Tres días del mes de Julio se invirtieron para trabajar en la elaboración de estrategias pedagógicas en todas las instituciones escolares de los diferentes niveles y modalidades de la provincia de Mendoza con el objeto de abordar lo queda del año escolar y asegurar calidad educativa según versa la resolución N° 211 de la Dirección General de Escuelas.
Es llamativo que, como material de trabajo, se haya propuesto un video de los eventos TEDX patrocinados por la ONG gestionada por el adinerado arquitecto de Pensilvania llamado Richard Saul Wurman y por el reconocido diseñador Harry Marks de Inglaterra.
Para sorpresa de muchos, la ONG en cuestión se dedica al desarrollo y promoción de la tecnología, el entretenimiento y el diseño (que es justamente lo que significan las siglas TED) articulando su labor con la promoción de charlas o conferencias que pretenden divulgar “ideas que merezcan la pena”.
Una pregunta desde el sentido común radica en intentar comprender qué tipo de vinculación puede existir entre una organización de la Sociedad Civil que se dedica al entretenimiento con la gestación de estrategias pedagógicas en el marco de la educación pública.
Por otro lado, ¿acaso no existe producción de saberes y educadores de reconocida trayectoria dentro de las instituciones educativas locales que sumen contenido y recursos suficientes desde lo educativo, pedagógico y didáctico para pensar qué tipo de educación necesita la provincia, enriqueciendo sobremanera el desarrollo de las jornadas educativas? Pareciera que no. Conviene más introducir una conferencia que procure entretener al oyente con matices extravagantes y le genere la sensación de que su trabajo profesional es inicuo y que, sí o sí, debe implementar cambios para que la educación mejore aun cuando el sistema esté desarticulado. El cambio es inherente al ser humano y a las instituciones y negarlo sería un contrasentido. Pero lo cierto es que los cambios requeridos en educación son estructurales y recaen sobre las políticas de estado con independencia de la labor de los docentes y la motivación activa de los estudiantes.
Desde hace un tiempo, el diseño pedagógico de TED se ha ido introduciendo en la educación pública a través de las escuelas secundarias de todo el país administrado por la fundación Varkey cuyo exponente principal es Sunny Varkey quien detenta la administración de GEMS EDUCATION empresa de educación internacional que pretende imponer un modelo de educación globalizada funcional a la lógica del mercado.
Se va consolidando una tendencia clara de desmembramiento de la educación pública, para dar tránsito abierto a las corporaciones internacionales, las fundaciones y las ONG corporativas con la intención de convertir a la educación en una mercancía.
El sujeto de las políticas educativas contemporáneas es un sujeto sin historia, sin geografía, sin derechos laborales, ni colectivos, descartable y funcional a la economía de mercado.
Veamos, un poco, el desarrollo de la conferencia propuesta y evoquemos algunos criterios de análisis.
El título: “Enseñar y aprender desde los pies a la cabeza”.
Orador: Hernán Aldana, un especialista en biología que realiza una crítica sobre pedagogía.
El objetivo de su exposición gira en torno a poner en relevancia la funcionalidad del cuerpo y del cerebro para garantizar el aprendizaje y la enseñanza.
Expone, desde una perspectiva cientificista, el resultado de tres investigaciones como disparadores y fundamento de su argumentación.
En primera instancia, para resaltar la importancia del cuerpo, presenta a la esponja de mar como el primer animal multicelular sin cerebro de lo que infiere la preponderancia del cuerpo como organicidad por encima de las funciones cognitivas.
Luego presenta las medusas para versar sobre la importancia y función de las neuronas con relación a la integración y aprovechamiento del medio.
Prosigue relacionando a los primates con el ser humano para hablar del sistema nervioso, su evolución y la adaptación al ambiente.
Por último, alude a la inteligencia emocional, resaltando que sólo se aprende si hay emociones. La emoción la entiende como una reacción corporal. Para él las emociones no son exteriorización de la persona como una unidad psico-físico-espiritual-social, sino un invento independiente del cerebro que usa el cuerpo.
Su conclusión: “Aparece primero el cuerpo y luego el cerebro en función del cuerpo para mejorar la interacción con el medio”.
Transfiere los postulados generales de las neurociencias al ámbito educativo. Ello presenta, desde el inicio, grandes problemas prácticos y epistemológicos. El más evidente radica en que las teorías referidas a las neurociencias están a medio camino en su elaboración y falsación y, por lo mismo sería, al menos temerario, pretender su aplicación lineal a cualquier otro ámbito que no sea el de su propio campo de investigación y aplicación.
Reduce la corporalidad de la persona a mera organización biológica, desconociendo su dimensión contextual, social y vincular.
Para él la educación de calidad pasa porque el alumno se mueva. “Que mueva sus vísceras… a mayor movimiento mayor participación…”
¿En algún otro lugar, se ha escuchado algo tan mecanicista y biologicista?
La educación de calidad depende de muchas variables y, hoy por hoy, éstas escapan al estudiante y al educador. Y si vamos a puntualizar en el cuerpo, la mayor participación no radica en el movimiento de las vísceras sino en la elaboración y resignificación de la experiencia de la persona que es su cuerpo.
Por último, arenga sobre la necesidad de poner el cuerpo en la educación.
Me pregunto: ¿Los docentes no lo vienen haciendo desde hace rato junto a sus estudiantes?
- Cuerpos devaluados con salarios magros.
- Cuerpos expuestos a un virus que amenaza con enfermarlos mortalmente, que algunos, de hecho, los ha enfermado y por el que otros muchos han perdido la vida.
- Cuerpos desmotivados por la denigración de su profesión.
- Cuerpos extenuados por la sobrecarga de trabajo.
- Cuerpos intimidados por estructuras edilicias precarias en las que deben desarrollar su trabajo.
Otro tanto podemos decir en cuanto a los estudiantes:
- Cuerpos entristecidos por la pérdida de la vida de sus seres queridos, en especial de sus padres en este contexto de pandemia.
- Cuerpos que intentan recuperarse de las secuelas que les ha dejado el virus contraído.
- Cuerpos sobre exigidos por el trabajo que tienen que realizar para poder apaliar la economía doméstica a la vez que estudian.
- Cuerpos atravesados por la pobreza, el hambre y el flagelo de la droga.
- Como docente puedo citar el caso del cuerpo sin vida de un estudiante de una institución educativa del departamento de Guaymallén cuya familia reside en un micro, que hace muy pocos días falleció de un coma diabético a causa del frío.
Y así podríamos mencionar un largo etc.
En nuestra provincia, no hay vísceras que mover, sino personas que contener, escuchar, acompañar y promover en el desarrollo del juicio crítico para apurar aquella transformación de la realidad que necesitamos para vivir mejor, con calidad, en plenitud.
La exposición comprime el cuerpo a organicidad para invisibilizar el contexto crítico. Por lo mismo, se oculta la razón de los problemas sociales. Se reduce la educación a entretenimiento que estimula el organismo para que se adapte al mundo dado sin tener deseo y chance de transformarlo. De este modo, sin transformación del mundo, tampoco hay transformación del sujeto. Sin trasformación del sujeto se abate el sentido de la educación, no hay lugar para el aprendizaje significativo, ni margen para la utopía de un mundo más humano, equitativo y habitable.
Gerardo Bustamante.
Lic en Educación.
Prof. en Filosofía
Tec. Sup. en Psicología Social.