Ven que la purga de Evo apunta a garantizar su nueva candidatura
Página Siete
Analistas y disidentes creen que el exmandatario, en medio de una crisis interna que se profundiza en el MAS, prepara el terreno para volver al poder.
A “vista y paciencia” del presidente Luis Arce, Evo Morales anunció una purga interna y sostuvo que hay “antievistas” dentro del gobierno de su heredero político. Analistas y disidentes creen que el exmandatario, en medio de una crisis interna que se profundiza en el MAS, prepara el terreno para volver al poder.
Desde el partido azul, en cambio, hay quienes defienden la postura de Morales y argumentan que sus dichos deben tomarse como una “reflexión” al Ejecutivo.
“¿Cómo es posible que algunas autoridades nuestras, que están dentro del gobierno, estén hablando contra Evo Morales?, ¿qué daño les he hecho?”, cuestionó el domingo Morales en una entrevista con Radio Kawsachun Coca.
El objetivo de Morales es llevar adelante una “ofensiva para retomar el poder”, según la visión del analista Gregorio Lanza, quien advierte que el expresidente “avanza en la retoma del control del gobierno y en ese sentido ha declarado la guerra abierta”.“Las declaraciones, en el sentido de que existen antievistas en el propio gobierno, ha nombrado viceministros, no se animó a hablar del vicepresidente, pero está apuntando claramente al vicepresidente Choquehuanca”, afirmó Lanza.
El exsenador y disidente del partido azul Omar Aguilar cree que Morales tiene dos objetivos. El primero que mencionó es: purgar a todos los militantes que cuestionen su liderazgo, para después convocar a congreso, en el que ninguno de los presentes pueda objetar su liderazgo y así ser ratificado como presidente del MAS con un control absoluto.
El segundo es que una vez que se logre aquello, lo nombren como candidato a la presidencia. “Evo Morales está en la línea de despejar a cuanto candidato de la izquierda exista rumbo al 2025, porque la teoría es: el único candidato de la izquierda debe ser Evo Morales”.
En ese escenario, Aguilar ve a Arce bajo la sombra del exmandatario. “Hay mucha gente que dice que Morales todavía es el presidente. Luis Arce lamentablemente aún no estampa su marca registrada como presidente. Esperamos que en los próximos meses él pueda asimilar que es el primer mandatario del país”.
Para el analista y jurista Paúl Coca, el exjefe de Estado busca no sólo el control de su partido, sino también del gobierno, a “vista y paciencia” del presidente Arce.
“Todo esto lo está permitiendo el presidente Luis Arce Catacora. Él está dejando que Evo Morales sea el conductor del partido y que, paso a paso, se esté adueñando de la conducción del gobierno, siendo que el presidente es Arce Catacora y no Morales”, afirmó Coca.
Recordó como ejemplo el hecho que hace poco Morales anunció el pago del doble aguinaldo y hasta la fecha ni el presidente Arce y mucho menos el Ministro de Economía salieron a la luz pública a contradecir esas declaraciones.
El diputado del MAS Renán Cabezas, consultado si Morales con su anuncio no daña al propio gobierno de Arce, afirmó que sus dichos se deben tomar como una reflexión.
“No lo debemos tomar como un daño, lo debemos tomar como una reflexión. Es bueno que nosotros reflexionemos en algunos aspectos, no está bien que algunos compañeros nuestros (en sus declaraciones) dan lugar a interpretaciones que no reflejan lo que ellos han dicho”, afirmó Cabezas.
Para el senador del MAS y representante de los interculturales Félix Ajpi, quienes deben definir una “purga” en el partido azul son las organizaciones sociales del partido azul, bajo el paraguas del llamado Pacto de Unidad.
“El Instrumento Por la Soberanía de los Pueblos no es propiedad de una persona (…). Si va haber cambios o purgas, eso se decidirá en los congresos departamentales y el nacional (…). Ahora purga, no entiendo la palabra a qué se refiere, como estará definiendo eso, hay que preguntarle al señor Evo Morales qué entiende por purga”, afirmó Ajpi a este medio.
El expresidente de la Cámara de Diputados Víctor Borda afirmó que Morales cuando habla de los “antievistas” se refiere a funcionarios o dirigentes de organizaciones sociales que no apoyan el aporte de Morales cuando era presidente y no responden al principio ideológico y político del MAS.
“Es gente que tiene como objetivo destruir al MAS y lamentablemente se han colado dentro las organizaciones sociales y están intentado desorientar a las bases generando animadversión hacia nuestro jefe nacional y eso no puede permitirse (…) hay que purgar a esa gente”, sostuvo Borda.
El exsenador Aguilar afirmó que “el MAS tiene que reconocer que hay una crisis política profunda”, y que cualquier decisión que tome Morales “es riesgosa” y va contra la estabilidad del partido. Es decir que esa crisis “cada día se va profundizando más”.
El MAS como partido y el MAS como gobierno son dos cosas totalmente diferentes, pero resulta que nosotros estamos viendo que Evo Morales está reuniendo las dos características con un nivel grande de politización y no solo del gobierno hacia afuera, sino del gobierno hacia adentro, y todo esto lo está permitiendo el presidente Arce.
Luis Arce está dejando que Evo Morales sea el conductor del partido y que paso a paso se esté adueñando de la conducción del gobierno, siendo que el presidente es Arce Catacora, no Evo Morales.
En esto, hay tres objetivos: el primero es afianzarse dentro del MAS y dentro del gobierno. El segundo, Evo Morales quiere sentar mano dura dentro del MAS para aquellas personas que lo critiquen o que se animen a realizar una crítica por más constructiva que sea, no la realicen de manera que todo sea tal como era en el MAS antes de octubre de 2019, cuando renunció. El tercer objetivo es que una vez teniendo una posición fuerte en el gobierno y un control del MAS, ser el candidato indiscutible dentro del MAS.
Mientras el presidente Arce se está ocupando más de hacer política y poco trabajo efectivo, y prácticamente Arce está en la misma sintonía que Evo Morales, sigue en los mismos pasos y no quiere gobernar sin apartarse de Evo Morales, no quiere estar lejos de él, quiere congraciarse en todo aspecto con Evo Morales y no quiere asumir el rol de que Evo Morales ya cumplió su ciclo.