Ecuador, Perú y Bolivia ante el “superdomingo” que renovará sus políticas internas

Para los pueblos siempre el interés va a estar en el desarrollo del protagonismo social, la autonomía comunitaria y los autogobiernos locales, por lo tanto nos interesa en Bolivia el crecimiento de la subjetividad aymaquechua, en Ecuador la expansión de la abstención y el voto nulo, símbolos del rechazo a la derecha y a la izquierda progresista, y en Perú la consolidación de las formas de vida comunitaria en la tradición campesina y en los autogobiernos indígenas.



Ecuador, Perú y Bolivia ante el “superdomingo” que renovará sus políticas internas

El domingo 11 de abril, Ecuador elige en segunda vuelta a su presidente, Perú va a la primera ronda presidencial y Bolivia pone a prueba al oficialismo del MAS en cuatro regiones

Este 11 de abril no será un domingo cualquiera en América Latina. Estamos ante un “superdomingo” electoral en el que Perú celebrará la primera vuelta de las presidenciales y legislativas, Ecuador elegirá un presidente en segunda vuelta y Bolivia decidirá también en balotaje el nombre de cuatro gobernadores departamentales. Hablamos de países contiguos en el mapa latinoamericano con algunos desafíos compartidos pero que atraviesan momentos muy distintos en sus políticas internas. 

Chile ha sido el único país que se ha descabalgado de esta gran fecha marcada en rojo. Este 11 de abril también tenía una cita para las elecciones municipales, de gobernadores y de los 155 constituyentes que redactarán una nueva Carta Magna para dejar atrás la Constitución de 1980, aprobada durante la dictadura militar de Augusto Pinochet. Pero debido a la situación epidemiológica, el proceso se ha aplazado desde el 10 y 11 de abril hasta el 15 y 16 de mayo y ha contado con amplio respaldo parlamentario.

El coronavirus en la región evoluciona de manera desigual, de la misma manera que avanza la vacunación a ritmos distintos —con Chile a la cabeza y no pocos problemas en Bolivia— y los positivos y las muertes por coronavirus registran comportamientos dispares. Sin embargo, no hay duda, marcará esta jornada electoral con el despliegue de medidas en cada uno de los países para evitar aglomeraciones y tratar de prevenir contagios. En el caso de las regionales de Bolivia, no se descarta un posible voto de castigo al partido en el Ejecutivo, algo que ya empezó a verse tras la primera vuelta.

Entendemos Latinoamérica como una región compuesta por una veintena de países que comparten lengua, aspectos culturales y algunas características socioeconómicas. Pero lo que realmente reina sobre todos los atributos comunes en este continente son los matices, tanto si hablamos de la pandemia, la desafección política o la salud de la democracia. Por eso, los politólogos Yanina Welp y Carlos Malamud advierten sobre los riesgos de generalizar ante tres procesos de votación y elecciones tan distintos en Perú, Ecuador y Bolivia. 

El investigador principal del Real Instituto Elcano y catedrático de Historia de América en la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) explica que se trata de “un cóctel muy diverso”. Malamud apunta además que no se pueden sacar conclusiones todavía; no al menos hasta que se conozcan los resultados de lo que pase el domingo porque lo que está en juego “no es el equilibrio continental sino el equilibrio de poderes en cada país”. 

¿Qué van a decidir Perú, Bolivia y Ecuador en las elecciones y votaciones de este domingo?

  • Perú busca en primera vuelta un presidente que pueda durar cinco años. 

En el último lustro este país ha sumado cuatro mandatarios y afronta la primera vuelta electoral de este domingo con el recuerdo fresco de la crisis política. 

  1.  La anterior legislatura terminó de estallar en noviembre de 2020 con la destitución en el Congreso del expresidente Martín Vizcarra, las protestas en las calles y la consiguiente renuncia del sustituto, Manuel Merino. Desde el 17 de noviembre pasado, gobierna por sucesión presidencial Francisco Sagasti. Ya en 2018 había renunciado por el escándalo político de Odebrecht el presidente resultante de las urnas en 2016, Pedro Pablo Kuczinsky.
  2. La incertidumbre impera a días y horas de las elecciones, y esta afirmación no es un lugar común, porque hay 18 candidatos en liza que los sondeos barajaron hasta el último momento sin identificar claros favoritos y ninguno supera el 15% de intención de voto, advierte Yanina Welp, investigadora del Albert Hirschman Centre on Democracy, coordinadora editorial de Agenda Pública y cofundadora de la Red de Politólogas. El voto está atomizado en un menú dominado por las opciones de derechas. 
  3. Las encuestadoras conceden posibilidades para llegar a segunda vuelta el 6 de junio, la única certeza en Perú, para: Yonhy Lescano (izquierda económica y derecha social), Hernando de Soto (derecha ultraliberal), Verónika Mendoza (izquierda moderada), George Forsyth (centro derecha), Keiko Fujimori (derecha autoritaria), Rafael López Aliaga (ultraderecha) y Pedro Castillo (extrema izquierda).
  • Ecuador saldrá de las urnas con un nuevo presidente.

Se trata de la segunda vuelta presidencial entre el centroderechista Guillermo Lasso y el candidato del correísmo, Andrés Arauz.

  1. Los resultados de la primera vuelta presidencial del 7 de febrero dejaron un tenso clima político en Ecuador. Arauz ganó con un 32,72% de los votos, dejando atrás a Lasso (19,74%) y, pisándole los talones a tan solo 0,35 puntos, el candidato indígena Yaku Pérez (19,39%). 
  2. El largo recuento y lo apretado del resultado derivó en acusaciones de fraude electoral vertidas por Pérez, quien no aceptó los resultados y ha puesto sobre la mesa, de acuerdo con Welp, un “conflicto de legitimidad”. 
  3. Según los sondeos más recientes, Lasso ha recortado distancias con respecto a Arauz y la contienda electoral está muy disputada.
  4. Pero la clave ahora es saber hacia qué candidato migrará el voto aglutinado por Pérez, distribuido en la Amazonía, en parte de la Sierra y hasta en la Costa. “Hay un sector importante del país que no votó a ninguno de los candidatos”, puntualiza la politóloga, lo que puede evidenciar cierto desencanto. Sobre todo en un país en el que durante los años del correísmo y de cierta bonanza económica se logró unir al territorio alrededor de un proyecto político que ahora aspira a abrir una etapa nueva con Arauz tras el vuelco ideológico de Lenín Moreno.
  • Bolivia pasa examen a la relevancia del partido de Morales en las regiones

La segunda vuelta de las elecciones regionales se libran en cuatro departamentos: La Paz, Chuquisaca, Pando y Tarija. La clave será determinar si el oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) ha perdido terreno en el total de regiones.

  • En La Paz, en Pando y en Tarija, el MAS se impuso sin lograr la mayoría pero todos los focos se depositan en el departamento de La Paz, donde se encuentra la ciudad homónima que sirve como centro de los poderes Ejecutivo y Legislativo. La sede judicial se encuentra en la considerada capital histórica boliviana, Sucre.
  • La preocupación del oficialismo del MAS con la gobernación paceña es que su candidato, Franklin Flores, pueda ser desbancado por Santos Quispe, del movimiento Jallalla. 
  • Precisamente la agrupación Jallalla, que es disidente del oficialismo, ya le arrebató en primera vuelta con la expresidenta del Senado expulsada del MAS, Eva Copa, al frente la alcaldía de El Alto, localidad ubicada en La Paz y considerada un bastión político del expresidente Morales.
  • En la primera vuelta, los bolivianos eligieron gobernadores para cinco de los nueve departamentos. Tres de ellos tendrán gobernadores del MAS. Aparte, de las 330 alcaldías, el MAS logró imponerse en 240 pero las principales ciudades del país no se encuentran entre ellas.

Polarización, desencanto y participación

Si buscamos elementos comunes en las elecciones y convocatorias en Perú, Ecuador y Bolivia: la polarización y el desencanto estarían a la cabeza. “La desafección con la democracia es algo que en Latinoamérica viene desde algunos años atrás. Fue lo que encendió la chispa de las protestas de 2019 y se ha ido acentuando con la pandemia, por las consecuencias sociales y económicas, que son brutales”, expone Malamud. Bolivia puede estar en una etapa distinta, pues el MAS, aunque pueda estar sufriendo lo que parece una pérdida de influencia, está consolidado como el partido con más presencia en todo el país, algo que no se puede identificar ni en Perú ni en Ecuador. 

El hecho de celebrar elecciones en medio de una pandemia no acaba de ser tan determinante en la participación democrática como la falta de “entusiasmo o ilusión”, apunta Yanina Welp. En Perú, por ejemplo, añade, “los datos son alucinantes: un tercio no sabe a quién votar y el 20% va a anular el voto. Es decir, la mitad de la población no sabe a quién votar o no cree en la política”. El voto en Perú es obligatorio y quien no lo ejerza, se expone a una multa. En las anteriores presidenciales de 2016, el porcentaje de participación fue del 81,80% en primera vuelta y del 80,09% en la segunda. Sin embargo, en las parlamentarias de enero de 2020, sin pandemia de por medio, se registró un 25% de ausentismo. [Pronóstiker, si has llegado hasta aquí, tendrás la información necesaria para acertar]

Por otro lado, según el pronóstico de Malamud, “dado lo que está en juego en Ecuador, no habrá voto en blanco”, por mucha abstención que puedan suscitar unos comicios polarizados con seguidores de Yaku Pérez tentados por el voto en blanco. Gane quien gane en Ecuador, que será el resultado más definitivo de la jornada, no tendrá fácil hacer políticas económicas, sanitarias y sociales en medio de la polarización que ha avivado la pandemia.