Se inicia el gran encuentro por los 50 años del Consejo Territorial Indígena del Cauca

Desde los distintos territorios del departamento del Cauca, llenos de música alegre y con la dignidad intacta, llegaron nuestros compañeros y compañeras indígenas, a revivir la memoria de lucha y resistencia del Consejo Regional Indígena del Cauca CRIC, quien hoy en sus 50 soles, con la sabiduría y fuerza espiritual de la Luna Madre, ha despertado la semilla de la palabra digna de los pueblos que nacieron en su andar.



 

La lucha por la tierra nos llevó del silencio a la palabra

 

 
 

Desde los distintos territorios del departamento del Cauca, llenos de música alegre y con la dignidad intacta, llegaron nuestros compañeros y compañeras indígenas, a revivir la memoria de lucha y resistencia del Consejo Regional Indígena del Cauca CRIC, quien hoy en sus 50 soles, con la sabiduría y fuerza espiritual de la Luna Madre, ha despertado la semilla de la palabra digna de los pueblos que nacieron en su andar.

Este caminar ha estado cargado de sentires que reviven la lucha por la recuperación de nuestra Madre Tierra, un sueño de libertad que trazaron nuestros mayores y mayoras, y que está más vigente que nunca, ya que es ahí donde radica la memoria de quienes hoy nos cuentan la historia.

En este caminar digno de la gente que nace en la libertad de ser con el territorio y que conforma el Consejo Regional Indígena del Cauca, se hace necesario el reconocer el papel de la mujer, de su lucha y forma de organizarse, la cual nace y se hace fuerte desde el corazón de la tulpa, en la cocina, en los tejidos, en la huerta y hoy, gracias a esa fuerza, en los espacios de decisión política.

 

En el caminar político, el empoderamiento de la mujer es uno de los primeros pasos para llegar al sueño de quienes hicieron y son parte de la historia de nuestro proceso. Ellas se han ido apropiando de la palabra y llevan con orgullo la chonta adornada con los colores rojo y verde de esta organización; haciendo que sus pasos vayan marcando el camino y avancen con fuerza hacia la armonía y equilibrio del territorio.

 

En estos 50 soles también se hace necesario reconocer que esta lucha desde las compañeras no ha sido nada fácil, ya que existen diferentes factores dentro de nuestras comunidades, en donde no se legitima el rol de la mujer en los distintos escenarios de decisión, volviéndose así, una barrera dentro de sus proceso de formación política, al cual desde los distintos rincones de este gran territorio, se le viene haciendo frente.

Este proceso nace y se hace fuerte desde las mujeres que parieron a sus hijos e hijas con dolor, pero no con miedos y que desde el territorio continúan enseñando a conocer, defender y enamorarse de la vida.

 

Son ellas las que sembraron la palabra desde el corazón, la tejieron en alegría y con firmeza  reafirmaron en cada puntada la convicción de ser indígenas, convicción con la cual seguimos palpitando con fuerza en el territorio y con la cual seguiremos haciendo resistencia ante una estrategia de muerte que se ensaña cada vez más con el plan de vida que defendemos los pueblos.

Es importante mirar desde la familia cómo está la casa, es importante ir reconociendo cuales son esos dolores y alegrías que brotan desde adentro para ir avanzando. Sabemos que este camino es largo y nada fácil, por ello hoy más que nunca en estos 50 soles, tenemos que volver a la tierra, y más allá de hacer memoria, es hacer practico lo que soñaron nuestros mayores y mayoras cuando empezaron a trazar este camino de lucha que consta de diez puntos muy necesarios para seguir fortaleciendo los principios de unidad, tierra, cultura y autonomía.

 

 

Por ello la proyección de territorio, como primer punto de la plataforma política del CRIC nos debe apuntar a seguir posicionando nuestras voces y acciones en la defensa y liberación de nuestra Madre Tierra, nos debe a llevar a seguir fortaleciendo ese sentir que nos conecta con ella y nos libera y como dijeron este espacio de memoria, nos pasa del silencio a la palabra.

Por: Colectivos de comunicación Norte del Cauca – Cxhab Wala Kiwe

———————————————————————-

Entrega de la palabra desde el sentir espiritual de lo que es y seguirá siendo el CRIC

 
 

En presencia de la comunidad que acompaña desde el día 19 de febrero el acto de conmemoración de los 50 años de lucha en el territorio Sa’th Tama Kiwe, resguardo kwet Kina, sector el Pital; fueron entregados los símbolos de resistencia a las autoridades y comunidad por parte de los Kiwe Thegnas como un ejercicio legítimo de gobierno propio.

Este acto orientado desde la parte espiritual es un compromiso que se deberá continuar fortaleciendo en los territorios: Zona Sur – Pueblo Yanacona, Asociación Nasa Cxha-cxha Tierradentro, La Bota Caucana, Zona Centro, Pueblo Totoroez, Zona Oriente – COTAINDOC, Zona de Reasentamientos Nasa Üus, Zona Norte, Zona Sa’th Tama Kiwe y el pueblo Sia.

Las siguientes palabras sellaron el gran compromiso político y organizativo “Nuestro conocimiento y sabiduría que se ha transmitido, lo continuamos transmitiendo de generación en generación, cumpliendo con nuestra función dentro del proceso organizativo de armonizar la persona, la comunidad, la familia y el territorio en el marco de la plataforma de lucha y los principios de unidad, tierra, cultura y autonomía del CRIC. Nos sentimos contentos en participar de la conmemoración de los 50 años del Cric manifestando:

Fortalecer la coordinación y armonía entre las autoridades políticas y las autoridades espirituales con miras a consolidar el proceso organizativo y el gobierno propio de los 10 pueblos indígenas.

Consolidar el consejo de sabedores entre los que esta la construcción de la política de sabiduría ancestral en los espacios de dialogo de intercambio de conocimientos que se están desarrollando en cada territorio.

Un desarrollo jurídico en el marco de la Ley de origen, Ley natural, Derecho propio y Derecho mayor con nuestra orientación que garantice la protección de los saberes y conocimientos, los espacios de vida y la transformación de las plantas.

En el ejercicio de armonizar la persona, la familia, la comunidad y el territorio, este acto espiritual debe reconocerse y compensarse conllevando al buen vivir del sabedor ancestral.

Para finalizar el documento convoca a las familias y comunidad en general a continuar revitalizando las prácticas culturales que nos identifican como pueblos indígenas en la estrategia de pervivencia y resistencia hacia otros s 50 años más de lucha y resistencia”

Por: Comunicaciones Plan de Vida Nasa