Por la ética y la autonomía en la política

Circula un meme que señala que soy tío de Andrés Arauz y que como asesor de Yaku he recomendado el apoyo al correismo. UNA FALSEDAD SOBRE MI TRAYECTORIA Y MI POSICIÓN ÉTICO-POLÍTICA.
Andrés es hijo de una prima, pero una cosa es la familia y otra la política. Yo no puedo estar con el correismo, lo he combatido incluso cuando muchos lo veían como la salvación. Pero tampoco puedo estar con el candidato de los banqueros y la derecha oligárquica.



Por la ética y la autonomía en la política

Napoleón Saltos Galarza

Ecuador Today

Quito, 30 de marzo de 2021

 

El reto es construir una nueva democracia, comunitaria y directa, que ya está presente en las semillas de autonomía y desvinculación asumidas por la gente en medio del dolor de la pandemia y la crisis del desempleo y el empobrecimiento. Hay que insistir que nuestros sueños no caben en las urnas de una seudodemocracia controlada. La ética y la autonomía son el fundamento de una política alternativa.

Circula un meme que señala que soy tío de Andrés Arauz y que como asesor de Yaku he recomendado el apoyo al correismo.  UNA FALSEDAD SOBRE MI TRAYECTORIA Y MI POSICIÓN ÉTICO-POLÍTICA.

Andrés es hijo de una prima, pero una cosa es la familia y otra la política. Yo no puedo estar con el correismo, lo he combatido incluso cuando muchos lo veían como la salvación. Pero tampoco puedo estar con el candidato de los banqueros y la derecha oligárquica.

En las elecciones de 2007, no voté por Correa, sino por Luis Macas. Fuimos uno de los pocos grupos de los movimientos sociales que anulamos el voto en la Consulta de aprobación de la Constitución del 2008, pues denunciamos su visión autoritaria. Para la Asamblea Constituyente presentamos nuestra propia propuesta con las listas 50 de Polo Democrático. En las elecciones del 2017, respaldé la candidatura de Alberto Acosta. Y en la segunda vuelta, respaldé el voto nulo, pues no se podía caer en la trampa correismo-anticorreismo, para justificar el apoyo al candidato banquero.

He defendido la autonomía de los movimientos sociales ante los dos proyectos fracasados, el neoliberalismo oligárquico y el neoliberalismo progresista, pues, más allá de algunos matices coyunturales, comparten una matriz común ligada a los intereses financiero-rentistas del capitalismo local y transnacional. He denunciado la corrupción y el entreguismo de ambos lados, y he apoyado la construcción de una vía autónoma, más allá de las elecciones, del Estado y el mercado.

En las actuales elecciones respaldé las candidaturas del PK y de Yaku Pérez, porque recogen la energía de los levantamientos y, en particular, de Octubre19, expresan el acumulado histórico de las luchas del movimiento indígena, de las mujeres, de los movimientos sociales; la posibilidad de un camino propio, una tercera vía, una alternativa realizable ante la más grave crisis económica, política y ética que ha vivido el país en los últimos años. Pero aclaro, en el PK no tengo ninguna representación de dirigencia o asesoría. Creo en la capacidad de los jóvenes, de los nuevos dirigentes, mujeres y hombres, que han asumido la dirección y las decisiones; por ello he apoyado desde atrás, sin protagonismos o afanes de representación.

El fraude, en el que coincidieron correistas y lassistas, impidió el paso de Yaku a la segunda vuelta, y privó a la ciudadanía de la posibilidad de optar por un proyecto diferente. Pero, los resultados abren, por primera vez en los cuarenta años de democracia, la oportunidad de superar la trampa del mal menor, un enfrentamiento correismo-oligarquía que niega la presencia de una alternativa autónoma; la oportunidad de superar las cadenas de una seudodemocracia atrapada en los intereses de los nuevos y los antiguos ricos, en el dominio de los poderes imperiales. Respaldo el VOTO NULO,  la puerta para organizar la resistencia y un poder paralelo ante el gobierno que se instale, fruto de un proceso ilegítimo.

Las elecciones son un pasaje pantanoso por el que los movimientos  sociales debemos pasar, buscando no contaminarnos con la avalancha de mentiras, contracampañas, ofertas clientelares. El reto es construir una nueva democracia, comunitaria y directa, que ya está presente en las semillas de autonomía y desvinculación asumidas por la gente en medio del dolor de la pandemia y la crisis del desempleo y el empobrecimiento. Hay que insistir que nuestros sueños no caben en las urnas de una seudodemocracia controlada. La ética y la autonomía son el fundamento de una política alternativa.