Irlandeses que desean seguir siendo colonia inglesa retiran su apoyo al acuerdo de paz con los independentistas en Irlanda del Norte y salen a las calles a armar trifulca

Por cuarta noche consecutiva, este lunes se produjeron incidentes violentos en diferentes partes de Irlanda del Norte.
Los lealistas informaron al primer ministro británico, Boris Johnson, que retiraban de forma temporal su apoyo al acuerdo de paz, y hace tres semanas, el presidente del Consejo de Comunidades Lealistas, David Campbell, que representa a los paramilitares que defienden la permanencia de Irlanda del Norte en el Reino Unido, pidió la apertura de un diálogo con la UE e Irlanda para cambiar el Protocolo de Irlanda del Norte.



Crece la preocupación en Irlanda del Norte tras la cuarta noche consecutiva de violencia

Desde el comienzo de los altercados el pasado viernes, un total de 32 policías han resultado heridos

ABC

 

Por cuarta noche consecutiva, este lunes se produjeron incidentes violentos en diferentes partes de Irlanda del Norte, en los que los agentes de policía fueron atacados de nuevo con cócteles molotov, ladrillos, piedras y otros objetos por grupos de hasta 30 personas en los que, según fuentes oficiales, había varios adolescentes de tan solo 12 o 13 años. En Carrickfergus y Londonderry, los jóvenes formaron barricadas en la carretera Norte, mientras que en Derry le prendieron fuego a un vehículo, y ya son 32 los policías heridos en los disturbios, que empezaron el pasado viernes. Testigos y periodistas citados por la prensa local aseguran que aunque la peor parte de la violencia se produjo durante la noche, en horas de la tarde varias bandas de lealistas enmascarados marcharon por las calles de ciudades como Portadown, Ballymena y Markethill.

Parlamentarios, políticos y autoridades han condenado los hechos y pedido calma, pero de momento su llamado ha sido infructuoso. Ayer se sumaron a esta exigencia los obispos de la iglesia de Irlanda, que pidieron el «cese inmediato» de la violencia, así como la exdiputada del Partido Unionista Democrático (DUP) Emma Little-Pengelly, asesora especial de ministra principal, Arlene Foster, que pidió en su cuenta de Twitter a los manifestantes que expresen «de manera democrática» sus preocupaciones.

 

«Las emociones pueden ser intensas y las frustraciones profundas, pero las lesiones, el arresto y el enjuiciamiento arruinarán tu vida para siempre», escribió, dirigiéndose directamente a cada manifestante, y añadió: «Creemos en el estado de derecho: si rompes la ley habrá consecuencias legítimas. Vuelve a casa, mantente seguro y haz que tus preocupaciones sean escuchadas de manera democrática y no violenta». Doug Beattie, del Partido Unionista del Úlster, también condenó los hechos, que calificó de «vergonzosos» y aseveró en un programa de radio de la BBC que la violencia está orquestada por organizaciones criminales.

A principios de marzo, los lealistas informaron al primer ministro británico, Boris Johnson, que retiraban de forma temporal su apoyo al acuerdo de paz, y hace tres semanas, el presidente del Consejo de Comunidades Lealistas, David Campbell, que representa a los paramilitares que defienden la permanencia de Irlanda del Norte en el Reino Unido, pidió la apertura de un diálogo con la UE e Irlanda para cambiar el Protocolo de Irlanda del Norte que forma parte de los Acuerdos del Brexit ya que apuntó que viola los principios fundamentales del acuerdo de paz firmado en 1998. Ya entonces, Campbell advirtió que si Bruselas y Dublín no accedían a negociar un trato que cumpla con las garantías del Acuerdo de Viernes Santo, «estarán abriendo la casa de Pandora, que provocará importantes protestas, la caída del gobierno norirlandés y una grave crisis política».