Murray Bookchin (Vida y obra). Padre del confederalismo democrático que relaciona horizontalmente las autonomías comunitarias

Es autor de una extensa colección de libros sobre historia, política, filosofía, asuntos urbanísticos y ecología. Ideológicamente Bookchin evolucionó desde un marxismo tradicional hacia el socialismo libertario, en la tradición anarquista de Kropotkin.



Murray Bookchin (1921-2006)

Murray Bookchin (Vida y obra)

Murray Bookchin (1921-2006) nacio de 14 de enero de 1921 en Nueva York, (Estados Unidos) y falleció el 30 de julio de 2006 en Burlington, Vermont, (Estados Unidos).

Historiador, profesor universitario, investigador, ideólogo y activista ecologista estadounidense, fundador de la ecología social (ecoanarquismo) y uno de los pioneros del movimiento ecologista.

Es autor de una extensa colección de libros sobre historia, política, filosofía, asuntos urbanísticos y ecología. Ideológicamente Bookchin evolucionó desde un marxismo tradicional hacia el socialismo libertario, en la tradición anarquista de Kropotkin.

Biografía.

Nació en Nueva York, (Estados Unidos) en 1921, de padres inmigrantes rusos que habían participado en el movimiento revolucionario de Rusia durante la época de los zares. Muy pronto, en los años treinta entró en el movimiento juvenil comunista, pero al final de esa década se mostró decepcionado por su carácter autoritario. Durante los años de la guerra civil española se involucró en el movimiento neoyorquino de apoyo a España (Support Spain), era demasiado joven para participar directamente, aunque algunos de sus amigos mayores murieron en el frente de Madrid, Comunidad de Madrid, (España). Permaneció al lado de los comunistas hasta el pacto entre Stalin y Hitler en 1939, fecha en la que fue expulsado por desviacionismo trotskista.

Se incorporó al movimiento obrero y participó activamente en la organización de sindicatos al norte del Estado de Nueva Jersey, (Estados Unidos), cuando trabajaba en una fundición, para el “Congreso de Organizaciones Industriales” (CIO). Colaborando activamente con el movimiento Trotskista americano, durante los años cuarenta trabajó en la industria de fabricación de automóviles, militando durante diez años en la “United Auto Workers” (AUW), organización netamente libertaria antes de que Walter Reuther se convirtiera en su presidente. Después de participar en la gran huelga de la General Motors en 1948, empieza en esa época a cuestionarse todas sus concepciones tradicionales acerca del papel hegemónico de la clase trabajadora industrial, escribiendo en años posteriores extensamente sobre el tema.

Durante esa época se convirtió en socialista libertario, colaborando estrechamente con exiliados alemanes en Nueva York, (Estados Unidos) que habían abandonado el comunismo y se desplazaban hacia una perspectiva anarquista (Internationalen Kommunisten Deutschlands). Muchos de sus artículos de los primeros años se publicaron en “Dinge der Zeit”, así como en su publicación hermana en lengua inglesa “Comtemporary Issues”. Su primer libro: “The Problem of Chemicals in Food”, se publicó en Alemania. Fue uno de los primeros activistas políticos en escribir sobre ecología, tanto en los EEUU como en la Alemania Federal. Sus escritos contribuyeron a reformar la legislación alemana sobre farmacología y alimentación.

En los años sesenta se involucró en los movimientos contraculturales y de Nueva Izquierda. Su primer libro americano: “Our Synthetic Enviroment” se publicó en 1962. Luego escribió “Crisis in our Cities,” 1965. Una colección titulada: “El anarquismo después de la escasez,” 1971, comprendía ensayos tan innovadores como “Ecologist and Revolutionary thougt” (1964) o “Towards a Liberatory Technology” (1965) que adelantaban la importancia crucial del tema ecológico y de las energías alternativas para los movimientos progresistas de cualquier signo. Hacia el final de los sesenta, en los EEUU y Gran Bretaña circularon por lo menos 100.000 copias de su crítica al marxismo tradicional: “Listen, Marxist!” (1969), influenciando profundamente al movimiento de la Nueva Izquierda americana.

En los últimos años de la década dio clases en la Universidad Alternativa de Nueva York, (Estados Unidos).

En 1974 participó en la fundación del Instituto para la “Ecología Social de Vermont, (Estados Unidos), y asumió su dirección, adquiriendo reconocimiento internacional por sus cursos sobre ecofilosofía, teoría social, y tecnologías alternativas.

Empezó igualmente a dar clases en el “Rampo College de Nueva Jersey, (Estados Unidos)”, convirtiéndose en catedrático de teoría social, cargo del que se retiraría en 1983 como profesor emérito.

Sus últimos años vivía semi retirado en Burlington, Vermont, (Estados Unidos), donde impartía dos cursos básicos cada verano en el “Instituto para la Ecología Social” y daba conferencias ocasionales en EEUU y en Europa. Era consultor editorial de “Anarchist Studies y de Society and Nature”. Junto con su compañera Janet Biehl, y otros, publicó más de treinta números de la revista teórica “Green Perspectives”.

Una de sus propuestas más recientes fue lo que llamó municipalismo libertario, basada en la recuperación de las asambleas populares y la democracia directa a los niveles municipal, de vecindad y de barrio. Para evitar que ello conduzca a un provincianismo en las ciudades propone un confederalismo cívico, demandando también una economía municipalizada, por oposición al sistema capitalista y a la economía estatizada marxista.

Murray Bookchin falleció el 30 de julio de 2006 en su casa, al padecer de un infarto. Contaba 85 años.1 

Ecología social.

La integración de las tradiciones descentralistas, no jerárquicas y populares con la ecología, desde la perspectiva filosófica libertaria que realiza Bookchin en los años ’50 y ’60 del siglo XX, época en la que lo escribió y divulgó, demasiado innovadora en aquellos tiempos, ha penetrado posteriormente en la conciencia de nuestros tiempos, en parte también a los escritos de Fritz Schumacher y muchas ecofeministas que han recogido las esencias de la idea pedagógica y social de los escritos e investigaciones de Bookchin.

Obras literarias.

Escribió diversos libros, entre los cuales se encuentran:

  • (1962). Our Synthetic Environment. New York: Knopf (published under the pseudonymn ‘Lewis Herber).
  • (1964). “Ecology and Revolutionary Thought”. New Directions in Libertarian Thought. September.
  • (1965). “Toward a Liberatory Technology.” Comment.
  • (1970). Ecology and revolutionary thought, with the ecology action east manifesto and Toward and ecological solution. New York: Times Change Press.
  • (1965). Crisis in Our Cities. Englewood Cliffs, NJ: Prentice Hall.
  • (1969). “Listen, Marxist!” Anarchos brochure.
  • (1970). Ecology and Revolutionary Thought, with the Ecology Action East Manifesto and Toward an Ecological Solution. New York: Times Change Press.
  • (1971). Post-Scarcity Anarchism. Berkeley: Ramparts Press.
  • (1972). “On Spontaneity and Organization.” Anarchos.
  • (1974). “Toward an Ecological Society.” Roots.
  • (1974). “Reflections on Spanish Anarchism. Our Generation.
  • (1974). The limits of the city. New York: Harper & Row.
  • (1975). “Energy, Ecotechnology, and Ecology.” Liberation.
  • (1977). The Spanish Anarchists. New York: Harper and Row.
  • (1978). “Beyond Neo-Marxism”. Telos. no. 36, pp. 5-28.
  • (1979). “Marxism as Bourgeois Sociology.” Comment.
  • (1979). “Self-Magement and the New Technology.” Telos.
  • (1980, 1985). “Murray Bookchin reads Time”. Public Access TV: Paper Tiger Television. (1 videocassette)
  • (1980). “An Open Letter to the Ecology Movement.” Comment.
  • (1980). Toward an Ecological Society. Montreal: Black Rose Books.
  • (1982). The Ecology of Freedom: The Emergence and Dissolution of Hierarchy. Palo Alto, CA: Cheshire Books.
  • (1983). “Sociobiology or Social Ecology.” Harbinger.
  • (1983). “The Last Chance: An Appeal for Social and Ecological Sanity.” Comment.
  • (1984) Re-Enchanting Humanity: A Defense of the Human Spirit against Antihumanism, Mysticism and Primitivism. New York: Black Rose Books,
  • (1984). “Theses on Libertarian Municipalism.” Our Generation.
  • (1984). “What Is Radical Social Ecology?” Harbinger.
  • (1985). “Radicalizing democracy: a timely interview with Murray Bookchin conducted by the editors of Kick It Over Magazine.” Toronto, Ont.: Northern Lights Press.
  • (1986). Modern Crisis. Philadelphia: New Society.
  • (1986). “Radicalizing democracy: a timely interview with Murray Bookchin conducted by the editors of Kick It Over Magazine”. Toronto, Ontario: Northern Lights Press.
  • (1987). Philosophy of Social Ecology. New York: Black Rose Books.
  • (1987). The Rise of Urbanization and the Decline of Citizenship. San Francisco: Sierra Club.
  • (1987). “Social Ecology versus ‘Deep Ecology’”. Green Perspectives. 4-5.
  • (1987). “Thinking Ecologically: a Dialectical Approach”, Our Generation. 18, 2.
  • (1989). “New social movements: the anarchic dimension”.in For Anarchism: History, Theory, and Practice. Goodway, D., ed. London: and New York: Routledge. pp. 259-274.
  • (1990). Remaking Society. Montreal: Black Rose Books.
  • (1990). The Philosophy of Social Ecology: Essays on Dialectical Naturalism. Montreal: Black Rose Books.
  • (1992). Urbanization without Cities: The Rise and Decline of Citizenship. Montreal: Black Rose Press.
  • (1993). “What is Social Ecology?”, Environmental Philosophy: From Animal Rights to Radical Ecology, Zimmerman, M.E. (ed.). Englewood Cliffs, NJ: Prentice Hall.
  • (1993). “The Ghost of Anarcho-syndicalism”. Anarchist Studies.Vol. 1, Number 1.
  • (1993). “Visions of a new society, an interview with Murray Bookchin”.St. Albans, Vt.: Turning the Tide. (2 videocassettes).
  • (1993). Deep Ecology & Anarchism: A Polemic. London: FreedomPress.
  • (1993). Which Way for the Ecology Movement? Edinburgh and San Francisco: A.K. Press.
  • (1994). To Remember Spain: The Anarchist and Syndicalist Revolution of 1936. Edinburgh and San Francisco: A.K. Press.
  • (1994). “The sixties myths, realities, lessons”. Wilton, NH: Turning the Tide. (2 videocassettes)
  • (1995). From Urbanization to Cities : Toward a New Politics of Citizenship. London; New York: Cassell.
  • (1995). Re-enchanting humanity: a defense of the human spirit against antihumanism, misanthropy, mysticism, and primitivism. London; New York: Cassell.
  • (1995). Social Anarchism or Lifestyle Anarchism: Unbridgeable Chasm. Edinburgh and San Francisco: A.K. Press.
  • (1996). The Third Revolution, vol. 1. London: Cassell.
  • (1998). The Third Revolution, vol. 2. London: Cassell.
  • (1999). Anarchism, Marxism, and the Future of the Left: Interviews and Essays, 1993-1998. Edinburgh and San Francisco: A.K. Press.
  • (2002). “The Communalist Project.” Harbinger; Communalism.
  • (2004). The Third Revolution, vol. 3. London: Continuum.
  • (2005). The Third Revolution, vol. 4. London: Continuum. Bookchin, M. and Foreman, D. (1991). Defending the Earth: A Dialog Between Murray Bookchin and Dave Foreman.

Bibliografía.

Véase también

Notas

  1.  Noticia
  2.  Bibliografía

Enlaces externos

Murray Bookchin y la ecología social.

Bookchin es uno de los grandes pensadores libertarios contemporáneos. Su visión de la ecología social, que vincula estrechamente el mundo social y político con la naturaleza, cuestionando las relaciones jerárquicas al considerarlas como una grave amenaza para la dinámica integración de la diversidad, merece ser tenida en cuenta ante los grandes problemas que afronta la humanidad.

Murray Bookchin nació en Nueva York, (Estados Unidos) en 1921 y estuvo vinculado desde muy joven a los movimientos sociales y sindicales; desde un temprano marxismo, acabo en un socialista libertario que hay que considerar simplemente como un tipo de anarquismo.

En los años 30 forma parte del movimiento comunista, pero pronto le decepcionará su naturaleza autoritaria; aunque era demasiado joven para participar en la Guerra Civil Española, se involucró en las ayudas al bando republicano en su ciudad natal. Después de haber pasado por el movimiento trotskista, ya a finales de la década de los 40 empieza a cuestionar la visión marxista del papel hegemónico  del proletariado en la revolución. Se acercará inevitablemente al anarquismo al igual que muchos otro exiliados en Nueva York, (Estados Unidos) con los que colaboró. La originalidad de Bookchin estriba en haber prestado atención al medio ambiente y vincularlo estrechamente con lo político; sus aportaciones le convierten en uno de los autores más importante de la llamada ecología social.

En 1962, publica “Our Synthetic Enviroment” donde realiza una fuerte denuncia de la crisis ambiental; una visión crítica del fenómeno urbano aparece en su obra de 1965 “Crisis in our Cities.” En definitiva, Bookchin realiza una crítica feroz sobre el capitalismo de su tiempo, y también sobre la izquierda autoritaria. En su texto “Nosotros los verdes, nosotros los anarquistas”, también de 1965, puede verse claramente su visión anarquista, ya que considera que una sociedad libertaria es una premisa imprescindible para llevar a la práctica los principios ecológicos. Por otra parte, su visión del urbanismo triunfante, en el que se muestra a nivel territorial y social la jerarquización y el control sobre las personas, le hará desarrollar su teoría del Municipalismo libertario, que se basa en formas horizontales de asamblearismo y democracia directa. En otros escritos, Bookchin presentará también ideas muy originales sobre el uso de las tecnologías, el poder y el pensamiento revolucionario en general. Su obra ha sido traducida a multitud de idiomas siendo un autor de gran influencia.

De 1982 es una de sus obras más importantes, “La ecología de la libertad”, en la que se vincula estrechamente la explotación del hombre sobre el hombre con la que éste realiza sobre la naturaleza. De ello se deduce que la libertad y el igualitarismo social no tienen una única dimensión y hay que abordarlos también desde la perspectiva ecológica. Puede decirse que Bookchin recoge la línea libertaria inaugurada con Kropotkin al observar que en la naturaleza predomina la cooperación y las formas de comportamiento horizontal. Lo más interesante de este autor es tal vez la vinculación de lo social y político con preocupaciones medioambientales, así como con las relaciones jerarquizadas del poder, algo que le aleja de otras visiones ecologistas que se dicen radicales y que se quedan en aspectos más individualistas.

La ecología social de Bookchin renuncia a toda expoliación de los recursos naturales y cuestiona el dogma de que el ser humano debe dominar la naturaleza. Se demanda la comprensión del papel que debe tener la humanidad dentro del mundo natural y, en concreto, el carácter, la forma y la estructura de las relaciones del hombre con el resto de especies y con los substratos inorgánicos del entorno biológico. No se realiza de esta manera una división entre la humanidad y el mundo natural, ya que puede observarse que ello ha conducido a un enorme desequilibrio. El hombre ha evolucionado hasta desarrollar un mundo social propio que interactúa de forma recíproca con la naturaleza mediante fases transformadores muy complejas; desde este punto de vista, es tan importante hablar de ecología social como de ecología natural. Cuando Bookchin habla de una relación holística no se está refiriendo a la detestable connotación mística que tantas veces se le da al término, sino a esa interdependencia mutua entra una comunidad social y el mundo natural con el fin de descubrir la formas y modelos de interrelación de aquella. Tampoco posee este autor ninguna visión teológica, de búsqueda una finalidad en la historia de la humanidad, ya que afirma de veras la capacidad de la voluntad humana para conducir el curso de los acontecimientos sociales. Su visión ecológica social se basa en una dinámica unidad de las diversidades, para nada simple y homogénea, sino compleja y variada; la integridad de un ecosistema, al igual que la de la comunidad libertaria, no depende de la uniformidad, sino de la diversidad.

El papel emancipador de la ecología social queda de manifiesto en su propuesta desafiante ante toda jerarquía convencional. De nuevo podemos ver en Bookchin la herencia libertaria cuando observa a cada especie como parte de una red en interdependencia con el resto; se descubren aquí los estudios que revelan el mutualismo simbiótico como uno de los grandes factores protectores de la estabilidad ecológica y la evolución orgánica. Hay que hablar, en el mundo natural y en el social, de una estabilidad dinámica basada en un todo integrado que niega toda relación jerárquica. Es más, se considera que la jerarquización es una amenaza para la existencia de la vida social y se denuncia igualmente cuando agrede la integridad de la naturaleza orgánica. En el terreno político, incluso el término democracia ha sido “desnaturalizado” hasta conseguir desplazar su verdadera condición participativa y sustituirla por la representativa; si en los orígenes, la democracia significaba el autogobierno por parte del pueblo, con el tiempo acabó convertida en la elección de una élite para que ejerza la función gubernamental. Estos planteamientos de Bookchin, realizados décadas atrás, son de total actualidad; la crisis de todo tipo invade la civilización y es necesario emplear la imaginación para seguir prestando atención al pensamiento utópico y cuestionar los dogmas convencionales.

Enlaces relacionados:
Entrada de Wikipedia sobre Murray Bookchin.
“¡Escucha, marxista!”.
“La perspectiva libertaria de la ecología social”.
Otros textos de Bookchin.

Capi Vidal 

http://reflexionesdesdeanarres.blogspot.com.es/

 

Una breve biografía de Murray Bookchin

por Janet Biehl

Traducion por: Pablo Abufom Silva
pabloabufom-at-gmail.com

Murray Bookchin nació en la ciudad de Nueva York, (Estados Unidos) el 14 de Enero de 1921, de padres inmigrantes rusos judíos que habían sido activos en el movimiento revolucionario ruso. En 1930 ingresó al movimiento juvenil comunista, primero en los Pioneros y luego en la Liga Juvenil Comunista, donde trabajó como director de educación de su grupo. Pero en 1935 lo desilusionó el giro del Comunismo internacional, en manos de Stalin, hacia la política del “Frente Popular”, una línea partidista menos militante. Profundamente involucrado en la organización de actividades vinculadas a la Guerra Civil Española (era demasiado joven para participar directamente), se mantuvo junto a los comunistas hasta el pacto entre Stalin y Hitler en septiembre de 1939, cuando fue expulsado por “desviaciones Trostkistas-anarquistas”. Luego, se alineó con los Trotskistas estadounidenses. Después de graduarse de la secundaria, encontró trabajo en una fundición al norte de Nueva Jersey, (Estados Unidos) ingresando así al movimiento obrero. En la fundición, donde trabajó por cuatro años, se volvió activo en la organización de los trabajadores para el “Congress of Industrial Organizations” (CIO).

Sirvió en el Ejército de los EE.UU. a mediados de la década del 40, y regresó a su país para emplearse en la industria automotriz. Se involucró profundamente en la “United Auto Workers “(UAW), que en ese momento era un gremio altamente libertario. Ideológicamente, se decepcionó cada vez más del autoritarismo trotskista tradicionalmente bolchevique. Después de participar en la gran huelga de la General Motors en 1948, comenzó a cuestionar todas sus nociones tradicionales sobre el rol “hegemónico” o “de vanguardia” de la clase obrera industrial. En vez de dar un giro hacia la derecha, como lo hicieron muchos comunistas desilusionados de su generación, buscó formas de construir un comunismo no-autoritario, en efecto un comunismo libertario.

Durante los años 50, considerándose a sí mismo como Murray Bookchin nació en Nueva York, (Estados Unidos) en 1921 y estuvo vinculado desde muy joven a los movimientos sociales y sindicales; desde un temprano marxismo, acabo en un socialista libertario, que hay que considerar simplemente como un tipo de anarquismo. Trabajó de cerca con un grupo de marxistas alemanas disidentes en Nueva York, (Estados Unidos) que sostenían una perspectiva similar (International Kommunisten Deutschlands o IKD). Muchos de sus primeros artículos fueron publicados por el periódico en alemán de este grupo, “Dinge der Zeit”, así como en su publicación hermana en inglés, “Contemporary Issues”, bajo los seudónimos M.S. Shiloh, Lewis Herber, Robert Keller y Harry Ludd. Su primer libro, “Lebensgefährliche Lebensmittel” (1955), publicado en Alemania Occidental en colaboración con Gotz Ohly, se basó en un artículo muy largo titulado “El problema de los químicos en el alimento”, que había sido publicado en “Contemporary Issues” en 1952. Aquí exploró los posibles efectos de los preservantes y pesticidas sobre la salud humana. Tales ideas, que desde entonces han formado parte de la conciencia general de nuestro tiempo, eran tremendamente originales a principios y finales de los 60.

En los primeros años de la década de los 60, Bookchin escribió dos importantes libros periodísticos, que pretendían alcanzar un püblico general, y que alarmaban sobre una serie de males ambientales. En “Our Synthetic Environment” (bajo el seudónimo Lewis Herber), publicado en 1962 (adelantándose a Silent Spring de Rachel Carson es casi medio año), analizó la literatura científica sobre pesticidas, aditivos alimenticios y rayos X como fuentes de enfermedades humanas, incluyendo el cáncer. En “Crisis in Our Cities” (1965) exploró los problemas ambientales específicos de las áreas urbanas estadounidenses.

En esta época, la evolución política de Bookchin lo llevó a la tradición anarquista de Pedro Kropotkin, una que Bookchin quiso convertir en hogar para sus ideas antijerárquicas y de descentralización, y en un marco político en el cual pudiera trabajar. A medida que la Nueva Izquierda y los movimientos contraculturales surgían en los años 60, Bookchin popularizó sus ideas libertarias y ecológicas en varios ensayos innovadores y ampliamente influyentes. “Ecología y pensamiento revolucionario” (1964) fue la primera obra que llamaba a una ecología política radical; allí intentó unir ecología y anarquismo, fundando lo que denominó Ecología Social. En “Hacia una tecnología liberadora” (1965) hace un llamado a una nueva ecotécnica usando fuentes de energía alternativas y renovables y microtecnologías que conformarían la infraestructura de una sociedad emancipadora. En “¡Escucha, Marxista!” (1969) intentó advertir a los SDS (Students for a Democratic Society) de la inminente toma del poder de la organización por parte de un grupo maoísta y al hacerlo presentó una mordaz crítica del Marxismo-Leninismo. En “Una nota sobre los grupos de afinidad” llamó la atención sobre una unidad de organización política no-jerárquica utilizada por los anarquistas españoles. Todos estos ensayos influyeron profundamente a la Nueva Izquierda en Norteamérica y Europa, y fueron recogidos en la antología “Post-Scarcity Anarchism” (1971; republicado en 1997 y 2004). A fines de los años 60, Bookchin hizo clases en la Alternative University en Nueva York, (Estados Unidos) una de las “universidades libres” más grande de los Estados Unidos, y en la City University of New York en Staten Island.

En 1974 co-fundó y dirigió el Instituto de Ecología Social en Plainfield, Vermont, (Estados Unidos) que llegó a adquirir una reputación internacional por sus cursos avanzados sobre ecofilosofía, teoría social y tecnologías alternativas. En 1974 también comenzó a hacer clases en el Ramapo College de Nueva Jersey, (Estados Unidos) donde este autodidacta graduado de secundaria eventualmente llegó a ser profesor titular de teoría social; se retiró en 1983 con un título emérito. En la década de 1970 estuvo activo en el movimiento antinuclear y participó en la Clamshell Alliance, que se oponía al reactor nuclear de Seabrook en New Hampshire, Rockingham, Nuevo Hampshire, (Estados Unidos). Su libro “The Limits of the City” (1974) continuó su exploración de las problemáticas urbanas en el pensamiento social radical. Su siguiente libro, “The Spanish Anarchists” (1977), fue una historia del movimiento anarquista español desde sus orígenes hasta mediados de los años 30; tenía planeado escribir un segundo volumen que cubriera la Revolución Española de 1936-37, pero nunca lo escribió (aunque el cuarto volumen de La Tercera Revolución, completado en el 2003, cubre una buena parte de esa historia). Muchos de sus ensayos de 1os 70 criticaban los desarrollos del nuevo movimiento ecológico y distinguía entre la ecología, que consideraba radical e innovadora, y el ambientalismo, o perspectivas reformistas o estatalistas que no eran capaces de abordar la raíz de los problemas ecológicos. Estos ensayos fueron compilados en “Toward an Ecological Society “(Black Rose Books, 1981).

Durante los primeros años de la década de los ochenta Bookchin publicó sus dos principales obras. “The Ecology of Freedom: The Emergence and Dissolution of Hierarchy” (1982; republicado en 1991 y 2005) es una revisión magistral de la ecología y la jerarquía social, que entreteje problemáticas políticos, antropológicos, psicológicos y científicos. Aquí Bookchin explora la noción de la dominación de la naturaleza y su emergencia histórica en primer lugar a partir de la muy real dominación social del hombre por el hombre, particularmente en las gerontocracias, patriarcados y otros estratos jerárquicos. Examinó la jerarquía y la dominación como formas de opresión más fundamentales que las clases y la explotación.

Su segunda “opus magnum” fue “The Rise of Urbanization and the Decline of Citizenship” (1986; republicado como “Urbanization Without Cities” [1992] y “From Urbanization to Cities” [1995]). Esta obra maestra narra la historia de la autogestión cívica, la democracia cara-a-cara y el confederalismo en la tradición democrática occidental, comenzando en la Grecia antigua y avanzando a través de las ciudades medievales europeas y hacia las instituciones populares de diversas revoluciones, particularmente la Americana y la Francesa. El libro culmina en un capítulo que expone el Municipalismo libertario, que es el nombre que Bookchin le dio a su proyecto político. El Municipalismo libertario es una política que busca recrear una vital esfera política local con el fin de establecer asambleas populares de democracia directa a niveles municipales, ciudadanos y barriales. A lo largo de regiones más vastas estas asambleas se confederarían y, a medida que se fortalecieran, pondrían en cuestión el estado-nación centralizado. Argumenta en favor de una municipalización (en oposición a la nacionalización marxista) de la economía, como una forma de oponerse al actual sistema capitalista corporativo de propiedad y gestión. Algunas de estas ideas también fueron desarrolladas en los ensayos compilados en “The Modern Crisis” (1986).

A mediados de los ochenta Bookchin fue una de las inspiraciones de la emergencia del movimiento político internacional Verde y tuvo una profunda influencia en el surgimiento de los Verdes alemanes y más tarde en su ala “fundi”. En 1987 hizo el discurso inaugural del primer encuentro verde en los Estados Unidos, en Amherst, Massachusetts. Aquí inició un debate al interior del movimiento ecológico acerca de la Ecología Profunda, un conjunto de ideas que ganaban influencia en el momento y que él comprendió que tenían implicancias políticas reaccionarias debido a su priorización de la naturaleza no-humana por sobre los seres humanos así como su énfasis en la espiritualidad y el misticismo. También se opuso a las tendencias al interior de los Verdes estadounidenses que querían crear un Partido Verde para llevar candidatos a las oficinas estatales y nacionales; en vez de eso, Bookchin prefería un movimiento verde radical que pudiera educar al público acerca de la necesidad tanto de democracia local como de soluciones ecológicas, en consonancia con el municipalismo libertario. A finales de los 80, como miembro de los Verdes en Burlington, Vermont, (Estados Unidos) participó en varias campañas políticas locales que pretendían crear conciencia de los problemas ambientales en la ciudad, y al mismo tiempo llamar a una democratización de las instituciones políticas locales. En 1988 co-fundó la “Left Green Network”, una confederación de grupos que compartían este enfoque.

En 1990 Bookchin se retiró de la vida política. Continuó enseñando en el Instituto de Ecología Social, donde tuvo el cargo de director emérito, pero pasó la mayor de su parte escribiendo. Con su compañera y colaboradora Janet Biehl, co-editó cuarenta nümeros del boletín de discusión teórica “Green Perspectives” (luego renombrado Left Green Perspectives); éste se convirtió en el principal espacio para sus artículos en dicha década, hasta que dejó de existir en el 2000. En 1996 escribió una crítica del posmodernismo, la misantropía y el antihumanismo que tituló “Re-enchanting Humanity: A Defense of the Human Spirit Against Anti-humanism, Misanthropy, Mysticism, and Primitivism” (1996). Dándole sustento a muchas de sus ideas políticas hay un sistema retrabajado de pensamiento dialéctico, uno que pone una versión “naturalizada”, o basada en el desarrollo, de la dialéctica de Hegel al servicio del pensamiento ecológico. Su concepto de naturalismo dialéctico es elucidado con considerable detalle en su libro “The Philosophy of Social Ecology” (1990, revisado en 1994).

Entre 1992 y 2003 también escribió su inmensa historia de los movimientos populares revolucionarios en cuatro volúmenes, “The Third Revolution” (publicada por Cassel y posteriormente por Continuum entre 1996 y 2003). El volumen 1 cubre las Revoluciones Americana y Francesa; el volumen 2, las revoluciones francesas del siglo XIX, incluyendo la Comuna de París; el volumen 3, las revoluciones Rusas de 1905 y 1917; y el volumen 4, las revoluciones Española y de Europa central. Bookchin ocupó la mayor parte de sus ültimos años en este tremendo proyecto. 

Mientras tanto a mediados de los 90, Bookchin desarrolló serias dudas acerca de su opción en los años 50 de trabajar con el anarquismo como un marco político general. El anarquismo, sospechaba cada vez más, estaba fundamentalmente arraigado en el individualismo, una doctrina que él aborrecía. Comenzó a distanciarse de muchas partes del movimiento anarquista, comenzando con “El Fantasma del Anarcosindicalismo” (1992). Dos años después sostuvo que “la dimensión democrática del anarquismo” era el comunalismo; en 1995 escribió “Social Anarchism or Lifestyle Anarchism: An Unbridgeable Chasm”, como un desafío a que los anarquistas rechazaran el narcisismo y el aventurismo adhoc del “anarquismo como estilo de vida” en pos de un anarquismo comunal basado en los movimientos y las realidades sociales. En su opinión, los anarquistas no estuvieron a la altura de este desafío, y en un ensayo del 2002 titulado “El Proyecto Comunalista” rechazó todo el anarquismo en pos del comunalismo, una doctrina igualmente anti-estatista que él sentía que estaba más explícitamente orientado que el anarquismo a la liberación social más que individual.

La vida y la obra de Murray Bookchin abarcó dos eras históricas: el periodo de entreguerras, cuando la Gran Depresión parecía llevar al capitalismo al borde del colapso, y la era de posguerra de la consolidación del capitalismo corporativo. Luego de haber crecido en la época del socialismo proletario tradicional, con sus insurrecciones de clase obrera y luchas contra el fascismo clásico, como adulto cooperó en la creación del movimiento ecológico, abrazó el movimiento feminista como un movimiento antijerárquico, y desarrolló su propia política democrática, comunalista. Analizó estos cambios arrolladores en la sociedad y en la consciencia, insertándolos en un marco coherente que deseó pudiese conducir a un futuro liberado. A aquellos interesados en conocer más profundamente sus ideas, él siempre recomendó “Remaking Society” (1989), su introducción a sus propias ideas; “The Murray Bookchin Reader”, editado por Janet Biehl en 1997; y el resumen de Biehl de sus ideas políticas, “The Politics of Social Ecology: Libertarian Municipalism” (1998).

El 30 de Julio del 2006, casi un año después de la publicación del cuarto y último volumen de “The Third Revolution”, Bookchin murió de una insuficiencia cardíaca en su hogar en Burlington, Vermont, (Estados Unidos). Murió como siempre había vivido, como un socialista, con integridad.