de que no hay otra vía posible sino la entrega al capital transnacional y la pérdida de nuestra soberanía e independencia; vienes -tú - y los tuyos a decirnos que por ahora los objetivos de Chávez son trasnochados y por lo tanto no serán alcanzados. Pretenden convencernos de que el Proyecto Bolivariano no es posible y para ello acuden a la desmoralización, despolitización y la desesperación popular.

Pues Nicolás y compañía; Guaidog, Leopoldo y compañía; vengo a decirles que el pueblo trabajador y compañía nos resteamos con Chávez, nos resteamos con el Proyecto Bolivariano y nos resteamos con la Patria Chavista; pusimos toda nuestra energía vital en la construcción del país que escogimos en 1999 al optar por la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela y no estamos dispuestos a entregar está conquista tan fundamental; el camino elegido es el del Plan de la Patria, el que tú Nicolás debiste seguir desde 2013, estamos seguros de que si le hubieses dado continuidad a ese Plan, si hubieses acatado todo, absolutamente todo lo que Chávez dijo que debía hacerse en el discurso Golpe de Timón (atacar la corrupción, revisar lo que no se había hecho, sancionar a los irresponsables y… COMUNA o nada), entonces hoy otro gallo cantaría; pero Nicolás optaste por ley antibloqueo en lugar de Plan de la Patria, así como cambiaste por Corredores tricolor las Comunas y formaste los Clap en vez de fortalecer los consejos comunales y la red de distribución de alimentos chavistas como los Mercales y Pdvales; resulta que tú Nicolás hace mucho tiempo dejaste de ocuparte en la construcción del socialismo Bolivariano del siglo XXI y en general por la construcción de ningún socialismo, ya no crees en eso.

No vengas a decir que no has podido, no comiences con la perorata de que ten han hecho de todo y que pobrecito tú y que eres un mártir o un héroe, vas de contradicción en contradicción.

Creo que si alguien se pone a contar las veces que has dicho que estás haciendo de tripas corazón tal vez concluya que has hecho más mención a esa frase que al Plan de la Patria. Te gusta victimizarte Nicolás.

En la Cuarta República, la izquierda y los dirigentes sociales fueron perseguidos, atormentados; inculpados y sentenciados. Todos fuimos condenados a no poder.

Nosotros, los marginados antes de Chávez, reivindicados con Chávez y ahora miserables con Maduro, somos las verdaderas víctimas, sufrimos tanto como aquellos y aquellas a quienes encerraron en un calabozo y torturaron cruelmente; nuestro día a día es un suplicio permanente al ver a nuestros y nuestras hijos, hijas nietos, nietas, bisnietos y bisnietas sin esperanzas, sin perspectiva de futuro; por ello a todos los hijos y nietos de la patria, públicamente les pido perdón, esto no era lo que soñé ni por lo que luché; al mismo tiempo les pido que peleen por una Patria verdadera, muchos de nosotros combatimos por la justicia social en los años de nuestra juventud, tuvimos un rato de sosiego con Chávez y hemos retomado las banderas de lucha y batalla pero son ustedes, los jóvenes, la levadura imprescindible para que despunte un horizonte de felicidad, libertad y prosperidad.

Ante este escenario desolador, nosotros y nosotras los revolucionarios y las revolucionarias estamos obligados y obligadas a organizarnos, a actuar, a elevar nuestra voz, a ejercer nuestro derecho a la protesta, a la participación y al protagonismo.

Tal vez seas de izquierda o no, pero antes sé un ciudadano o ciudadana, sé un humano o humana y por encima de todo sé Patriota y siéntete como yo obligada u obligado a intervenir, comprometerte e involucrarte para impulsar y garantizar el retorno al camino de Chávez contenido en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela porque fue en ese lapso en el que nuestras necesidades y aspiraciones eran satisfechas y teníamos esperanza y expectativa de estar mejor. No ha existido un período en la historia venezolana con iguales ni con parecidas condiciones a las del tiempo de Chávez.